No me dejes...

cap.1

¡Conocí a alguien increíble!

Narra Samendra:

Estaba muy feliz, hoy es el día en el que mis padres invitaron a sus amigos a almorzar. Sus amigos son una familia casada con un hijo que es de mi edad, según mamá...

¡Me pasaré toda la tarde con mi seguro futuro nuevo amigo! ¡Estoy tan feliz que apenas puedo respirar!

Yo estaba terminando de peinarme cuando tocaron la puerta de mi habitación.

– ¿Si...?-pregunté.

Se abre la puerta despacio dejando ver a mi papá detrás de esta.

— Mi princesa... ¿ya estas lista? Los invitados no tardan en llegar... ¿Necesitas ayuda? - me apresuraba, papá, es un hombre muy puntual.

– Ya casi termino, solo tengo que ponerme este moño - no sabía en que parte poner ese gran moño, ¿atrás?,¿ arriba de la cabeza...? O ¿izquierda o derecha?

— Valla que eres como tu madre.. . - Dijo papá cuando me vio pasar el moño por toda mi cabeza mientras hacia gestos de negación y duda- Dejame, te ayudo- mi papá se acercó por detrás y me recogió el cabello haciendo una media cola baja, sobre esta puso el moño.

Mi papá terminó de arreglarme. Me miré al espejo y vi lo que papá hizo...es hermoso... yo me veo muy linda.

– ¡Gracias, papá!- me dí la vuelta, dándole un fuerte abrazo a papá, éste se sorprendió pero me corresponde al abrazo- ¿cómo eres tan bueno en esto?

— Pues...yo también tengo hermanas menores, a ella les gustaba cuando las peinaba, al igual que tu madre cuando la conocí- hablaba enternecido, parece que recordó buenos tiempos... -¡Bueno! ¿Bajamos?- yo asiento felizmente.

Estamos bajando las escaleras entonces dirijo mi mirada al reloj que esta en la pared dándome cuenta de que eran las 3:45 faltaban quince minutos para que lleguen.
Terminamos de bajar las escaleras y nos fuimos directamente a la sala, ahí estaba mi madre sentada en uno de los sillones un tanto inquieta.

— ¡Oh...!ya terminaron...-se acaba de dar cuenta de nuestra presencia.

– ¡Sip! ¡Mirá, mira, madre, papá me ha dejado preciosa!- le dije muy entusiasmada a mi madre mientras corrí a abrazarla. Ella también me abrazos, sonrió y me dijo.

— Tienes razón quedaste muy hermosa mi princesa- mi madre vio a papá cómplice- querido...¿tú eres el qué dejó a mi princesa tan guapa?

Papá se sentó al lado de mi madre y a mi me puso al medio de ambos— Si...aunque no hay necesidad de que las dos se arreglen tanto, ustedes ya son hermosas- nos dimos un abrazo triple, me siento como el relleno no un sándwich.

– Ya...sueltenme...o moriré de aficiada- me ahogaban esos dos, ni siquiera puedo hablar normal.
— Disculpa- me dijeron ambos me soltaron.

En eso, suena el timbre interrumpiendo nuestro lindo momento familia- Esperen...¡Son las visitas! ¡Okey! Portate bien, debes causar buena impresión- me decía a mi misma. Sin darme cuenta ya estaba dentro, entré en pánico. Pero me calme al instante.

– Bienvenidos sean familia Flexer - hablo haciendo una pequeña reverencia incorporandome nuevamente de mi pánico de hace un momento.