Era una noche realmente acogedora, aquella brisa que movía levemente los cabellos de Ryeowook, quien se dirigía a su casa después de una larga jornada de trabajo, con sus articulares puestos, y reproduciendo a Jonathan Rhys Meyers. Pasó por su panadería favorita para comprar unos pastelillos de menta.
Al entrar al establecimiento esperaba ver a su pretendiente YeSung, cuál fue su sorpresa que este no se encontraba ahí, estaba siendo reemplazado por un chico bastante atractivo, cabe destacar que era más alto que él, sus ojos avellanados y su piel un poco pálida, Wook sintió que sus mejillas tomaron un color carmín al notar que el chico se le quedaba viendo, así que solo se limitó a tomar sus cuatro pastelillos, e ir a pagar a la caja en donde se encontraba el chico de hace unos instantes.-¿Sería todo?- Preguntó el chico detrás del mostrador.
-Asi es.- Musitó evitando mirarlo a los ojos puesto que su mirada era directo hacia él, tenía que admitirlo el chico era guapo, aquel porte realmente lo hacía aún más atractivo.
Sacó su billetera y pagó, el chico registro la cantidad en la caja registradora, así que en ese corto tiempo Ryeowook logró leer en el gafete el nombre del chico "Cho KyuHyun" era un nombre bonito, pero el chico no se veía muy amigable que digamos.-¿Y Yesung?- Preguntó Ryeowook mientras tomaba su bolsa de pastelillos.
-Ha pedido el día con el jefe, así que me tocó cubrir su turno-. dijo está vez sin siquiera despegar la mirada del más bajo.
-Entiendo, bueno gracias.- Dijo Ryeowook amablemente, dándose la vuelta para salir del establecimiento.
Después de unos minutos más caminando al fin había llegado a su casa, entró en esta, se quitó los zapatos y los dejó a un lado de la puerta en donde emprendió rumbo hacía la cocina, se preparó un café y posteriormente tomó asiento en un banquito que estaba frente a la encimera de la cocina, dió un sorbo a su café y una mordida al pastelillo que tenía en su mano, por alguna razón le hizo recordar el pequeño suceso que había transcurrido en la panadería, la mirada de aquel sujeto lo tenía envuelto, esos labios que incitaban a besarlos, después de unos segundos negó ante la idea, llendose a dormir.A la mañana siguiente Ryeowook se despertó a las 5 AM para así meterse a bañar y vestir con unos jeans algo desgastados, ajustados, y un polo blanco, acompañado de unos tenis blancos.
Bajo a desayunar fruta picada, su vaso de jugo y emprender así camino a su trabajo, al llegar al estudio saludo a Donghae su mejor amigo.-Hola Haehae, ¿Como estás?, ¿Cómo va mi sobrina?, ¿Cómo está SiWon?.
-Hola Ryeo, pues que te puedo decir ya casi no peleamos, creo que eso es un avance, ¿No?
-Pues supongamos que si- trató de darle ánimos ya que Donghae se había casado con SiWon desde hacia tres años, como describir la relación de este par, cómo todo al principio era color de rosa, pero en el último año las peleas iban en aumento, por la inseguridad de SiWon hacia Donghae. Hae llevaba 5 meses de gestación de una niña.
-Bueno, vamos a trabajar, el Señor Park quiere sus fotografías lo más antes posible.- Comento Hae arreglando el lugar
-No hay problema, mañana tendrá sus fotografías.-
-Wook, cuando venía para acá, lo ví de lejos, ¿Sabes?, Tuve demasiado miedo pensé que el jamás nos encontraría .. -
-Hae tranquilo yo cuidare de ustedes dos, aún si te soy sincero, igual creí que aquí jamás nos encontraría y al fin nos dejaría de perseguir después de lo que pasó.- El más bajo se recargo en una mesita en donde tenía algunas de sus cámaras.
-¡Ay, Ryeonggu!, Ya no quiero que él nos siga atormentado la vida.-
comentó por último Hae, a lo cual Wook asintió regresando a sus labores de arreglar las fotos.
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✨"The Stupid Bet"...✨
Teen Fiction¿Entonces esto para ti, solo fue un juego?.- pregunto al borde de las lágrimas, no podía seguir escuchando esa confesión. El chico asintió con cierta indiferencia, aunque por dentro estaba arrepentido como decirle al pequeño que no era cierto, que...