Mi verdadero platónico

Cap. 15 Compras. (Maratón)

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En eso, llega el Chapa, el Felipe y... Mauro...

-Hola mi niña bella.- me saludó mi fiel amigo Chapa.

-Hola guapo.-

-Hola mamita hermosa.- me sonrió Felipe.

-Hola Pipe.-

-Hola pequeña.- me saludó Mauro, besando mi mejilla.

-Hola.- le respondí cortante.

Los chicos saludaron a mis amigas y el Chapa se puso a conversar con la Sele en el jardín trasero.

-¿Vamos a comer a alguna otra parte?- preguntó Felipe, con una hermosa sonrisa.

-Uff... Lo que más quiero es salir, pero mis amigas no me dejan. Según ellas, todavía no me recupero.-

-Mis niñas, salgamos un rato a pasear... Para que disfrutemos un rato juntos.- les dijo él a mis amigas.

-No lo creo. La Kelly debe descansar, porque no está del todo bien.- le dijo la Hilary.

-Yo la cuido.- saltó Mauro.

Lo miré fijamente y él, me miró con una sonrisa en su boca. Esa boca que deseaba poseer de nuevo. Esa boca que se adueñaba de mi con fuerza. Esa boca que no salía de mi cabeza ni un minuto.

-Ok, ok, pero tienen que darnos tiempo para arreglarnos, no vamos a ir con esta ropa.- señaló Debby.

-Ok, tienen una hora solamente.- le dijo Chapa, entrando con mi amiga Sele.

Ellos salieron al auto, mientras nosotras nos pusimos como locas a correr por la casa para quedar "presentables".

Me metí al baño y me di una ducha rápida, pero muy relajante. Salí del baño y me puse a elegir la ropa. Me coloqué una polera blanca con un diseño en el centro, bastante holgada, unos jeans ajustados, pero cómodos y unas zapatillas deportivas. Luego, encendí el secador de pelo y comencé a secar mi cabello mientras lo peinaba. Decidí llevarlo suelto para que terminara de sacarse. Me maquillé un poco y luego salí de la habitación, encontrando a mis amigas junto a la puerta.

-¿Vamos?- preguntó la Selena.

-Vamos.- afirmamos nosotras.

Salimos y vimos a los chicos apoyados en el auto, conversando y riendo.

Cuando se dieron cuenta de nuestra presencia, se voltearon a vernos, poniendo sus ojos como platos.

-Ya era hora... Se demoraron demasiado.- alegó Chapita, mirando su reloj de mano.

-Jajajajaja... Somos chicas. Acostumbrate.- le sonrió coqueta la Selena.

-Aunque valió la pena la espera. Están hermosas.- nos piropeó Mauro.

-Gracias.- nos sonrojamos.

Nos subimos al auto y partimos. En el camino, nos fuimos riendo y conversando sobre nuestros novios. La Hilary dijo que estaba super bien con Niall. La Debby está bien con Louis, aunque a veces discuten por los constantes celos de él. La Sele y Chapita están de lo mejor. Muy felices y enamorados. Felipe afirmó estar soltero, pero enamorado de una chica. Ante ese comentario sentí celos, pero no los tomé en cuenta. Yo me quedé en silencio y Mauro igual. Le agradecí su respeto.

Cuando llegamos al restaurant, quedé deslumbrada. Era muy hermoso y elegante por fuera. Me imagino como es por dentro.

Mauro tomó mi mano y yo le sonreí. Entramos y quedé aún más sorprendida. Tenía razón. Es demasiado lujoso. Tenía un candelabro de cristal colgando justo en el centro del restaurant. Las mesas con sus manteles blancos con destellos dorados. El piso era brillante y las cortinas eran doradas con destellos blancos.

Nos acercamos a un caballero y él, muy amablemente, nos llevó hacia una mesa.

Apenas nos sentamos, llegó él camarero.

-¿Qué se van a servir?- preguntó amable.

Cada uno pidió su plato preferido y, aparte, Mauro pidió seis vasos de Champagne y un vaso de jugo. Obvio que es para mi.

El camarero se fue y nosotros nos pusimos a conversar.

Cuando llegó, puso nuestros platos frente a cada uno y sé volvió a retirar.

En eso, Mauro se puso de pie tomando su copa y dijo:...

Hola... Más vale tarde que nunca. Sólo decirles que estoy muy contenta porque cada día hay más lectores. Me pone muy feliz! Más tarde subo otro capítulo del maratón! ¿Qué dirá Mauro??? ... VOTEN y COMENTEN ... L@s quiero! <3