En La Oscura Puerta

LA TERCERA VEZ

JB, ¡¡¡Por favor!!!- grito con desesperación, esperaba que JB apareciera en cualquier momento, necesitaba de su ayuda.

no vendrá- escucho a sus espaldas, volteo a ver a la persona detrás de él, se sintió pequeño, temblaba con miedo, quería que todo acabará de una buena vez.

se...se que lo hara- no podría dejar de creer en JB, después de todo el siempre había estado con el, al menos en su memoria era así.

seguro- sonrió haciendo que Jimin pudiera admirar la belleza de esa sonrisa de conejo, no pudo evitar quedarse en trance, pero todavía estaba su abuelo en sus manos- dame eso- Jungkook jalo el cuerpo para mancharse el, no queria que Jimin se viera apetitoso lleno de sangre.

yo...Jung...- Jimin suspiro mientras intentaba acordarse de su nombre, lo repetía en su mente, pero nada venia a su mente.

Jungko...- fue interrumpido por un ángel, por el ángel guardián de Jimin. Jungkook se quejó, estaba apunto de terminar su cometido- ya largante de una vez- le lanzó unos cuchillos.

al menos sabes cómo matarme- JB lo miro molestó, Jimin veía todo esto sorprendido, al final JB si le había mentido.

claro, me lo enseñaron- sonrió haciendo que JB se mostrará más seguro- algo me dice que recuperaste completo tus poderes- suspiro, ahora sería más difícil, pero no imposible, tal vez si fuera un Arcangel, sería mucho más difícil.

JB desplegó sus alas totalmente blancas, pero Jimin vio algo que Jungkook no, vio la pequeña mancha negra en la ala derecha.

Jimin sentía que debía intervenir, su corazón latía más rápido y fuerte, algo en Jungkook hacía que su corazón no hiciera lo que su cerebro decía. ¿Por qué quería decirle a JB que dejara Jungkook?.

Esa sonrisa, quería seguir viendo esa sonrisa brillante, quería poder hacer esa sonrisa, pero no sabía que el era malo, por la reacción de JB.

¡¡JUNGKOOK!!- grito Jimin cuando vio como JB le enterraba una espada, está la habia sacado de dentro de su vestuario tan blanco, tan puro.

Jungkook sonrió, Jimin había dicho su nombre, ya estaba hecho, pero entonces ¿Por qué dolía tanto?.

Jimin cállate- ordenó JB mientras se manchaba con la sangre, una sangre tan corrupta como la misma oscuridad.

¡¡No, JB DEJA A JUNGKOOK!!- intento detener a JB, pero las alas de este, no le permitian que se acercara

JB sabía que había perdido, lo supo desde el momento en que le clavó su espada, lo sabia, pero aún así tenía que intentar.

¡¡JB!!- Jimin se sintió culpable cuando vio que había hecho que este se distrajera y Jungkook pudiera ganar ventaja, aún con esa herida.

Jimin vio como Jungkook sonreía macabramente, su mano sostenía su mávro xífos, una especie de arma que el mismo había creado. Jimin lo sabía, ¿Pero por qué sabía todo eso?. Nunca lo había visto en su vida

JB se acercó a Jimin, mientras su sangre seguía saliendo, sus manos tomaron las de Jimin, había fallado de nuevo, ahora que informe le daría a Jinyoung, lo volvería a decepcionar y RM jamás lo volvería a dejar ir a la tierra.

lo siento- JB sintió el aura de Jimin, con total cuidado espero a que la oportunidad se le presentará y en un solo movimiento apuñaló de nuevo a Jungkook. Jimin grito asustado y preocupado.

JB sonrió, tal vez había sido un empate. Su espada emitía un resplandor que hacía que Jimin se tranquilizara.

La luz hacía contraste con la oscuridad, Jungkook no podía perder no quería hacerlo, así que con su último esfuerzo llevo toda la oscuridad al cuerpo de JB. No lo mataría, pero si lo dejaría aturdido durante varias horas.

Jimin estaba asustado, temblaba, no quería perder a ninguno de los dos, aunque se supondría que JB seria su prioridad, pero había corrido a ver a Jungkook.

Jungkook sonrió, no era lo que había planeado, pero todo había terminado como el quería. Su herida seguía sangrando, bastante sangre había sido derramada. Jimin ya no quería verla, ya no quería ver tanto color rojo.

JB no podía hacer nada más que esperar, su cuerpo dolía, llamo, como último recurso, a Jinyoung, este no podía ir a la tierra, pero quería que supiera que todo había salido bastante mal.

Jungkook sentía las lágrimas bajar por su rostro, su vista se había nublado por completo ahora solo podía ver a Jimin de forma borrosa.

La sangre mancho las manos de Jimin. Este se había manchado.

lo siento JB- le dijo mientras agarraba un frasco

no lo hagas- pidió, su sangre fue recogida. El frasco estaba hasta la mitad con su sangre, la otra mitad tenía la sangre de Jungkook, con fuego la prendió y con algo de su propia sangre curo a Jungkook

debiste hacerle caso a JB- Jungkook sintió como dejaba de doler su herida mortal, ahora solo veía una cicatriz que probablemente quedaría en su cuerpo.

Jimin negó con la cabeza, no iba a dejar que el muriera. JB solo esperaba que Jimin no se arrepintiera.

Las manchas jamás se quitarían, sus manos se habían manchado, su cuerpo se había manchado al igual que el demonio frente a el, al igual que el amor que jamás lograría alcanzar.

El infierno y el cielo era dos mundos totalmente diferentes, pero tan similares, los ángeles y demonios continuaban con una guerra que jamás terminaría siendo la tierra el campo de batalla.

JB suspiro sí iba a morir, le iba a contar toda la verdad, después de todo sabía que el cielo estaba molesto con el a excepción de Jinyoung y RM quienes lo defenderían por lo que ellos perderían su puesto como arcángeles.

Jimin...- llamo, sus alas totalmente blancas se manchaban lentamente.

lo siento- Jimin fue a abrazar a JB ignorando la mirada de Jungkook, ignorando la rabia de este.

no te preocupes- sonrió con trabajo- sabía que iba a pasar- suspiro, aunque supiera el final quería cambiarlo.

Jamás lograría detenerlo, jamás lo logro, ni la primera vez, ni la segunda y al parecer tampoco lo lograría a la tercera.

Jungkook sin embargo no recordaba haberle perdonado la vida a JB ninguna de las veces, pero ahí estaba, repitiendo la misma historia una y otra vez.

Jimin....tú haz cometido más pecados que el mismísimo...- se quedó sin voz, pero tenía que decirle. Le iba a decir todo aún cuando estaba en contra del cielo, pero ese niño era más que solo uno más del montón, el era especial, tenía que admitir que se había encariñado con su hijo....

Jungkook sintió como la maldición volvía a hacer de las suyas. Maldijo en voz baja mirando a Jimin, mirando que este jamás recordaría, que jamás lo vería como la primera vez.

Le tenía miedo de eso no había duda, pero el no quería que le tuviera miedo, el tan sólo quería volver a la primera vez

Holiwis aquí está el capítulo- sonrió mientras saludaba con la mano.

apúrate ya es hora de comer- la apresuró Dani desde la cama, parecía que apenas se hubiera despertado.

ya ya- suspiro mientras volvía a explicar quien sabe que cosa- espero que les haya gustado, aunque siento que es muy corto, pero bueno eso ya no importa. Solo espero que les haya entretenido y bueno eso es todo nos vemos... adiós- la cámara fue apagada