Capítulo 48

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CAPÍTULO 48







El cuerpo de Ben estaba ardiendo en mis manos a pesar de que se encontraba mojado a causa del agua que nos traía el grifo de los vestidores. Tocar todo su cuerpo, su pecho, su abdomen, su cuello, sus nalgas... y su miembro. Cada lugar que tocaba era nuevo e inexplorado para mí, excepto en mis sueños, en los cuales, más que tocar ya había probado.

Ben tomaba mi bóxer y tironeaba de él hacia atrás mientras sus manos acariciaban mis nalgas con suavidad dando pequeños apretones que me producían una corriente eléctrica por toda la espina dorsal. Ben movía sus manos por todo el espacio que lo bóxer cubría brindándole a todo mi cuerpo una sensación con la cual lo llevaba al clímax.

Tocarte tú mismo, era una sensación agradable, pero ser tocado por una persona quién posiblemente sería la última que lo haría en tu vida era una sensación totalmente placentera, aún más tratándose de las manos de Ben que aparte de ser grandes, eran fuertes y dignas de un muchacho joven pero atlético.

Ben movió su boca por todo mi cuello succionando cada gota de agua que allí tenía mientras esbozaba pequeñas sonrisas cuando mis manos apretaban con suavidad y gentileza su miembro erecto. Ben me besó después con tanta pasión que estuve a punto de fundirme como plástico entre sus manos. En ese momento sus manos salieron del interior de mi bóxer para iniciar con quitarse los suyos.

Ben estaba sonriendo -Dios, esto es realmente doloroso ya no lo soportaba -en ese momento mi mirada bajo a su miembro que saltó del interior de su bóxer dejándome sin aliento.

Había visto penes enormes en la porno gay y en la porno ordinaria; penes velludos y otros lampiños; penes gruesos y otros delgados; penes blancos y penes negros; el pene de Ben era la combinación perfecta de todos los ya mencionados.

Su miembro no era muy grande, pero tampoco era pequeño, podría decir que incluso era más grande que el mío. Sus testículos eran lampiños al igual que todo alrededor de su miembro, sin embargo, podía jurar que se debía a su continua depilación. Tenía un grosor perfecto y tenía un perfil recto y bastante llamativo (por así decirlo) tal vez era el primer pene que veía en mi vida -aparte del mío claro- pero estaba seguro de que eso era lo que muchos a partir de ahora podrían conocer cómo:

El pene perfecto.

Estuve mirándolo un tiempo atentamente sin decir palabra. Los bóxer de Ben descansaban en el suelo aun rodeando sus pies. Levanté la mirada un poco apenado, Ben me estaba mirando fijamente con los ojos de un lobo queriendo comerse a una presa completa. Su mano se extendió y se posicionó detrás de mí cabeza, enredó sus dedos en mi cabello y sonrió de lado.

-Adelante -en ese momento supe a qué se refería, entonces, doblé las rodillas y quedé frente a su miembro. Ben movía su mano detrás de mi cabeza con rapidez visiblemente ansioso de que chupara su pene, en ese momento, tomé su miembro en mis manos y lo llevé a mi boca.

Mamá, Soy Gay [MSG #1] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora