Sueños de Lujuria

Capitulo7: El soñador

Una vez que me comencé a dormir, mi mente comenzó a descontrolarse los sueños comienzan a formarse en mi mente, aunque no logro ver de manera muy clara lo que se esta formando puedo asumir por la silueta que son personas creo que eran tres personas con el pelo largo y mediano, de ahí tuve otro sueño en este estaba en la playa junto a ellas aunque no les podía ver el rostro parecía que estaban sonriendo mientras me llamaban, fue algo dulce pero extraño ala vez ya que ellas me conocían pero yo no podía reconocerlas.

todo era perfecto hasta que me madre me despertó para decirme que debía de desayunar para comenzar de vuelta a ir a ala escuela.

mierda siempre a sido así en la mejor parte de todos mis sueños siempre me l

han levantado, que are ahora.

Leo: bueno supongo que ala gran mayoría de ustedes les ha pasado o no?, aunque volviendo al tema.

Después de esto espero poder recobrar el sueño, baje hacia la cocina de ahí desayune un poco de carne asada con ensalada que me madre me había dejado, después de eso regrese a mi habitación, acabe de guardar los materiales en mi mochila, de ahí salí de mi casa mientras camina por la banqueta para llegar al instituto, me encontré con otra de mis amigas una de las cuales era linda pero ala vez temible, ya que le gustaba lo que eran las peleas y el combate, si mal no recuerdo su nombre es Laura.

Es bella, fuerte, lista y aparte de que es temible tiene un lado encantador una vez que la conoces.

Lo mas seguro es que se pregunten como llegamos a conocernos, la respuesta es simple íbamos al mismo curso de artes marciales.

A Laura se le conocía en ese curso como Furia Escarlata, debido a que le gustaba teñirse el pelo de rojo y a su gran fuerza que tiene para golpear, casi siempre todos los demás alumnos del curso no la querían como compañera, ya que temían que acabaran noqueados, así que ¡oh sorpresa! yo era el muñeco de pruebas que acompañaba a Laura siempre en las practicas.

Laura: listo leo porque no me voy a contener aunque seas tu.

Leo: oh por favor dios dame un respiro.

Laura: bien preparados, ahí voy.

Al acabar el combate acabe con la mitad del cuerpo dormido, si dormido por muy exagerado que suene así paso, lo único bueno es que de ahí nos fuimos conociéndonos poco a poco hasta llegar a ser amigos, jamas pensé que fuéramos a ser muy cercanos, ya que a primera vista parecía la típica chica dura y violenta de esas que vez toda marcada del cuerpo. si ya saben musculosa pues no fue del todo correcto, al final parecía todo lo contrario una chica frágil, tierna y amable, lo cual reconozco que me impacto mas de lo usual.

Ahora volviendo a la actualidad, veo que no ha cambiado nada después de tanto tiempo, sigue exactamente igual de carácter y fuerza lo que me da gusto el que seamos amigos, porque imagínense tenerla de enemigo que dios se apiade del pobre chico que le toque eso.

Después de encontrarnos comenzamos a hablar un rato de cualquier cosa que recordaremos del pasado o que nos haya pasado.

Todo iba bien en la platica que teníamos, hasta que me pregunto por que tenia el brazo enyesado, me quede callado tratando de no responder la pregunta, hasta que me tomo del cuello de ahí me dijo:

Laura: Idiota, porque siempre tratas de verte como un héroe, entiende que hay personas alas que les preocupas.

Leo: perdona... no pensé que te pondrías así.

Laura: idiota, inbecil es lo mejor que puedes decir solo un perdona o lo siento, no juegues con migo.

Me quede callado después de todo ella tenia la razón, era ilógico discutirle ya que podrían pasar como 2 cosas:

acabo con mas huesos rotosacabo como un patán con huesos rotos.

fue ahí mis dilemas mentales por los que paso ahora mismo mientras hablo con ella, pasaba el tiempo mientras que todo se calmo mientras paramos en un puesto de joyería, había una gran cantidad de anillos y collares para escoger, en ese momento decidí cambiarle al tema para que las aguas se fueran calmando poco a poco.

se que no fue muy bueno de mi parte pero nunca fui bueno para soportar ver a las mujeres llorar o preocuparse, siempre trataba la manera de que dejara de estar preocupada o deprimida.