Seis

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Una vez lo bastante alejados, sentí la mirada de Niall que me quemaba el cuerpo. Con la poca fuerza que tenía el me miró con una preocupación notable.

—¿Qué carajo fue todo eso?— su voz sonaba ahogada

—Una persecución para escapar de mi infierno— mi voz se quebró y empecé a sollozar, me tapé la cara con una mano ya que la otra sostenía la toalla. Sin decir nada más él me abrazó y gustosa recibí su abrazo

—Ven— dijo luego de unos minutos— Ya estamos en mi casa. O más bien de todos los chicos incluyéndome.

—Espera— le dije una vez que me abrió la puerta con cuidado saqué el exceso de maquillaje con mi mano y puse corrector de ojeras más una base, un poco de delineador y un casto brillos en mis labios. Pero lo del rojizo de mis ojos no se iba. Intenté soplar un poco para que el color disminuya y así fue. 

—¿Eres experta no?— preguntó mientras me miraba con tristeza. No lo comprendía

—¿En qué Niall?—

—En ocultar tu dolor— mi sonrisa se borró y no respondí nada.

Una vez adentro y más calmada mi cuerpo se sentí pesado. Escuché risas y un sonido de piano y guitarra lento. Un chillido y seguido de risas incontrolables. Con Niall estábamos caminando lentamente y paré un rato para que la cabeza no me diera tantas vueltas

—Tengo que llamar a un médico— dijo Niall. Y me sostuvo de la cintura delicadamente para que no cayera. Cuando entramos al gran salón, pude ver la cara de los otros cuatro chicos. La música al igual que la risa paró y me sentí incómoda por un momento. Primero me miraron amí y después a Niall, seguido a la toalla de mi cabeza y finalmente amí de nuevo. 

—Dios mío— susurró el moreno y rápidamente me dio una silla para que me sentase. 

—Gracias— dije en un susurro. 

—¿Quién es ella Niall?— preguntó un castaño de cabellos ondulados

—Ella es _____ McCarthy— dijo mientras caminaba hacia un teléfono. Habló rápidamente con un médico por teléfono y seguido se sentó al lado mío y señaló al moreno que me dio la silla

—______ el es Zayn, Zayn ella es _______—

—Un gusto— le dije mientras Niall me presentaba a todos los chicos. Un timbre nos aturdió a todos y Louis abrió la puerta para que nos encontremos con un hombre canoso con bata blanca con un maletín

—Señorita ______ McCarthy ¿verdad?— dijo amablemente y yo sentí. Los chicos se sentaron al frente mío y del doctor— Déjeme ver la herida— asentí con cuidado y saqué la toalla de mi cabeza. Sentí la mirada del doctor sorprendida y él se aclara garganta— La herida es muy profunda— los chicos fruncieron el ceño y se miraron unos a otros—¿Con qué se hizo esto señorita McCarthy?—

—Me empujaron contra el borde de una mesa de mármol— espeté con la voz inaudible y el doctor negó con la cabeza en signo de desaprobación

—Tenga cuidado la próxima vez— sus ojos gélidos me miraban expectantes— No quiero que esté en terapia intensiva. Se salvó sólo por suerte

—Gracias— logré decir.

Luego de que el doctor se fuera cenamos pizza y Coca-Cola. Una cena entre risas y chistes, me sentía bien. Como si fuera una más de ellos. Me ahogué con la bebida

—¿Qué día es hoy?— pregunté, ya que no lograba recordar casi nada

—Domingo 21— dijo Louis a mi derecha. Bufé cansada, lo había olvidado de nuevo, mañana tengo clases de ballet a las diez de la mañana y tengo que prepararme para las audiciones de esta semana, interpretaremos la película de ‘’Black Swan’’ El cisne negro. Se definirá quién de todas nosotras será el cisne blanco y el negro. Los nervios llegaron de nuevo y los retorcijones de estómago también. 

¡No traje las zapatillas! ¡Ni la ropa! Joder. Necesitaba volver como sea. 

—Necesito volver a mi casa Niall— dije cansada, ya me daba sueño. 

—De ninguna manera tú te quedaras esta noche aquí— dijo autoritario. No tenía fuerzas para explicar todo necesitaba una cama urgente, pero no me iría sin mis ropas para la audición de mañana.

—Tengo una audición de Ballet para mañana a las diez y media. Necesito ir a buscar mi ropa ahora— él me miró y bufó mientras agarraba las llaves de su auto—Iremos encubiertos

—¡Vamos todos!— gritó Harry—¡Es una misión!—. Todos gritaron de emoción como unos niños pequeños y me reí al instante

—Compréndelos— susurró Niall a mi derecha y todos nos fuimos en su gran camioneta para buscar solamente mis cosas para mi audición de mañana. 

(…)

Llegamos y los chicos se ponían pasa montañas, los miré incrédula

—¿Cuándo trajeron todo eso?— les pregunté y reí cuando me tendieron uno y me lo puse. Un poco de diversión no vendría mal en mi vida. 

—Eso no importa en estos momentos— dijo Louis— Ahora chicos la misión está en marcha. ______ buscará sus cosas mientras nosotros imaginamos que estamos en una película de los años noventa— reí y todos salimos de la camioneta, pude distinguir el movimiento dentro de la casa. No se durmieron aún. 

—Siguen adentro— susurré hacia ellos— Distráiganlos o hagan algo no lo sé. Necesito buscar mis cosas chicos— ellos asintieron y empezaron a subirse de nuevo a la camioneta— ¿Qué hacen?— 

—Sólo párate al lado de la puerta detrás de la maseta y nosotros los haremos salir— abrí mis ojos mientras rogaba a todos los santos que por favor que salga bien. Me paré detrás de la maseta encubierta mientras sacaba un poco de barro de mis zapatos 

Gritos SilenciososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora