ｅｌ ａｕｔｏｂｕｓ;; kokmin

Encuentro

Hacía mucho que no venía a un lugar como este. - dije nostálgico con la mirada fija en el horizonte contemplando aquel bello paisaje natural que me recordaba a mi padre.

Si, bueno siempre te encerrabas en tu habitación. - soltó mi madre sarcásticamente.

Después de unos minutos de meditación y habladuría regresamos a casa.

Min! baja a cenar. - grito mi madre desde la cocina. 

Mamá! cuantas veces tengo que repetírtelo?

NO ME GUSTA QUE ME DIGAN MIN. - dijimos al unisono. 

Ya entendí, ya entendí, mi pequeño ya esta creciendo. 

De hecho ya lo hice. - solté esas palabras mientras me sentaba en la mesa lo cual mi madre también hizo.

¿Y listo para mañana?

Si, al fin y al cabo lo único que hacen allá es torturarte.

Bueno este será el primer año que no te vaya a recoger a la escuela.

Secundaria mamá, y ya soy lo suficiente grandecito como para saber si responderle a un desconocido o no.

Tienes razón es hora de que deje abrir tus alas y puedas volar como un ave.

Jamás me cansaré de escuchar sus metáforas.- pensé.

Gracias y buenas noches mamá.- levante mi plato y luego me dirigí a mi habitación.

Al día siguiente

suena la alarma.

Mmmm... .- abrí mis ojos, vi el techo y me quedé así por unos minutos luego cepille mis dientes, me duché y me puse algo de vestir muy casual. 

Bajé y desayuné en silencio, me despedí y me fui.Caminé unas cuantas cuadras hacia el paradero de autobuses y justo cuando estaba llegando llega uno, me subo y pasé mi tarjeta para pagar, busqué un asiento y justamente había solo uno así que lo tomé. Saqué los audífonos de mi mochila y puse fuyu no hanashi de given, esa canción era mi adicción, la escucha una y otra vez cada que podía.

Después de algunas paradas un chico subió, llevaba puesto una sudadera blanca, una gorra negra y lentes que le quedaban a la perfección, cualquiera se daría cuenta de su presencia en segundos, el chico se sentó en el asiento que estaba adelante mio, en todo el transcurso que pase en el autobús no pude evitar dejar de mirar su nuca, su cabello, lo bien que le quedaba la gorra. Bueno llegué a la parada de mi escuela y baje esperaba que él también lo hiciera pero no pasó.

Entré y busqué mi salón, logré encontrar un asiento cerca de la ventana ya que me encantaba ver cielo y sentir la brisa que pasaba siempre.

Pasaron algunas horas y llegó el receso, quise quedarme y comer tranquilo pero se me acercó un chico con una gran sonrisa que hacía que cualquiera se impresionara o alegrara con tan solo con verla.

Soy Hobi y tu? 

Jimin.  

Te diré Min.

Que confianzas

Solo llevémonos bien, - dijo mientras me daba una palmada en la espalda. - ¿En que calle vives?

¿Debería decirle en donde vivo a un desconocido? 

Yo vivo en la calle nueve, y ¿tú? 

En la misma, que coincidencia 

Bueno pues nos vemos en la salida

Si no te veo me voy- terminé diciendo y al instante Hobi salió del salón.

Terminaron pasando las demás horas para la salida. 

Suena el timbre.

Termino de alistar mis cosas para irme y salgo de aula, camino hacia salida y de repente siento una mano tocarme el hombro, era Hobi.

Nos vamos?

ah, si claro

Mira justo viene el autobús.

Que bueno, no quería estar parado tanto tiempo.

Subimos, pagamos y mientras nos acercábamos a un par de asientos libres me pareció ver al chico de esta mañana, era él, no saben lo feliz que estaba en ese momento, sentía que todo fue parte del destino y que podría tener una oportunidad para conocerlo. Él estaba jugando beat blach, hice un comentario acerca de lo malo que era en ese tipo de juegos.

Soy una bestia jugando eso. - Hobi soltó una carcajada.

Pero si eso es más fácil que todas las tareas.

Prefiero las tareas.

Estaba muy seguro de que el ese chico nos estaba escuchando, se volteó, me miró y dijo:

¿Quieres intentar? - me entregó su celular mientras yo solo lo seguía mirando 

Min? Min!!!

Ah, ah, si, si. - Agarre su celular y jugué un poco durante ese tiempo sentía la mirada profunda que tenía él en mí. Perdí la partida y le entregué el móvil.

Solo necesitas más práctica 

Ujum... - estaba demasiado nervioso, no podía ni hablar.

¿Y cual es tu nombre?

Jungkook, pero si gustas dime Kookie. 

 Suena muy tierno.

Si, bueno mis amigas me pusieron ese apodo así que ya me acostumbre, y ¿tu? ¿cual es tu nombre?

Jimin. 

Solo dile Min, por cierto soy Hobi.

Oh, bueno esos también suenan muy tiernos.

No pude evitar sonrojarme por la linda sonrisa que tenía así que escondí mi cara con mi mochila y me quedé así hasta que bajó del autobús.

Bueno chicos tengo que irme, creo que los veré mañana también, adiós.

Estoy tan convencido de que hoy es el mejor día de mi existencia, ese chico tiene una gran personalidad y un gran rostro. En la siguiente parada Hobi se bajó y yo me quedé solo hasta llegar a mi casa.

¿Cómo te fue cariño?

Bien. 

Me alegro.

Voy a mi habitación, no tengo hambre.

Esta bien.

Tuve la típica conversación con mi madre ya que estaba ocupada con su trabajo en la computadora. Subí a mi habitación y no dejaba de pensar en él, en kookie, siento que esto es solo atracción pero espero y lleguemos a algo más si se puede.

. . . 

Holi, espero les haya gustado este primer capítulo, si es así haganmelo saber votando para continuar con la historia.  ^^

Portada de mi autoría.

. . .