dichoso sea el pincel que roce aquel dulce lienzo
aquel dulce lienzo que matiza con mis encalladas manos
que acompañan sus texturas aterciopeladas
juro que no puedo discernir cuál es la fuente de tal luminosidad
al verlo posar suavemente frente al circular espejo gris
dichoso sea quien en su mano sostenga tal delicado pincel
y tenga a su libre merced aquel dulce lienzo
oh, dulce padecimiento!