𝑫𝑨𝑵𝑫𝑬𝑳𝑰𝑶𝑵 ➵ 𝑵𝑬𝑾𝑻 𝑺𝑪𝑨𝑴𝑨𝑵𝑫𝑬𝑹

| 1.01

PRIMER ACTO. CAPÍTULO UNO.

RESCATE

    El clima era cálido, como todos los días. Junto a Newt, entramos a un extraño bar en busca de unos contrabandistas de animales mágicos, el lugar poseía poca luz y olía extraño. Ambos llevábamos nuestra varita cerca por si ocurría algún inconveniente.

    —No te alejes de mí— Newt caminaba examinado su alrededor, nadie parecía prestarnos atención.

    Nos sentamos a un costado donde la luz era mínima a esperar, teníamos que estar seguros de nuestro siguiente paso pero solo esperamos hasta que suceda algo que llame nuestra atención.

    —Esta bastante tranquilo, ¿no lo crees?— pregunté.

    Pero antes de siquiera tener una respuesta, un grupo de personas entro al lugar haciendo bastante ruido, riéndose entre ellos, golpeándose amistosamente y celebrando. Se sentaron cerca nuestro después de mandar a alguien por alguna bebida.

    —¿Tu crees que... —Newt se vio interrumpido en medio de gritos por parte de ellos.

    Podía verse a lo lejos que estaban algo ebrios pues no creo que personas como están sean capaces de acaparar tanta atención. Aunque mis dudas llegaban al ver si realmente hablaban o discutían. Estuvimos esperando por bastante tiempo alguna señal de que eran ellos a los que buscábamos, estábamos gastando bastante energía y cuando ya nos pensábamos ir sucedió.
    El grupo entero empezó a disolverse dejando solo a dos que miraban sin interés su alrededor, lejos del alcance de los demás empezaron a hablar en voz baja. A los pocos minutos los dos se encontraban levantándose y acomodando varias sillas a su alrededor, preparándose para una partida de naipes. En medio de esa acción pude apreciar como con disimulo se pasaban una pequeña bolsa con bastante peso que iba guardando en el bolsillo de su chaqueta cuando fue a buscar a más personas para empezar las apuestas.

    —Necesito la poción multijugos —alargo su mano debajo de la mesa.

    Abrí mi pequeño bolso, con un hechizo expansivo, y todo mi brazo entero se adentro para buscar la pequeña botella :—Accio Multijugo —susurre.

    Enseguida Newt la agarró y levantándose caminó hasta el baño justo cuando alguien más lo hacía, solo necesitaría hacer un hechizo aturdidor. En el momento en que el camarero se acercó y pedir una cerveza de mantequilla, alguien salió del baño con la cabeza baja, con una rápida mirada en mi dirección descubrí que se trataba de Newt.
    Se sentó junto a otras personas para comenzar la partida, Newt logró ganar en algún momento del juego. Todo era bullicio a su alrededor y mas cuando entraron personas que aguardaron en la puerta, el hombre que entregó la bolsa con dinero se levanto con la escusa de ir al baño, sin embargo tomo dirección hacia el exterior.
    Dejé unas cuantas monedas en la mesa con la bebida sin tocar en la mesa y salí en busca del desconocido. A lo lejos se los veía conversas con apuro mientras se dirigían por la parte oscura de la calle, agarré fuertemente la varita cuando Newt apareció a un lado con su aspecto aun cambiado, de manera silenciosa los seguimos hasta llegar a un barrio con casa abandonadas, al final de está se encontraba un galpón.

    —Cubrete, iremos por un costado —Susurré poniendo sobre mi la capa que me camuflaba con la oscuridad.

    Newt tomó la delantera y una vez detrás de las casas comenzamos a correr, teníamos los segundos contados antes de que colocaran un hechizo protector sobre el lugar, con la respiración agitada nos apoyamos sobre la vieja madera del galpón.

    —Desmaius —Dijo Newt al ver aparecer alguien cerca nuestro.

    Una vez inconsciente, lo escondimos y guardamos su varita.

    —Vamos a ver porque hay tanto misterio —el castaño agarró mi mano antes de adentrarnos por la puerta trasera.

    Nos escondimos detrás de grandes cajas apiladas, un sonido de cadenas nos hizo asomarnos y apreciar un enorme ave de trueno en una jaula, nos escondimos cuando voces se empezaron a escuchar.

    —Es lo que nos pidió.

    —Sí, se llevaron todas mis expectativas, díganle a su jefe que le entregaré la otra mitad en este instante.

    Las facciones de Newt se endurecían con cada palabra soltada, pues estaban hablando de animales, una de las cosas que él mas amaba en este mundo.

    —Vamos —dijo tomando la delantera.

    —No, espera, tenemos que evaluar nuestro alrededor...

    —Pero mira como esta...

    Sin darnos cuenta, el interior del galpón se había vuelto totalmente silencioso :—¡Expeliarmus! —Gritó alguien detrás.

    Newt fue el más rápido para realizar un hechizo Protego y cubrirnos a los dos.

    —Petrificus Totalus —dije a la vez que el atacante cae al suelo —¡Tu ve a rescatar al ave, yo te cubro! —ordene.

    Avanzamos con velocidad lanzando hechizos y contra-hechizos hasta llegar cerca de la cadena que sujetaba al enorme ave. El castaño se dedico completamente al animal en cautiverio para ganar su confianza y poder largarnos de aquí.

    —¡Dede, abre la maleta!

    Realice un hechizo no verbal haciendo que uno quedara colgado de sus pies antes de abrir su maletín y empujarlo hasta sus pies.
    Antes de seguir combatiendo, una enorme sombra se alzó sobre nosotros tapando la poca luz que generaban las luces del techo, el ave de trueno se encontraba en vuelo alzando sus enormes alas. Era hermoso, simplemente fantástico, Newt se coló dentro de la maleta y de alguna manera el ave fue tras él, confiando plenamente.

    —¡Expulso!— lance de manera rápida antes de asegurar la maleta, ya cerrada, sobre mi pecho y desaparecer.

    Lo último que logre ver fue a hombres inconscientes y después, caí en la puerta de la habitación donde nos hospedabamos los últimos días. Deje el maletín abierto para que él se tomara su tiempo en acomodar al nuevo integrante de su familia.
    Prepare algo para cenar para ambos y una vez terminado, deje la parte de Newt aún en la mesa. Busque mi pijama en mi bolsa y tome camino hacia la cama, al momento en que mi cabeza toco la almohada, caí rendida en brazos de morfeo.

    En medio del sueño, sentí como alguien posaba sus manos en mi cintura y de manera rápida, ya me había dado vuelta colocando mi varita a la altura de su garganta, para encontrarme a Newt sonriendo.

    —Baja eso, o me sacaras un ojo —dijo antes de arrebatarme la varita y dejarla aun lado de la cama.

    —¿Cómo esta el ave? —pregunté acomodándome en su pecho.

    —Bien, ya cure sus heridas pero aun debemos de viajar hacia Estados Unidos.

    Suspire :—Hablemos sobre eso mañana, ahora, callate y abrazame.

    La respiración lenta de Newt me relajo, al igual que su caricias en mi brazo, no fue difícil volver a dormir. No a su lado.