Celos Nivel Kussun

Chibi-chan

Odiaba todo aquello que robaba su atención, empezando por ese gato que me miraba con superioridad desde su cómodo asiento...

El cual era las piernas de Nan-chan, en las cuales debería ir mi cabeza y sus manos acariciando mi cabello, no aquel pelaje marrón.

– ¿Kussun? –Escuché la voz de Nan-chan llamándome.

– ¿Qué? –Solté sin querer con rudeza.

Desde el rabillo de mi ojo, miré como ella alzaba una ceja.

– Lo siento, ¿Qué necesitas? –Busqué algo más interesante que ver en su departamento, algo que no sean sus ojos inquisidores. 

– Estás haciendo caras raras, ¿Algo te está molestando? –Preguntó con ligera preocupación.

– Tu gato me molesta –Dije en mi mente. –Te preocupas demasiado. –Respondí sin mirarla aún.

– Si no es nada, ¿Por qué no me miras a los ojos?

– No puedo, el programa está interesante.

– Kussun, a ti no te gustan las películas de terror. – ¿Es una de terror?

– S-Siempre hay una primera vez para todo. –Tosí un poco para estabilizar mi voz.

– Claro, si tú lo dices. –Dijo con sarcasmo.  –Mientras “disfrutas” de la película, iré a preparar té, ¿Quieres un poco?

– Por favor, si no es mucha molestia –Sonreí levemente.

– No es ninguna molestia. Mientras lo hago ¿Podrías vigilar a chibi-chan? –Asentí con una mueca.

Sin decir algo más, Nan-chan fue directamente a la cocina, dejándome a solas con el gato.

– No te saldrás con la tuya... –Le susurré a chibi-chan con amenaza.  –Si tengo que actuar como un gato para tener la atención de Nan-chan, lo haré...

Chibi-chan solo me miraba, mientras movía su cola de un lado a otro.

– No me dejaré vencer por ti... –Lo apunté con mi dedo índice, el cual mordió juguetonamente.

Este gato estaba declarando la guerra.

Por estar con la guardia baja, chibi-chan había escalado por mi brazo para llegar a mi cabello.

– Chibi-chan~ duele, suelta mi cabello. –Jalaba suavemente al pequeño gato de mi cabello.

Ahora entiendo el dolor de Nan-chan al lidiar con esto todos los días.

– Parece que Chibi-chan encontró otro cabello para jugar. –Miré desde mi posición a la dueña del departamento.

– Estoy demasiado segura que lo hizo para vengarse.

Nan-chan se acercó a mí, alejando al gato de mi cabello.

– Sí que eres travieso chibi-chan. –El nombrado solo maulló. –Pero tan lindo~ – Restregó su rostro con el gato.

Bufé molesta al ver esa escena.

– Ya no me apetece tomar el té, iré a dormir, si quieres puedes quedarte aquí y dormir con tu gato. –Con rapidez subí hacia su habitación.

– ¿Acaso Kussun está celosa de ti? –Miró al gato. – Eso es algo... infantil. Aunque te he prestado más atención a ti que a ella. 

Ya dentro de la habitación, me había lanzado a la cama y tapado con las sabanas hasta la cabeza.

– Nan-chan tonta... –Susurré aún con molestia.

No mucho después escuché unos suaves pasos acercarse a la cama. Así que fingí estar dormida.