El tener que expresar un sentimiento, no es nada fácil y eso lo sabe perfectamente Ichigo, él cual se encuentra sufriendo al no poder ser lo suficientemente valiente, como para decirle a Rukia Te amo.
100% ICHIRUKI Pequeña historia.
Este es mi prime...
Un chico con cabello anaranjado, parecía caminar tranquilamente por el pavimento de la calle, el cual lo llevaba directo a su casa. Pero este chico escondía un secreto, el cual era un amor prohibido... Él no se había dado cuenta, pero con el paso del tiempo había comenzado a crecer un sentimiento más allá de una amistad, con su pequeña compañera de ojos violetas. Parecía que era lo único a lo cual no se podía enfrentar, ya que el miedo no se lo permitía. Tan concentrado estaba en sus pensamientos, que no se dió cuenta en que momento comenzó a llover y cuando una pequeña presencia, lo comenzó a seguir. En pleno sufrimiento por no saber que hacer, expreso un pensamiento, el cual era un tormento en su vida. -¡Ay, Rukia! ¿Por qué simplemente no puedo decirte que te amo?- Lo dijo con tanta fuerza en su voz, que la personita que lo seguía pudo escuchar a la perfección lo que acaba va de decir, reconociendo en su voz el dolor que sentía en esos momentos. Sin poder soportar lo más, dejo que la fuerza de gravedad hiciera lo que quisiera con él, quedando de cunclillas, sosteniéndose con la poca fuerza que le quedaba en sus pies, continuo sufriendo en silencio. Tanto era su enojo y frustración hacía su persona, que comenzaron a salir lágrimas de amargura y de enojo, ya que no podía soportar el hecho de no lograr lo que deseaba. Después de un tiempo aún no encontraba una solución para su problema, por lo que decidió golpear el suelo con su puño, pero se contuvo al momento de sentir una mano en su hombro. -No puedes decírmelo, porque eres un idiota Ichigo- Ichigo en cuestión de segundos, reconoció la voz, la cual era de la persona que ocupaba sus pensamientos en esos instantes. Entonces dirigió su mirada así donde provenía el origen de esa voz... Ahí se encontraba su amada Rukia. Su impresión era tanta que no puedo decir nada. -Aunque eres un idiota, yo también te amo mi fresita- Diciendo esa última palabra le regaló una pequeña sonrisa donde demostraba su sinceridad. Cuando terminó de decir esas palabras, él sin pensarlo 2 veces, rápido se puso en pie y en un abrir y cerrar de ojos tomo el pequeño rostro de Rukia y beso sus labios de una forma apasionado, demostrando el amor que sentía por ella. La pequeña ojivioletas, no tardó mucho en corresponder. Y así en plena lluvia, en la calle solitaria, cerca del parque, se confesaron su amor y se dieron su primer beso. Y desde ese preciso momento comenzó la historia... De una amor eterno.
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Holi varios no me conocen y eso no me sorprende jajaja. Esta es mi primera historia así que notarán que soy muy mala en esto, pero por lo menos lo intente. Espero tener su apoyo y opiniones hacerca de como mejorar mi narración. Yo me despido HASTA LUEGO BYE
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