If You

ஜ-Capítulo 11-ஜ

Narra Jane

El día de hoy sería mi cita con Matthew me siento nerviosa, una cosa es hablar por mensajes de texto y otro vernos de nuevo, después de varias semanas conversando nos veríamos otra vez, el día anterior acordamos la cita para la tarde nos veríamos en el parque cerca de casa, me cambie de atuendo como unas tres veces, hasta que encontré el acertado, y siguiendo los consejos de Lucy me maquille sólo un poco y fui a encontrarme con Matthew, cuando llegue él ya me estaba esperando, lo salude y comenzamos a caminar, la verdad es muy fácil conversar con él, y también parecía que caminamos sin rumbo, simplemente conversamos, es una persona muy inteligente y divertido, pasamos así toda a tarde, lo que para mí fueron minutos, no fue lo mismo para el día que en menos de lo planeado ya apareció la noche y no sólo eso era realmente tarde, como las 8 de la noche, Matthew me acompañó a casa, fue un muy buen día, espero poder salir con él en otra ocasión.

Narra Matthew

Aun no creo que Jane aceptará salir conmigo, ya llevamos varias semanas conversando mediante mensajes de texto y acordamos una cita para mañana, estaba tan nervioso que llegué a aquel lugar unos 20 minutos antes, esperaba que no me dejará plantado como habían hecho otras chicas en el pasado, pero no fue así, la vi llegar, caminaba hacia mí, se veía hermosa o al menos ella es hermosa para mí.

Es increíble cómo pasa el tiempo me pareció que fueron solo minutos los que converse con Jane, al parecer fueron horas, al estar cerca el anochecer la acompañe, hasta su casa que no estaba tan lejos del lugar, ella con una dulce sonrisa se despidió de mí.

Pasaron varias semanas Jane y yo, ahora no solo hablábamos por mensajes de texto, ahora también video chateábamos, estar cerca de ella aliviaba mis tristezas, es que ella era tan alegre y positiva que, aunque el día fuera el más malo podía encontrarle el lado bueno.

Cada día que pasaba más me enamoraba de su sonrisa, acaso en mi mente repetí, acaso dije enamorado, no me podía enamorar de ella, solo la lastimaría, mi lúgubre existencia solo lastima a los que amo, ella para mí solo puede ser una amiga, que conocí por la más rara casualidad y así se quedara.

Narra Jane.

Los días pasaban y creo que me estoy acostumbrando a la compañía de Matthew, es realmente divertido conversar con él.

Era domingo por la tarde cuando Lucy llamo a mi puerta, al parecer había vuelta de una de sus citas con Sebastián, la verdad la veo muy emocionada.

Lucia: Pequeña Jane, te tardaste en abrirme. ¿Qué haces?

Jane: Ehm, tarea. ¿Qué paso Lucy?

Lucia: Nada, vine de mi cita con Sebas. Es tan increíble.

Jane: No crees que te estas emocionando demasiado.

Lucia: Tú crees

Jane: Por supuesto, Lucy toma las cosas con calma.

Me dispuse a servir una taza de café a Lucy, mientras tomábamos el café conversábamos de la relación nada sería que tenía con Sebastián hasta el momento en el que menciono a Matthew, casi derramo mi café por la sorpresa no pensé que mi amiga tuviera idea de que hablo con él. Le dije que nada nuevo que solo éramos amigos.

Así pasaron los meses de tranquilos, aunque terminando enero no eh conversado demasiado con Lucy, ya la estoy extrañando, a quien no hemos visto demasiado es a Eduardo, rara vez es la que nos hace compañía, supongo que por fin entendió que ya no tenía oportunidades con Lucy, pero no me atrevo a decirle nada a Lucy, eso es muy asunto de los dos, con quien eh pasado más tiempo en estos últimos meses ha sido con Rosaline, la verdad es que es muy agradable pasar tiempo a su lado.

Narra Matthew

Estos últimos meses eh conversado demasiado con Jane, me alegra haber podido conversar con ella en navidad, los días podían ser fatales, pero siempre agradeceré el tiempo junto a ella.

Cada vez que siento que soy invisible, que mi mundo se acorta, y que las palabras ya no me alcanzan para poder expresar mi frustración y mi enojo, ahí está, como la luz al final del camino, como un momento de alegría y paz en eso se ha convertido Jane en una luz que me llena de paz, todos esos momentos grises, se esfuman y por al menos unos momentos siento que soy importante para alguien, que aunque mis chistes no tengan gracia, que aunque mis historias no son interesantes, escucha atentamente todo, aun cuando hasta yo siento que no es importante, ella lo vuelve importante.