Cap. 15 Compras. (Maratón)

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En eso, Mauro se puso de pie tomando su copa y dijo:...
-Quiero hacer un brindis...- Todos lo miramos tomando nuestras copas y él continuó. -Por todos nosotros, por mis dos colegas, Chapa y Felipe. Por mis.nuevas amigas y, en especial, por Kelly, la mamita del año y la más hermosa mujer que he conocido. Te amo demasiado pequeña y perdón por todas las estupideces que he dicho y hecho, pero te amo tanto que imaginar que te pierdo, me duele y no me dejan ser yo. No me puedo controlar del todo y por eso te necesito a mi lado. Espero me perdones. Ah, y también por mi hijo o hija que viene en camino.- me quedó mirando con su típica sonrisa y con sus ojos brillantes y, a mi, las lágrimas se me estaban asomando.
-¡Salud!- dijeron todos contentos.
Después de ese hermoso discurso, nos pusimos a comer.
Me comí todo, estaba exquisita la comida.
Cuando todos acabaron, los chicos pagaron la cuenta y salimos de ahí. Llegamos al centro comercial y entramos en una tienda.
-Kelly, ¿querés comprarte ropa o algo?- me preguntó Mauro.
-Tú sabes que comprar es mi debilidad.- sonreí.
-Entonces nos separamos. Chapa, vas con Selena. Mauro, tú con Kelly y yo con estas dos guapuras.- dijo Felipe, tendiendole el brazo a la Hilary y a la Debby, haciendo que ellas se sonrojaran.
-Bueno, nos encontramos aquí en una hora.- sentenció Chapa.
-Sí mi capitán.- respondimos todos al unísono.
Con Mauro, nos fuimos a una tienda donde vendían ropa exclusiva sólo para mujeres.

Agarré unas diez prendas y las llevé al probador. Cada vez que me ponía una prenda, salía y se la mostraba a Mauro. Él me miraba embobado y me decía que todo me quedaba bien. Cuando me puse la última prenda que me había llevado, recordé que, cuando pasaran los meses, mi pancita iba a crecer y ya no podría usar toda la ropa que me quería comprar. Así que, salí del probador y devolví todas las prendas a donde estaban.

-¿Qué pasa?- me preguntó Mauro, sosteniendo mi brazo.

-No me voy a comprar ropa.-

-¿Por qué no?-

-Porque voy a tener una panza enorme y no la voy a poder usar hasta que dé a luz.-

-Mmm… Tienes razón. Entonces, ¿qué vas a comprar?-

-¿Compremos ropa para nuestro pirigüín?-

-Bueno.- me sonrió.

Salimos de la tienda y nos fuimos a otra donde vendían solo cosas para bebes. Me emocioné apenas ingresé a la tienda. Nunca imaginé entrar a una tienda así y menos a comprar para mi hijo o hija.

Nos pusimos a ver la ropita y toda nos gustaba.

-Mira cariño, son preciosos. Comprémoslos.- me dijo Mauro, al mostrarme unos pequeños zapatito blancos.

-Bueno.- le sonreí, al verlo tan emocionado viendo las cosas.

Pasado un rato, llegamos a la caja y comenzamos a pagar.

Salimos de la tienda fascinados, por todas las cositas que nos llevamos. Compramos tres trajecitos, uno blanco, uno amarillo y otro turquesa. Tres gorritos del mismo color. Mantas, pantis, zapatitos, mitones, calcetines, mamaderas (biberones), chupetes, cascabeles y como tres pack de pañales. Por mi me hubiese llevado toda la tienda, pero no se podía.

 Disculpen la demora pero no estaba en mi casa ayer! soy una irresponsable! los extrañe!!! Sorry pero los compensaré... Le pido que me entiendan ya que estoy a punto de ingresar de nuevo al colegio asi que no voy a tener tanto tiempo! Los quiero demasiado... Besos... <3 VOTEN Y COMENTEN QUE ME FASCINA VER QUE CADA DIA SOMOS MAS!!

Mi verdadero platónicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora