Una Noche en tus Zapatos |ONE SHOT| |LARRY STYLINSON|

ONE SHOT LARRY- Una Noche En Tus Zapatos.

“Ojala y no me hubiera enamorado de ti…. ” (Esto no es mío)

-¡No se que mas quieres!—grite furico, me sentía con tanta rabia contenida que el estomago me ardía de puro coraje.

-¡Quiero que entiendas Lou! Por favor…. —su voz se fue apagando a medida que hablaba así como sus ojos, si, me dolía que mi pequeño rizado llorara pero esta vez me dolía más la manera en la que quería controlarme.

-No Harry, dios, ya no puedo con tus inseguridades y no, no puedo entenderte—esto se estaba saliendo de control, entre cerré los ojos intentando calmarme, eso o diría algo de lo que quizá me arrepentiría después.

-Ojala y aunque sea lo intentaras—

-Ojala y no me hubiera enamorado de ti….
Caí en cuenta de lo que acababa de murmurar más para mí que para él, abrí los ojos esperando haber pensado y no dicho ese comentario tan horrible o aunque sea que Harry no lo hubiese escuchado, el ver como sus sollozos se hacían más profundos, su cuerpo se encorvaba de dolor y su barbilla temblaba me confirmaron que había prácticamente gritado.

-Harry…. —dude, se que lo hería pero no podía dar marcha atrás o esto seguiría igual—Si tú me entendieras a mí, si estuvieses cien por ciento seguro de mi amor por ti esto no pasaría, y yo, bueno, creo que ya no quiero entenderte—
Gire sobre mis talones encaminándome a la escalera.

-Lou…. —murmuro el oji verde siguiéndome el paso. —Lou, por favor, por favor, entiéndeme.
Camine a grandes zancadas por el pasillo recibiendo miradas desaprobatorias de Niall, Liam y Zayn, hasta que llegue a la puerta de mi habitación.

-Lou… Podemos... podemos hablar cuando se te baje el alcohol—

-¡Ya te dije que no estoy borracho!—y sin más cerré de un portazo.

Arrastre los pies por la habitación hasta llegar a mi cama, prácticamente me lance a ésta y, una vez ahí puse las manos en mi rostro, el corazón aun parecía palpitarme descontroladamente y el pecho aun me hormigueaba.

No tenia porque sentirme de este modo, Harry había tenido la culpa.

Harry Styles, lo amaba, por lo más sagrado y puro que era verdad, lo amaba con todo mí ser pero estos días, desde que comencé a salir con Eleanor, se había convertido en mi tormento viviente. Llamándome cada cinco minutos, lloriqueando por los twits falsos, reclamándome las citas y fotografías arregladas, celoso de un fantasma firmado por un contrato, ella no era mi novia real y si teníamos que salir cada viernes a tomar unas copas no era exactamente porque nos amaramos, es más, ni siquiera nos llevábamos bien del todo. No era capaz de comprender que era lo que le molestaba, si el sabia que era mi mundo.
Solté un pesaroso suspiro lleno de angustia, tal vez me había pasado. Me incorpore sentándome en la cama, y si, tal vez también estaba un poco tomado. No pude terminar la lucha con mis pensamientos pues una terrible sensación me invadió completamente, las arcadas rasparon mi garganta, maldita resaca ¡Lo que me faltaba! Me levante de un salto y corrí a la puerta abriéndome desesperadamente camino al baño, usualmente me pasaba cuando tomaba y discutía.

Me eche junto al inodoro y devolví no solo el alcohol, podría jurar que hasta el desayuno de la mañana de ayer, una vez termine tome el papel limpiándome los residuos y mirándome al espejo, vaya que me veía mal pero no fue eso lo que llamo mi atención sino la camisa que usaba, según recuerdo esta mañana me puse la chaqueta de Harry para salir y ahora traía puesta una camisa de franela tipo Liam solo que mas colorida.

Un golpe en la pared y risitas provenientes del pasillo además despertaron mis sentidos. Extrañado, camine fuera del baño en busca de aquellos ruidos raros. 
Grande fue mi sorpresa en cuanto descubrí que o quienes provocaban ese alboroto. No sé cómo describir lo que paso por mi mente en ese instante pero si lo hiciera diría que pude sentir como mi cuerpo era desgarrado y cortado, como mi mente era segada por la tristeza y la confusión, como cada partícula de mí ser se volvía más pesada y mis rodillas se doblaban. Harry, mi rizoso favorito, el amor de mi vida besando apasionadamente a una chica rubia mientras un chico castaño contorneaba su espalda y mordía su cuello.