Capitulo 2.

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Viviendo juntos.

Finalmente llegamos a mi departamento el día de hoy fue muy estresante, acabo de descubrir que seré padre, tendré un hijo de Candy, la única mujer que he amado; ahora que todos saben de mi relación con Candy soy el hombre mas feliz del planeta, abro la puerta de nuestra habitación sin hacer ruido.

Deposito a Candy en mi cama se sentía abatida y cansada, principalmente triste por lo que le dijo ese imbécil que tiene por padre, nunca me agrado siempre me menosprecio a mi y mi familia por tener mas poder y dinero que nosotros.

Si bien al principio me acerque a ella por dinero, mis padres siempre insistieron en que debía conquistarla así y ser parte de esa familia, apropiarme de todo el dinero y bienes que su familia poseían, pero con el tiempo y sus sonrisas, aquellas sonrisas que me enamoraron desobedeci a mis padres, les oculte mi relación para que no la vieran como una chequera andante, aun después de la quiebra. La única que lo sabe es mi hermana mayor Eliza.

- Neal -el susurro de Candy me saco de mis pensamientos.

- dime Candy que necesitas -pregunto acariciando su mejilla.

- tengo antojos -dijo tímidamente.

- que deseas hermosa dime que es lo que nuestro bebe quiere -acaricie su vientre plano después de aquel incidente nunca pensé que seríamos padres tan jóvenes.

- el bebe quiere pastel de arándanos y te con miel.

- enseguida vuelvo -me aleje de ella con un beso dispuesto a cumplir sus antojos.

Afortunadamente no era tarde y la pastelería estaba abierta. Entré, el lugar estaba vacío, pedí el pastel que mi hermosa Candy pidió, en todo momento sentí el coqueteo de la chica que me atendió, pero me hice el ciego y seguí mi camino.

Regrese a mi depa y al entrar encontré a mi hermosa rubia sentada en el sofá comiendo un cake de chocolate se veía molesta, deje el pastel en la mesa y me acerco a ella dispuesto a darle un dulce beso pero me evita, alzo una ceja extrañado.

- porque fuiste a la pastelería donde trabaja esa tipeja -así que era eso.

"Celos" pienso con diversión.

- me espiaste-me burlé Candy es celosa, muy celosa.

- por supuesto -grita orgullosa.

- pequeña celosa -le respondí- fui a esa tienda porque estaba cerca, no porque Karen la atienda.

- no me hables de esa y dame mi pastel ahora.

- no te preocupes hermosa- le entrego el dichoso pastel y me dirigí a la cocina a prepararle su té.

- gracias por consentirme -sonrió con ternura, jamás la dejaría, Terry es un grandísimo idiota.

- no hay problema el bebé se merece lo mejor.

Celebramos su cumpleaños entre risas y caricias hasta que cayo rendida a los brazos de Morfeo, acaricio su cabello esbozando una sonrisa realmente fue el mejor día de mi vida.

Al día siguiente desperté con un cuerpo cálido y suave, sonreí abrazando mas a Candy, aspirando su aroma a rosas, es reconfortante despertar y ver el rostro de tu persona amada.

Llego a la cocina quiero prepararle un rico desayuno coloco huevos, harina y leche en un bol los mezclo y lo vertió en un sartén hasta tener los panqueques, luego pico un poco de fruta y sirvo jugo de naranja, todo lo coloco en una charola, tal vez soy un cursi pero es imposible no serlo con Candy, esa mujer saca lo mejor de uno.

Al entrar al cuarto coloco la charola a sus pies, me dedica una sonrisa burlona.

- desde cuando te volviste tan cursi.

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⏰ Última actualización: Mar 04, 2021 ⏰

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CANDY Y NEAL "Un romance prohibido"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora