Cuando dos mundos chocan

Prólogo.

Cuándo desperté aquí, ocupaba el cuerpo de un niño bastante tierno de aproximadamente 2 años de edad, cabello largo, sonrisa encantadora y una tez clara pero a la vez obscura; las personas que eran mi familia (padre y madre) tenian un pequeñisimo y humilde cuarto en donde habían una cama, una mesa, una parrilla, varias cajas de ropa y otras más con cosas varias. La casa estaba en un terreno grande el cual rentaban a un casero bastante amigable, yo solía jugar ahí todo el tiempo con mi madre y por las tardes, comíamos como una gran familia humilde para después pasar un tiempo con mi padre metido en los videojuegos. Creo que esos son mis primeros recuerdos que tuve sobre este mundo. No se si los hombres suelan recordar tanto durante esta edad pero yo lo hago bastante bien.
¿Que como llegué aquí? ¿De dónde vengo? Bueno al paso del tiempo lo fui descubriendo, fue bastante raro y difícil estando en un cuerpo humano pero pasado un tiempo lo comprendí: yo no soy un hombre de la tierra, soy un descendiente del Paraiso, de El Reino Celestial o de Dios, como es conocido en la Biblia y mencionado por miles y miles de sacerdotes en las iglesias del mundo. Sip asi es, que raro ¿no?.
Bueno bueno, prosigo.
Cuándo empecé a crecer y llegaba el supuesto festejo de tener un año más, mi mente se aclaraba por fragmentos cada vez más complejos pues al término de ese dia (19 de cada julio, según el calendario) yo tenía visiónes extrañas que durante los primeros 3 años me aterraron bastante hacia tal grado en que fuese corriendo con mi madre a buscar algún consuelo.
Pero, dejaron de asustarme cuando tuve mi sexta visión (al parecer) en la cuál por fin comencé a ver todo claro...
Como ya lo había mencionado, yo, soy proveniente del Paraíso y si, como todo aquel que viene de allá tiene una encomienda de Dios, yo tengo una.
A veces, a los demás habitantes de la corte celestial que son enviados aquí con una misión les dan varías ventajas como por ejemplo, no ser vistos por humanos o tener capacidades físicas que, aquí en la tierra son imposibles.
Y yo tenía una, me gusta llamarla Condición Ciclo de Vida: CDV, sólo eso y ¿en qué consiste? Básicamente los hombres lo llaman "inmortalidad" y eso, es algo sobrenatural para este mundo, aunque no le veo la gran cosa, es sólo que no puedo "morir" hasta cumplír mi misión aquí, ese es mi CDV, lo que significa que debo sufrir como cualquier otro hombre aquí, fisica y mentalmente hasta haber terminado...

Esa sexta visión, me mostró lo que debía hacer, el porque había descendido al mundo de los hombres y porque tenía esa ventaja que a la edad de seis años me parecía tan poco útil. Y es que Dios... Me encomendó restaurar El Firmamento.

Si, el problema era... una estrella caída.

Caída sobre una mujer, una mujer que debería encontrar en mi estancia aquí y a la cuál debería volver a llevar de vuelta a donde pertenecia y, es por esto que la ventaja de la "inmortalidad" es tan importante, porque para poder estar con una mujer aquí en la tierra, debo ser un habitante de este mundo y lograré esto estando en las mismas condiciones y por ende... me volveré un pecador aquí. Significa también que lloraré, reiré y amaré... amaré. Sentiré cada sentimiento y emoción que los hombres han desarrollado.
Y... Si toda esta situación implicaba un trabajo enorme y de años en este plano, debía apurarme y comenzar a buscar a esa Estrella cuando antes pero debería cargar con los problemas de una persona normal, un niño normal, por más que no lo sea.

Asi, años más tarde, cuándo más visiones por parte de El Señor me fueron reveladas en los "cumpleaños" fui entendiendo más cosas y obteniendo conocimientos en mi estancia aquí, pasé por muchos cambios, muchas personas nuevas, muchos amigos y muchos malditos buscapleitos, vi grandes maravillas de la obra de Dios... Pasaron miles de cosas, algunas más importantes y radicales; claro ejemplo está en un nuevo hermano, al que le llevaba 6 años de diferencia, unas cuantas mudanzas, más familiares por conocer y nuevos cambiós en mi cuerpo debido a la pubertad.
Pasé mucho tiempo buscando a esa Estrella sin tener éxito...
Cuando tuve 11 años cumplidos, la visión correspondiente, me permitió entender que, cuándo hubiese un cambio acelerado en mi ritmo cardíaco y algunas anomalías físicas en mi cuerpo se hicieran notar, acompañadas por fuertes sentimientos muy distintos e incontrolables, que hicieran que mi gran virtud de "inmortal" tambaleara, en ese mismo momento sabria que la Estrella está frente a mí... pero, jamás tuve una visión que me mostrara algo más detallado sobre aquello y tampoco nadie me advirtió que eso se podia confundir, confundirse con algo a lo que llaman "enamoramiento" y en el caso más serio, "amor".
¡Maldita sea! Esa cosa es dolorosa y no me agrada mucho, igual que los abrazos , nadie me dijo nada acerca de eso. Afortunadamente el Señor fue bueno y me otorgó una inquebrantable voluntad y fuerza para soportar todo eso, cosa que mejoré durante mis años en el mundo de los hombres. Pero a fin de cuentas, eso se estaba viniendo abajo. Y es que alguno años más viviendo aquí, cambian totalmente la mente y corazon de cualquiera que viva consciente de todo. Pero supongo que cuando acepté la encomienda, estaba consciente aún de todo lo que debería pasar. De la manera que fuese yo continué sin parar, a veces con más dolor y a veces no. Lo hice, busqué en el lugar que se me había sido dado, que supuestamente sería el más cercano; sólo habria que buscar muy bien. Y cuándo el Señor oyó mi súplica, pidiendo una solución respecto a la undécima visión, me envió una bastante importante y difícil de poder comprender. En mi Décimo Quinto cumpleaños, la visión correspondia a una manera de hacer que la Estrella vuelta mujer fuera más accesible a volver al Firmamento... Simplemente a las Estrellas les fascinaba lo que a mi peor se me daba: Amar.
Pero... No fue sino hasta antes de cumplír 18 años. Tres meses antes de revelar una visión más, yo sentí algo dentro, algo que podía ser esa señal, sentí algo que ninguna otra chica me había hecho sentir, ninguna tan especial como ella, ninguna tan linda, tan Brillante, tan suave, tan única... podría ser... que la encontré...

¿La Estrella Caída, en esa mujer tan hermosa?.