Une Romance Abrupto

Parte 1

Era un día como cualquier otro para Alec, en el que era imposible pronosticar el clima pero estaba seguro que llovería en cualquier momento, posiblemente lo percibió por las nubes grises que chocaban con las nubes blancas y las alejaban en el horizonte, iba pasando por la avenida principal de la gran ciudad y allí estaba un chico realmente guapo a sus ojos; delgado con unos ojos claros y distintos, un cabello con rizos bien formados y cuidados. 

Este chico iba caminando perdidamente por la calle sin notar el vendaval que venía, así que Alec decidió aprovechar que iba por su lado de la calle y estacionarse junto a él, sonó a la bocina para llamar su atención, y le pregunto a dónde iba, el chico se asusto pero el indico que iba cerca del Wellingon Arch.  

- Por qué no usas el metro? - es cuando menos curioso con el día que se ve venir, aunque Alec no podía quejarse, al menos eso le dio la oportunidad de conocer al chico.

-Pues tengo que moverme un poco y hacer algo de ejercicio- le dijo con una sonrisa incomoda, se ve que no le gustaba la idea de subirse al auto de un desconocido.

-En serio, paso por el Arco, puedo acercarte, además parece que lloverá muy fuerte - quiso insistir un poco, no se conoce un chico así de guapo todos los días. 

-No te preocupes, si sucede eso ya correré, en serio, no pasa nada - le dijo y se dispuso a seguir caminando. 

Alec sonrió y se dijo así mismo que valía la pena insistir un poco mas  así que condujo a su lado esperando que cambiara de opinión. 

Como es usual en esta ciudad el clima empeoro en segundo y entre la intensa lluvia y el viento su delgado jersey no lo protegería mucho, al final Alec optó por demostrarle a este chico que no tenia mala intenciones, así que apago del todo su auto, saco su paraguas y una suéter extra que siempre llevaba consigo y corrió a taparle, de manera que el joven no tuvo otra opción que subir al carro con este tipo tan guapo. 

Alec ya sentía hambre y buscaba algún sitio para comer, aunque sentía en su piel que su acompañante no dejaba de mirarle, (a lo cual el se sentía tan extrañamente acalorado y feliz) giro su cara con pretexto de buscar algún sitio del otro lado de la calle y pudo ver que el chico voltea su cabeza e intentaba disimular, aunque para los dos era evidente lo que sucedía.

Al final terminaron entrando al sótano del  London Hard Rock Café, Alec observo a su acompañante unos segundos más y le sonrió bajándose del carro, dando la vuelta rápidamente para abrirle la puerta, a lo cual en ese preciso momento Agustín tenia ganas de huir pero por alguna extraña razón no lo hizo ademas que se puso algo rojo por el gesto que hizo Alec pero lo siguió adentro del restaurante, Alec trato de sentarse en un lugar más privado, mientras llegaba el mesero a tomar la orden, decidió sacarle un poco de conversación, pero lo único que consiguió fue su nombre Agustín, se llamaba el chico. 

La comida fue un momento incómodo para los dos porque sabían como empezar la conversación, sobre todo porque Agotó el golpe con la pierna derecha de Agustín, y lo que Agustín se puso nervioso que casi derrama su bebida. 

Al final de la comida el mesero vino a recoger los platos y darles la cuenta es cuando Alec aprovechó un toque la mano de Agustín y el agrado bastante, su caloría, su textura aunque tampoco dijo nada y el nerviosismo del joven era más que notable.

Cuando hubieron terminado de pagar bajaron al lugar del lugar para que Agustín tomara sus cosas y que pudiera seguir su camino, que sea poco más lento que caminar bajo techo.

-Espero que no te parezca muy rara esta pregunta, -Alec titubeaba un poco era muy indiscreto soltar una pregunta así, pero no pensaba dejar pasar la oportunidad-, Eres gay? - Agustín no sabía que decir ni hacer, se puso blanco como un papel y parecía a punto de desmayarse, así que Alec decidió ayudarle un poco-, lo que pasa es yo si lo soy y la verdad, aunque solo se tu nombre y como te ves, me pareces no solo guapo, sino lindo y bello y tu timidez es muy atractiva también. 

El pobre Agustín, que no sabe cómo tomar todo eso decidió que lo mejor era sentarse en un sitio y tomarse un momento para pensar, lo que era más cercano era el maletero del carro y lo había enviado, oculto la cara entre sus manos y su amigo que su rostro se ponía totalmente de color carmesí, pronto la ansiedad se apoderaba de su cuerpo. 

Decidido, tomó un poco de aire para retomar lo que tenia que hacer, justo entonces sintió que Alec se sentaba a su lado en el auto y se volteó para mirarle tan solo para encontrarse con sus labios a escasos centímetros de los suyos y no lo pensó mucho, dejo a su cuerpo tomar la decisión por el y lo beso, beso a Alec con pasión, aunque no duro mucho, porque al darse cuenta de lo que hacia detuvo y quiso bajarse, pero el no lo dejo, lo tomo del brazo, lo hizo subirse a sus piernas y esta vez Alec fue quien tuvo la iniciativa y lo beso, no porque le interesaba tener sexo con ese chico, sino porque esos labios lo volvían loco, su lengua le transmitía una bomba de sabores y sentimientos que recorrieron todo su ser, este beso si tardo algunos minutos , luego Agustín se bajo de las piernas de Alec y se sentó donde estaba, bajo su rostro y no se atrevía a decir nada, por lo que Alec le entrego una de sus tarjetas de presentación con todos sus datos, levanto levemente la barbilla de Agustín lo beso de nuevo y aunque no quería dejarlo ir, sabia que pronto Agustín debía irse a seguir con sus actividades. 

Seguiré Subiendo la historia, acepto todo tipo de comentarios mientras no sean ofensivos, si quieren que incluya algo a la historia dejare mi correo donde también pueden escribirme a cualquier hora y tratare de responder lo más rápido posible.

dlgk@outlook.es