Sub Zero
Me sentía totalmente cansado, la habitación estaba oscura, solo se podía ver las pequeñas velas iluminando, quería poder levantarme pero mis muñecas y tobillos estaban esposados, decidí recostarme y cerrar los ojos pero el sonido de la puerta abrirse llamó ni atención.
Una sombra, tenía unas delgadas curvas, era el cuerpo de una mujer la cuál se me acercó.
-pobre...yo tampoco resistía a los ataques de Quan Chi- Una voz delicada escuché, mientras sentía su mano tomar la mía.
-Ngh.. podrías, sacarme- Intente ordenarlo pero solo me vio con más pena y me dijo - Si quisiera lo haría - Soltó las esposas de mis tobillos, en ese momento juro que no pude moverme, me dolía demasiado las caderas, la joven chica me colocó una no muy cómoda ropa, para peor y avergonzado, me colocó un collar dorado, como si fuese un perro, que horror.
Fuimos por varios pasillos, todo se veía demasiado antiguo, nada impresionante; Era demasiado incómodo el silencio que había, no se me ocurría nada para hablarle, todo seguía así hasta que una gran puerta estaba entre nosotros.
-Ya está aquí, amo- Dijo mientras abría la puerta.
Y claro, era la fortaleza de Quan Chi,detesto esa mirada depravada que posaba en mí.
-Mi querido esclavo ¿como te sientes con tu nuevo hogar? - Posó su mano en mis caderas y me acerco a él.
- El Netherrealm jamás será mi hogar-Dije fríamente, pero creo que me tuve que callar, el me miro y me sento en su regazo para robarme un beso.
-Tan joven, tan esquisito, mierda- Dijo fuertemente.
La joven chica se encontraba incómoda, esto Quan Chi se había dado cuenta - Vete a molestar a otro lado- Ordeno mientras acariciaba cada curva de mi cuerpo, - Si, amo- La joven hizobuna reverencia y se fue disparada a la puerta.
Narrador
-Al fin solos- Dijo el brujo mientras besaba el cuello del Lin Kuei.
Sub-Zero se encontraba más sensible que antes, su miembro estaba semi duro, sus pezones brillaban señalando que podrían expulsar aquel nectar que volvía loco al hechicero.
Quan Chi sonrío, y besó al ninja brutalmente, toda su lengua recorría la boca del menor, mientras que lo despojaba y tocaba sus muslos dándole fuertes nalgadas.
-Agh~ - Gimió el pobre Sub-Zero.
Sin aviso ni permiso de Sub-Zero, Quan Chi metió todo su pene en la cavidad del cryomancer.
-Ah!~ Ni s-siquiera me avisaste- Exclamó Kuai.
-¿Por qué debería? , si eres mío - Respondia el brujos mientras hacía movimientos circulares dentro del ojiazul.
Kuai saltaba en el pene de Quan Chi mientras este sostenía sus brazos para evitar que se escapara, nalgadas y chupones fueron parte del lujurioso momento.
-Mira como te lleno de leche- Metió lo más que pudo de su pene en Sub-Zero, llego al orgasmo llenando todo el ano con semen, y vaya que Quan Chi tiene demasiada.
Este sonreía con tanta malicia que a continuación venía su diversión.
Despojó su ropa dejando ver sus grandes pectorales, el joven se avergonzaba, era su zona más débil, eso lo sabía exactamente Quan Chi.
Se quitó sus guantes y manoseo los pectorales del menor en circulos, en reacción el otro gemia y gemia tímidamente, pero se iba intensificando cuando el hechicero chupa su pezon derecho.
-N no! que me voy a - Kuai no pudo terminar, había eyaculado y expulsando liquido en sus pechos - Aaaghmm~ - No podía evitar el placer que le daba el mayor.
-Esto no es todo, quiero que me lo chupes- Ordenaba Quan Chi.
-Aah~ pero.. estoy nhg~ cansado- Respiraba kuai con intensidad.
Esto no le importo al hechicero y empujo su cabeza hacia su miembro.
El joven frío no tuvo más opcion que hacerle la felacion.
Con su boca, de arriba a abajo, lamia tal cual como una paleta, miraba al mayor de una manera tan inocente que lo volvía un loco excitado.
-Oh mierda, siguemela chupando! aah~ - tomo la cabeza del joven y la sacudía bruscamente.
-Mmm! mmm! mm! - Exclamaba Sub-Zero con todo el pene de quan chi en su boca.
El climax vino y se expulsó disparado todo el semen llenando la boca del menor, escurría por las comisuras de su boca y por las fosas nasales, Sub-Zero, cubierto de semen, una expresión ahegao se formó en su cara.
-Me encanta esa carita que haces- Dijo Quan Chi, el cuál lo cargó y lo llevó al pozo de sangre para limpiarlo un poco y luego colocar su ropa.
Horas después, Kuai Liang se encontraba en el mismo cuarto pero esta vez junto al nigromante.
Sub-Zero
Estaba al lado de él, estaba dormido plácidamente, no estaba atado ni nada, así que era el momento para escapar.
Me moví un poco y el asqueroso depravado se acurruco en mi espalda, que asco, quite sus manos encima y salí de la cama, pero lo peor ocurrió, caí al suelo, no podía mover mis piernas, todo me dolía, el brujo se despertó y me miró.
De un momento a otro ya me encontraba en la cama, atado y Quan Chi con un látigo azotando a mis glúteos, ese maldito cerdo me golpeaba una y otra vez, no podía evitar que las lágrimas salieran de mis ojos y eso no detuvo al asqueroso
-Agh! ya detente! - suplicaba el lin kuei.
-Mira como tus nalgas se ponen de un rojo carmesí - Reía de aquel menor avergonzado de un castigo como si fuese un niño otra vez.
Lo desató y lo llevo al gran cuarto del trono de shinnok,como este no se encontraba en el Netherrealm sino en el amuleto, Quan Chi aprovechaba el momento y nada más mejor que relajarse en aquel trono junto con su esclavo favorito sentado en su regazo.
Kuai solo miraba atravez de las ventanas la vista de Netherrealm, olvidaba su horrible presente en el que vivía.
El brujo se percató de esto y un gesto no muy visto de el sucedió. Alzo la mano y surgio una gigante mano de esqueleto que parecía un gran asiento.
-Sientate- ordenó fríamente el mayor. Sub zero obedeció sin remordimiento.
Quan Chi daba ordenes desde el holograma de un amuleto a su secuaces y ordenó la presencia de uno.
una gran llama de fuego surge del suelo el cual proviene un ninja de ropas amarillas con una mirada fría y de ira.
-amo- hizo una reverencia para luego escuchar a su jefe.
-Scorpion, ¿como va los planes de tortura? -.
-Todo ser nuevo en el infierno es torturado cruelmente amo- informa el ninja.
-Bien bien-.
Sub zero voltea y observa detalladamente al ninja amarillo, era él, el culpable de la muerte de su hermano.
-Eres tú.. - Susurraba el menor.
-No puede ser lo que estoy viendo- pensó el ninja de fuego.
Continuara...
ESTÁS LEYENDO
El joven lin-kuei en el infierno
RandomKuai Liang es considerado como el esclavo de Quan Chi, el cuál lo usará no sólo para las batallas, sino también para otros tipos de placeres prohibidos que él quiere. ¿Kuai escapará de este infierno?