059. Perséfone: La Hija.

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Nuestro pequeño picaflor,

-No debiste haber sabido eso,- Me dice mi hermana, pálida como el papel.

Una parte de mi quiere, o quería, que lo niegue. Que llame al espíritu, que me miraba cómo a un milagro, mentiroso. Que me dé otra versión y jure por el Inframundo que ama que no es mi madre biológica.

No lo hace.

-Quiero saber que pasó.

-Llamaré a madre.

-No,- La detengo. Sé que madre podría convencerme, a ambas, de abandonar el tema y, además, se sentirá terrible en cuando sepa que ya sé,- No quiero a mamá aquí, quiero saber que pasó, 'Séfone.

-Es cierto,- Murmura Perséfone,- Yo fui quien te concibió en su vientre, no ella.

-¿Y Hades?- La miré a los ojos,- ¿Que hay con Hades?

-Bien sabes que no eres el primer hijo que concibo, y que jamás he tenido hijos de Hades.

-Creí que amabas a Hades, ¿Por qué tendrías una relación romántica con mi papá?

-Porque jamás tuve una relación con ese hombre.- Suspira, y acaricia uno de mis hombros,- Deméter y yo hicimos un trato. Ella me dejaría en paz, a mi y a mi matrimonio con Hades, si fijamos que él me había secuestrado... Y le daba una hija mía. Ella tuvo un relación con él, tomando mi forma, y una noche fui yo quien se metió en su cama, y fui yo quien quedo embarazada.

-Y me robaste. Me separaste de mí papá

-¿Eso es lo que te importa? Es un mortal.

-Pero me amaba, me amaba porque soy su hija y ya. No necesitaba nada más para que me amara,- Hay algo tan terrible en eso, para mí,- creo que... No quiero verte ahora mismo.

Me está mirando como si acabara de hacerle daño, terrible e irreparablemente.

-Cassie...

-Él me amaba,- Me alejo de su tacto,- Y tú me entregaste como una canasta de fruta, una bandera blanca, le perdiste perdón a mamá y le entregaste una niña para que la moldeara como a ti. Una muñeca.

Fui amada.

-o-

Granada | Fruta Prohibida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora