Beautiful Nature - Leo Fitz

Pequeña Gran Demostración

Capítulo 6

Iris estaba sentada en la cama, a su lado estaba Jemma concentrada mientras sacaba sangre de su brazo, Phil y Daisy estaban sentados frente a ella en el sofá, y Fitz estaba colocando con suavidad electrodos en la cabeza de ella.

- Estos son los sensores que te mostraran la actividad de mi cerebro ¿Cierto? – Ella lo miro atentamente –

- Si, es así – La miro asombrado - ¿Cómo lo sabes? ¿En Grindla, también los usaron?

- Lo intentamos, yo lo leí en un libro y pensé que podría funcionar – Se encogió de hombros – Ya sabes, ver como reaccionaba mi cerebro al usar mis poderes, pero no resulto.

- ¿Se puede saber por qué? – Se unió Daisy –

- En mi planeta la tecnología no es tan avanzada como lo es aquí en la tierra, o en otros lugares de la galaxia, somos gente de la naturaleza, Campesinos según los de otros planetas – Hizo una mueca –

- Creo que tu idea fue muy buena, aquí podemos completarla – Le sonrió con amabilidad Jemma –

- Eso espero, el problema no son mis poderes – Tomo sus manos con fuerza – El problema soy yo – Mordió su labio –

- Solo tienes que aprender a controlarlos – Daisy se levantó y se quedó a un costado de Fitz-

- Mis emociones no me dejan -La miro afligida – Soy un desastre

- No seas pesimista -Miro a su jefe en busca de apoyo y él le asintió en respuesta – Mira.

Salió de la celda y se quedó parada en frente a la puerta para que Iris tuviera visión de ella, estiro sus manos apuntando al suelo y todo el edificio comenzó a temblar, la chica la miro asombrada, Daisy volvió a su lugar junto a Fitz quien había terminado con los electrodos.

- También tienes poderes ¡Los Terranos son muy interesantes! – Exclamo extasiada –

- Solo algunos, y es porque tenemos ADN Kree en nuestra sangre...

- ¡Son Inhumanos! – La miro Asustada –

- Si, nos conoces – Soltó confundida al ver su expresión –

- Claro, somos campesinos pero eso no quiere decir que seamos ignorantes, el experimento con los Terranos de los Kree, fue fuertemente criticado por casi todo el universo, Odín, Xandar y muchos más dejaron su alianza con ellos, se creía que habían creado a los más fuertes guerreros, los Inhumanos, pero millones de años más tarde firmaron un tratado de paz con Xandar declarando exterminados a los Inhumanos – Hablo rápidamente – No me pareces mala, Agente Johnson, pero los Kree no son precisamente buenos – Hizo una mueca –

- Tranquila, lo sabemos, bueno sabemos que son malos – Hizo una mueca – No todo lo demás – Frunció el ceño mirando a su jefe –

Jemma, parcho con delicadeza el antebrazo de Iris y se levantó, se situó junto a sus compañeros y le sonrió tranquilizadoramente.

- Gracias por tu sangre Iris, la revisare y hallaremos una forma de ayudarte.

- Ahora podrías usar un poco de tus poderes para revisar cómo reacciona tu cerebro – La miro con paciencia, Fitz –

Ella respiro profundo y asintió, estaba asustada, pero quería ser ayudada, quería ser un bien, no quería destruir la tierra, no quería más muerte.

No más guerra.

Se levanto y con delicados gestos de sus manos, formo una esfera de agua entre ellas, la manipulo jugando con su forma, su cuerpo estaba tenso, estaba completamente concentrado en no crear un caos.

Desapareciendo el agua, jugo con sus manos creando un poco de viento dentro de la celda, pequeñas enredaderas comenzaron a trepar por sus piernas, ya no era solo viento, ahora estaba acompañado de diminutas flores y hojas.

Todos estaban mirando asombrados a su alrededor, conmocionados por la belleza de los poderes de Iris, podía crear vida de la nada, Fitz veía la pantalla de tanto en tanto anotando cosas en su tablet.

Iris quería mostrarle todas las facetas de sus poderes, nerviosa tratando de no pensar en que podría pasar si se descontrolaba, unió sus manos y al sepáralas una pequeña pero fuerte flama de fuego bailaba en su palma, comenzaba a sentir el calor dentro de la habitación.

Poco a poco las cosas se comenzaron a secar, sonrió al ver como mantenía el control, miro a los Agentes y ellos la miraban sorprendidos, quizá los estaba asustando, el señor Fitz no la estaba viendo, tenia la mirada fija en la pantalla concentrado, rápidamente ceso el fuego de sus manos, no quería crear un incidente, ya se estaba comenzando a sentir ansiosa.

Quería demostrarles que era buena, por lo que se acercó a la agente Johnson y Simmons, y les creo las más bellas flores que recordó de su pueblo, las puso como coronas en sus cabezas y les sonrió con alegría.

Se sentó en la cama esperando sus reacciones, de pronto noto su alrededor, la habitación ya no era de ese blanco cegador, las paredes estaban cubiertas por enredaderas con esas flores que tanto le gustaban, sus descalzos pies sintieron el pasto en el suelo, en la esquina más alejada creció un árbol de bagado, sintió sus ojos llenarse de alegría al recordar a su madre.

Ya no estaba en una celda en la tierra, estaba en su hogar en Grindla.