Los selfies. Era lo único que le preocupaba tras retwittear la famosa foto del selfie de los Óscar hace unos meses. Sus redes sociales estaban inundadas de selfies, ninguna de lejos ni nada,solo selfies. Alejandro,de 17 años,vive con sus padres en un apartamento en pleno centro de Torrejón de Ardoz. En ese día, le acababan de dar las notas, y se ha dado cuenta de,que a gracias al profesor de Latín, se había salvado de estudiar ese verano.
Nada más recoger las notas, se fue a su casa con su amigo Rubén. Se quitaron la ropa y se quedaron en bañador,para darse por fin el primer chapuzón del año.
-¡Vamos ha hacernos un selfie para colgarlo en mi instagram!-dice Alejandro,cogiéndole por el brazo-.
-¡Ya estamos otra vez! Cómo sigas así,vas a acabar cómo los “tuitstars" esos que dicen que follan sonrisas.
-Venga,porfa,el único que te pido.
-Esta bien, pero el único, ¿me oyes?
-Ay Rubén,esta bien. Ponte al lado mía
Se colocan,y “clic". Alejandro la sube directamente a instagram,con el titulo “#Selfie #friend #summer".
Tras eso,aprovecha que Rubén está distraído y lo lanza al agua. Acto seguido, se lanza casi encima suya de bomba.
-¡Cacho bestia,me podrías haber echo algo!
-(Se ríe) ¡Lo siento mucho! Venga vamos ha hacer unos largos quejica.
-Vete a tomar por culo.
-But first,let me take a selfie!
ESTÁS LEYENDO
#SELFIE
Teen FictionPara el,los selfies era lo único en su vida,hasta aquel día de vacaciones.