♥ Latín Hetalia: Evento ♥

Día 5: Flora y Fauna.

— BrArg  💫

Disclaimer: Los personajes no me pertenecer. Todos los personajes son propiedad de su correspondientes creadores. yo solo los pido prestados para traerles esta historia.

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Personajes: Nombre–País 🐾

•Martin Hernández: Argentina./• Luciano da Silva:Brasil

•Sebastián Artigas: Uruguay/•Daniel de Irala:Paraguay

•Miguel Alejandro Prado: Peru/ •Manuel González: Chile •

Julio Paz: Bolivia.

★★★★★

♪ AU: Flora y Fauna ♪

Aún podía recordar los maravillosos momentos que pasó con su marido en aquellas tierras, fue hace tan poco tiempo que aún podía escuchar el sonido de los pájaros cantar. Cada vez que pasaba por aquél campo lleno de plantas y flores, le traía una inmensa nostalgia. Fue un pedido por parte de él el ser sepultado en aquél lugar, todavía podía recordar las palabras de él en su mente. 

– Ñao, quiero ser sepultado aquí. Prometelo, Tincho.– en su voz se podía oír la seriedad del asunto, no dejaba de mostrar una mirada bastante pasible hasta en esos momentos tan crueles.

– Está bien, lo que vos quieras. Lu.– Responde algo inseguro y le da un beso en la mejilla mientras seguían caminando con tranquilidad ambos. Mientras veía las plantas que crecían en el sitio, estaban comenzando a crecer más cosas en el lugar, hasta ya podían tocar y sentir las flores de época, una de las cosas que agradecía del lugar era ello.

Caminaban tanto por aquél patio después de todo porque amaban el sitio, y ese pequeño lugar que estaban caminando en esos momentos era el favorito de ambos. Ahí fue en donde tuvieron su primera vez de casados y dónde más tiempo pasaban contemplando el sol y la lejanía, les traía muchos recuerdos el sitio. Y agradecía que su pequeño hijo estuviera descansando con Sebastián en esos momentos, así podrían disfrutar un poco más la caminata.

♪♪♪♪

La primera vez que se conocieron, fue un momento único y especial para ambos. Aunque parecía más el comienzo de una historia de comedia que otra cosa, pero ellos lo recordaban porqué ese fue su primer encuentro y significaba muchísimo para él.

Aún lo podía recordar con lucidez Martín:

El Rubió se encontraba caminando en aquél momento por la calle, con sus dos primos: Sebastián y Daniel, los tres se encontraban caminando por donde estaban jugando al fútbol unos chicos en la siguiente cuadra a la suya, eran toda una manada de pibes que parecían que recién salían de la escuela, estaban los tres caminando por el borde como era correspondiente, no querían sufrir ningún accidente ; entonces el Rubió abrió los ojos en señal de sorpresa al ver que venía a toda velocidad una pelota redonda para su dirección y se estampaba en su hermosa cara, de llenó, y él solo pudo sentir el sonido ensordecedor. Lo que ocasionó que terminará en el suelo con un ojo, ahora hinchado, y la nariz sangrando.– Auch, ¡m-me rompis la nariz! ¿Sos boludo o se te rompió la taza de pibe?– Grita con enojó mientras veía al causante de su hemorragia nasal, qué lucía de su misma edad pero más bajo que él en estatura, ahora entendía porqué dolía como el infierno el golpe que acababa de recibir.

– Te encuentres Bem? – Pregunta con preocupación en su mirada el morocho.

– Sí, Sí, estoy Genial.. ¿¡No ves que me rompiste mi preciosa nariz, sos ciego acaso!? – Pone su cabeza para arriba para que dejará de sangrar de aquél modo la nariz. – Vámonos, Dani, Seba – habla bastante enojado mientras veía por el revillo de su ojo como el otro no le quitaba la mirada de encima. –Boludo.– Murmura con dolor en su carita de ángel.