Mi cómplice eterno (kyuhyun♥) [PAUSADA]

6.-Tú, de nuevo ♥

«jueves 15 de enero »

 Me dí vuelta en mi cama quedando mirando al lado de la muralla de mi habitación, tapada hasta las orejitas porque aún sentía mucho frío y fiebre. Pude dormir hasta las 12 ya que, sí seguía se me iba a atrasar mucho y pretendía irme caminando hasta la universidad porque con el movimiento de la micro me dolería la cabeza.

-otro día, esto se está volviendo cada ves más difícil simbal- le dije a mi gato que había saltado hasta mi cama, me miro, pestañeo un par de veces de manera pausada y se acercó hasta a mi ronroneando.

-miau- exclamo, debido a que tenía hambre.

- yo te daré comida sólo tenme paciencia- dije, parandome apenas de la cama, aún con mucho dolor de cabeza.

le dí comida a mi gato, prendí el califon para bañarme, puse agua a hervir para tomar desayuno. Me asome por la ventana para ver como estaba el día y sólo vi algo que llamó mi atención. - ese auto, él, ¿qué hará acá?- salí de manera flash de la ventana porque el joven había mirado hacia donde estaba yo, se aceleró mi corazón y quede inmóvil apoyada en la muralla de mi habitación.

- qué te está pasando Amada, controla esos sentimientos por favor, ignorar al mundo es la mejor solución- me dije a mi misma en voz alta para que no se me olvidara nunca.

Me acerque al closet para sacar unos jeans, una polera simple, un chaleco de lana, unas zapatillas, mi cuello de lana, mi gorrito de lana y mis guantes. Me coloqué todo y me hice una trenza espiga para poder colocarme el gorro y no quedar toda chascona. Saqué mi cartera grande y eché mi cuaderno, escuche, documentos, maquillaje y todo que una mujer tiene en su cartera, use o no lo use. Me hice un té y me tomé una pastilla para bajar la fiebre que aún tenía.

- 1:30, ya debo salir- dije mirando mi reloj. Tomé mi cartera, me coloque los guantes ya que estaba helado el día.

-espero ya se haya ido- dije mientras salía del ascensor y me dirigía a salir por la puerta principal del edificio.

«narra kyuhyun »

estaba nervioso, me peinaba a cada rato para asegurarme de estar presentable para ella. ¿qué estará haciendo? ¿Por qué se demora tanto en bajar? según su horario tiene clases a las 2. -kyuhyun tranquilizate- me dije mientras miraba la puerta principal del edificio.

- annyeonghaseyo ¿cómo está?- no, no no qué le puedo decir, bajo qué excusa vine hoy a verla -va a pensar que soy un...-

De pronto la vi salir, ahí estaba a escasos 6 metros de ella y no tenía el valor para acercarme  ¿qué tan fuerte es está atracción? hasta que punto he llegado para sentirme así. Por qué es tan malvada la vida conmigo que no me da el valor para acercarme y decirle lo hermosa que se ve hoy. Sólo 6 metros, seis metros de la persona que me cambio la vida en sólo un segundo, con sólo mirar sus ojos me dije cuenta que ella era la mujer que he estado esperando durante todos estos años. Despierta cho kyuhyun que se va a ir y no conseguirás nada.

De pronto Amada miro hacia el lado izquierdo primero para ver sí podía cruzar la calle y luego hacia el lado derecho encontrándose conmigo, me miro sorprendida e incluso me atrevo a decir que se sonrojo, lo que es yo al momento de sentir su mirada en mi no pude mantenerme en pie, mis piernas temblaban, en mi estómago sentía un cosquilleo y mis mejillas estaban totalmente rojas, ella... ella es lo mejor de lo mejor.

-Annyeo..- iba a hacer una reverencia pero ella desvío su mirada hasta el suelo y siguió su camino, su cara era distinta a la de los otros días, no era esa mirada que siempre tenía, esa mirada distante queriendo alejar a todos de ella. No, hoy su mirar era triste, sus ojos tenían un brillo distinto, su aspecto lucía cansado y de seguro no quiere ayuda.

-¿Por qué es tan difícil llegar a ti?- dije con rabia y pena a la ves, pateando la rueda de mi auto.

«narra Amanda»

-tonta, tonta- me dije a sí misma. Queriendo llegar lo antes posible al trabajo y olvidarme de él.

No podía negarlo, él causaba algo en mi, un no sé qué, que me hacia ser una completa tonta por la felicidad que sentía cada que lo veia, pero a la ves me hacia ser la mujer las pesada del mundo al tratar de alejarlo de mi.

seguí caminando hasta llegar a la universidad, tomé asiento en mi banco de la sala y me recoste sobre la mesa, aún estaba con fiebre y no me sentía bien. Lo que recién había ocurrido no podía sacarlo de mi cabeza y los sueños de ayer rondaban en mis pensamientos cada segundo.

-annyeong clase- una voz cansada exclamo. Amanda llego el profesor C O N C E N T R A TE, please.

«narra kyuhyun»

me quedé allí parado hasta que Amanda desapareciera entre las calles, por está semana ya la he molestado bastante y ella no quiere nada de mí, asi que preferi no seguitla. ¿Por qué?, está es la primera ves que siento algo así por alguien, pero aunque la quiera proteger o saber de ella, ella no corresponde a mis sentimientos, pero aunque no quiero ser una molestia para ella, no quiero darme por vencido así como así. sé que ella puede llegar a quererme, solo debo estar más cerca de ella.

Decidí hacer solo lo que un loco haría, camine hasta la recepción del departamento y me dispuse a hablar con el encargado.

-annyeonghaseyo- dije haciendo una reverencia. El recepcionista me miro incrédulo.

-quería saber sí....-