Miedo, eso era lo que sentía en esos momentos, o por lo menos es lo que recuerdo; mis piernas temblaban como jamás lo habían hecho y frente a mí se encontraba la razón de esa horrible sensación: un enorme y hermoso lobo. Su pelaje era negro y brillante, su cuerpo era mucho más grande que el mío, finalmente yo solo era un pequeño que no sabía nada del mundo.
No grité, no corrí, simplemente me quedé viéndolo estático. Sabía que, aunque hiciera cualquiera de esas dos acciones, ese lobo me asesinaría. Lo único que podía hacer era esperar su ataque. El final de mi vida.
Di un paso hacia atrás en cuanto él dio uno hacia mí, por primera vez en esos largos minutos mi cuerpo reaccionó a las demandas de mi atemorizado cerebro. Sus ojos azules estaban clavados en los míos, algo que solo disparaba aún más mis nervios y a la vez me hipnotizaba completamente, jamás me había topado con unos ojos tan preciosos. Parecían dos diamantes, tan brillantes y hermosos, algo de lo que uno no puede escapar fácilmente.
Mis ojos se agrandaron en cuanto el lobo comenzó a contraerse y a emitir un par de agudos chillidos, como si estuviese siendo torturado. Caminé hacia él más que preocupado en ese momento, por más miedo que hubiese tenido hacia él, me era imposible no querer ayudarle con aquel profundo dolor. Sin embargo, me llevé una enorme sorpresa al estar a pocos centímetros de él, ahora tenía un cuerpo humano; mi corazón se detuvo ¿una trampa? Había sido una trampa para que me acercara más.
Aún así, sentí una enorme curiosidad, una curiosidad por ver el rostro de aquel magnífico ser ¿sus ojos seguirían siendo tan puros y azules como antes? El interés me estaba carcomiendo lentamente con el paso de los segundos. Lo único que podía ver en esos momentos era su fornida espalda, cada músculo se podía apreciar, algo que me hizo estremecer, era un cuerpo tan majestuoso como el del lobo de hacía unos minutos.
«Date la vuelta» pensé mientras mordisqueaba mi labio inferior, la espera me parecía eterna para esos momentos.
Él alzó la cabeza sobresaltándome un poco ¿habría leído mis pensamientos? Mi corazón comenzó a martillar mucho más rápido a mi pecho y mis dedos simplemente comenzaron a apretarse mucho más entre ellos.
—HoSeok.
Mis ojos se abrieron en ese instante topándose con la preocupada mirada de mi madre. Y ahora podía decir que nuevamente, aquella magnífica criatura era un producto de mi imaginación, algo que hizo mi ánimo decaer, deseaba ver aquel rostro.
—¿Todo bien cariño? ¿De nuevo soñaste con ese horrible lobo?
—Madre...tengo dieciseis años ya...no es como que tengas que ayudarme a lidiar con mis pesadillas —respondí soltando un suspiro.
Mi madre abandonó la habitación momentos después de dejar un "remedio casero" para dormir en mi mesa de noche; sabía perfectamente bien que era una pastilla para dormir con magia en ella, seguramente me dejaría noqueado en menos de un segundo, pero no deseaba hacerlo, no aún.
Me acerqué al balcón de mi habitación soltando un suspiro, al estar allí me acomodé para observar la luna y las estrellas un par de minutos, la sensación que me transmitían era de profunda calma.
Recordé la mirada de aquel licántropo, fuera de todo el miedo que sentía, su mirada me transmitía lo mismo que las estrellas.
Lástima que solo fuera un sueño.
bueno manguitos, espero que les guste el prólogo, de una vez les digo que las actualizaciones serán algo lentas, ténganme paciencia, jé.
les diré de nuevo acá, la historia es junghope, es decir, jungkook top y hoseok bottom 7v7r
¿qué les pareció? (aquí sus comentarios)
¡nos vemos en el siguiente capítulo!
no olviden votar y comentar as always, los amo <3
ESTÁS LEYENDO
Un lazo Inevitable ❀ JungHope
FanfictionHoSeok está harto de su vida; de las falsas amistades y la presión constante de ser tan exitoso como sus padres, los hechiceros más poderosos que el mundo ha visto. Simplemente desea lanzar toda esa fama por la borda, por lo que decide escapar de...