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Disculpadme por hacer que tus noches sean eternas.

Disculpadme por hacer que cayeras otra vez en las adicciones.

Lo restauraré.

Te prometo ser tu luna, esa que tanto admirábamos cuando estaba completa en su punto más alto. Aquella que sin pausa alguna dejábamos de admirar.

En la mesa te deje un pastel de nueces, tu favorito.

Es una de las tantas sorpresas que te esperan este día mi bella ternura.

Atentamente: El idiota que te había ignorado y ahora te ama más que nunca.

Limerencia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora