Operación Katrina© || TERMINADA

19

Con el alma hecha pedazos, y con miles de preguntas sin respuestas que torturan mi mente, me dirigí al cementerio en donde se encuentra esa mujer.

Me siento perdida, el mundo siempre cae sobre mis hombros, estoy terriblemente cansada de todo lo que ha sucedido. Nunca nada está bien. Cada vez algo me tumba, me derriba... cómo si esta maldita vida estuviera contra mí.
Siempre me ven de pie, con esa sonrisa de mujer feliz y que lo tiene todo, pero, lo que menos saben es que soy un constante tormento desde hace muchos años. Me veo tan fuerte que parece que nada ni nadie podría lastimarme, y no saben que es por que ya no podrían hacerme peor daño del que otros me han hecho.
Personas que no son lo que creíamos, sueños truncados y secretos que nos marcan para siempre... al parecer en eso se resume mi vida... en dolor y más dolor y nada más, porque aunque tengo a personas demasiado buenas en mi vida, nadie ni nada podrá borrar todo el dolor que viví y el montón de lágrimas que derramé.
El odio y el rencor me motivan a seguir, mas me quitan la posibilidad de ser tan feliz como lo era antes de todo este infierno...

Bajé de la camioneta hecha un mar de lágrimas y busqué su lápida. Al encontrarla, caí de rodillas frente a esta y grité con todas mis fuerzas. ¡Maldije una y mil veces! Lloré mi vida, lloré su muerte y sobre todo, lloré su amargo secreto.
¿Por qué me hiciste esto, Joanna?

—No tienes ni una idea de lo que me duele verte así —dijo una mujer a mis espaldas y le miré de inmediato.
Diablos, es Sky Coleman...

Me pusé de pie pero no pude dejar de llorar, esto es más fuerte que yo. ¿Ahora qué excusa daré?

—¿Qué demonios quieres de mí? —le pregunté cansada.

—Qué me perdones, Lucy... es lo único que necesito —me respondió.

—Yo no soy Lucy, ¡¡¡entiéndelo de una maldita vez!!! —le grité sin control.

—Ya no tiene caso que me mientas, sé la verdad.

—La única razón por la que vine aquí, fue porque me siento mal por esa niña —mentí.

—Cuándo estabas en el hospital, robé una muestra de tu sangre... y lo siento, sé que es ilegal lo que hice, pero era necesario. Logré que exhumaran el cuerpo de tu madre con uno de tantos pretextos que di por el caso de Noah Baylee y su supuesta asesina "Lucy Carlin", y conseguí un ADN. Y ahora lo sé, tú eres esa niña a la que tanto daño causamos. Te juro que nadie lo sabe más que yo, y tampoco lo sabrán... pero, dime, ¿qué fue lo que sucedió después de la secundaria? ¿Qué te hicieron más?

—Estás completamente loca —murmuré, llorando mucho más.
Salí del cementerio y subí a mi camioneta.
Conduje sobrepasando el límite de velocidad, y sólo puedo pensar en lo sucedido.

Esa maldita policía sabe la verdad...

***
Cuándo llegué a casa, le conté todo a Liam; por supuesto, él me apoyó y consiguió calmarme un poco... cómo sólo él puede hacerlo.

—... y tengo mucho miedo de lo que pueda pasar, yo necesito terminar mi venganza, ella no puede arruinármelo así —lloré.

—Mi amor, ¿no te das cuenta de qué eso te está haciendo más daño?

—Lo sé... pero no puedo parar. Tengo qué terminar lo que ya empecé.

—Vayámonos de aquí, podemos ir a dónde tú quieras, empezar de cero... te prometo hacerte muy feliz, sabes que te amo y lo que más deseo es verte tranquila. Por favor, cielo —me pidió y negué con mi cabeza enseguida, diciendo:

—No, Liam, no haré eso. Sabes mejor que nadie todo lo que sucedió, ¿crees qué es justo? ¡Ellos deben de pagarme todo! No me importa que Alessia Baylee sea mi hermana, no me importa para nada, ella me jodió la vida.

—Katrina, pero... ¿y si James Baylee es tu padre también? —cuestionó y mi cuerpo se heló.
Eso significaría que... ¿mi propio padre podría ser el padre de mi hija? No... eso no puede pasarme.

—No, no puede ser, eso no —me desesperé y él me abrazó más fuerte.

—Basta preciosa, todo va a estar bien. Pase lo que pase, tú jamás tuviste la culpa de nada, ¿okey? Eres la menos culpable en toda esta mierda, y debes de tenerlo muy en claro —susurró a mi oído y apenas pude asentir.

—No soportaría eso...

—No pienses más en eso por hoy, necesitas descansar, sabes que debes de tener calma. Esto no es sano para ti, Katrina.

—Te amo... te amo y mucho —le recordé y me besó.

—Y yo a ti, mi vida. ¿Cenamos ya? —me preguntó.

—No... no tengo hambre.

—No, no empieces —se quejó —. Vas a comer, y punto.

—¿Crees qué con todo esto tengo ganas? Créeme, no...

—Lo siento, sabes que no tienes otra alternativa. Así que, ¡vamos! —Me cargó haciéndome reír y me llevó hasta la cocina.

***
Le puse un mensaje a Sky Coleman pidiéndole que fuera al lugar en donde Noah Baylee fue asesinado, y ella aceptó.
Salí de la casa en cuánto Liam y Joanna se quedaron dormidos, y manejé hasta el lugar.
Es hora de poner a prueba su supuesto arrepentimiento...