Kuro Neko no Deketsu: La caida del rey demonio [1]

I-Caos

Cuándo todo empezó... no es ningun secreto que la destrucción y la locura reinaban, todos sabemos, de nuestras clases de ciencia que el mundo se creo en el más absoluto caos. Una explosión, qué creó la tierra a través de golpes... pero esto no es lo que nos interesa...

Lejos de nuestra mirada, en algun lugar... donde crecen mas cosas qué son nuestra gran diferencia, nosotros ya les dimos un termino, el cual... es mundial... los demonios.

La historia se remonta a antes de qué nosotro caminaramos sobre la tierra, antes de qué siquiera la tierra se hubiese formado, en la lejanía, una tal vez incluso dimensional... ellos proliferaban, eran poco mas que animales, monstruos que se mataban por diversión, que arrasaban por egoísmo... creo que os haceis una idea, la imaginación sera vuestra guia de sus actos horrendos.

Pero... en esta nación de animales psicópatas, nació alguien distinto, de entre los cachorros destacaba no solo en aptitudes físicas y de magia negra, era inteligente, voraz... brutal

Yaghu-hom'oru, un joven demonio, nació sin nadie que le cuidara, mas no fue necesario, en cuanto sus piernas pudieron andar se sirvio de ellas para buscarse alimento, en cuanto sus puños pudieron cerrarse, aplastaba a cualquiera que se interpusiera en su camino, sin importar quien fuera, tras 7 meses, habia demonios que se alejaban de el por terror a perder la vida y ser devorados por el enjendro que andaba a dos piernas.

A la edad de 5 años,le crecieron los cuernos, negros como el azabache, sus ojos eran poco mas que unas cuencas negras con un punto rojo del que se desconocia de donde provenia. Su cuerpo era carente de piel,era musculo puro haciendo a su rostro poco mas que una calavera sin facciones, sus dientes amarillos se retorcian por donde estaba la boca, asomando putridos y desaseados sin labios que los cubriese,el hueco de donde se supone iba la nariz,solo habia unos huecos vacios, su cuerpo estaba lleno de cicatrices, algunas autoinfligidas, y en la cuspide de esta bestia,lo coronaba una creciente melena roja.

Paso el tiempo, para los demonios fue una minucia. Para nosotros,la llegada a crear ciudades, la poderosa roma, grecia, los aztecas... pero los demonios no sabian de nuestra existencia,al menos, de momento.

En ese tiempo, Yaghu-hom'oru se dio cuenta con detenida observación, que su mundo y sus supuestos iguales eran poco mas que idiotas con una inteligencia nula y sin un lider que les llevara por el buen camino todo ese potencial era inútil, desperdiciado en burdas luchas por carroña, esto le irritaba mas que nada, pero por el momento no tenia las herramientas necesarias para forjar ese imperio,pero tenia decidido que encontraria la manera y su pueblo se erigiria orgulloso como el mas fuerte y prospero. Subyugaria a todos para crear una nación fuerte e invencible y durante mucho tiempo planeó su estrategia, con observación y detenimiento.

Pasaron los siglos, y poco a poco conseguia adeptos, a los mas inteligentes utilizo su labia, hablandoles de todo lo que planeaba conseguir, y a los mas salvajes o los que le desafiaran les mostraba la enorme fuerza que poseía, algunos incluso, morían en combate contra esa enorme bestia de fuego y carne. Con el tiempo, fue domando y educando a los seres infernales forjando los cimientos de su soñado imperio.

Y así pasó el tiempo, aquello que era un sueño tomó autentica forma, se forjó una gerarquia de poder, algo parecido a una enorme ciudad que aun sin lujos como los nuestros, era imponente y gloriosa como pocas se hayan visto, y en su trono estaba el, sentado en la cuspide de la ciudad triunfante y con porte de rey, dirigió su glorioso reino como un gran soberano.