Our Fake Fate

V

Diario del príncipe Bakugou Katsuki || Pagina 5

Cuarto día... mientras los demás estaban teniendo las clases de espadas, yo estaba haciendo una maldita redacción de como solucionaría cada problema que habría en el reino.

Al ser hijo de los reyes y ser uno de los rangos mas altos de la sociedad, las clases teóricas las tengo en mi propio castillo y solo estoy yo de alumno. Ya que mis estudios son diferentes al de los demás. Bueno, los otros niños de los duques, marqueses y mierdas de esas, no son tan diferentes a mi, pero prefirieron que tuviera mis clases individuales a partir de mis 12 años.

Por mi... agresiva actitud.

Solo me permiten estar con los demás estudiantes en las clases de ejercicio físico, pero con personas específicas de alto rango y tengan un nivel de fuerza aceptable para poder combatir conmigo.

Hoy me había encontrado con Kaminari y Kirishima, y tan solo verlos no dudé en explotarles la cabeza, pero el único que salio ileso fue Kirishima porque se pudo defender a tiempo con su quirk, en cambio el otro estaba tumbado en el suelo. Pero mas tarde, fuimos con ellos a un campo de batalla libre que había en el pueblo y allí empezamos a combatir entre nosotros.

Al terminar me sentía como nuevo, después tanto tiempo aguantándolo por fin pude pelear y claramente, el que ganó fue, el increíble y poderoso Bakugou Katsuki, osea yo.

Como recompensa, esos dos perdedores me tenían que invitar en algunos dulces de un famoso puesto y de camino a nuestro destino, nos topamos con Deku que traía una bolsa llena de especias medicinales.

Los otros dos idiotas invitaron (mas bien, insistieron) al cabeza verdura por si quería venirse con nosotros, pero se negó inmediatamente después de mirarme a los ojos, captando directamente que a mi no me gustaba la idea.

Así que, se fue corriendo con la excusa de que su madre la necesitaba mientras se disculpaba y que la próxima vez ira con ellos. El par de idiotas se habían quejado de porque siempre era así con él, sabiendo que yo era la causa en el que se había negado.

Y eso a mi me daba igual.