Capítulo 16;

550 36 1
                                    

Lily:

Miro mis ahorros por internet, no son muchos, pero me da para pagarme algo. Busco billetes de bus baratos para mi viaje a casa. Va a ser tan difícil mirar a mis padres a los ojos y contarles mi tortura. Difícil y doloroso volver a recordar la mierda que viví. También va a ser vergonzoso presentar algún día a Alex, explicar que es 6 años mayor que yo y que me hizo la vida mejor.

Pongo mis datos y saco los billetes: ida y vuelta. Qué ganas de verlos, de picarme con mi hermana.

Caigo en la cuenta que ahora que me siento de nuevo virgen, debería renovar mi ropa interior. Alex me compró alguna bastante bonita cuando me mudé con él, pero me gustaría algo más que se insinuara. Cojo mi bolso y voy a las tiendas.

Entro en tiendas de lencería y miro algunos conjuntos. Son caros y no.puedo comprar muchos. Pero me darán para el apaño.

Salgo de la tienda y compro algunos productos de higuiene íntima, la verdad que cada vez tengo menos vergüenza de todo esto. Miro el reloj, tengo que ir a casa, hoy también tengo turno de tarde y debo llegar puntual.

Dejo las cosas en su sitio y pongo la mesa, pero una llamada de Alex me preocupa.

Yo:¿Sí?

Alex:Cielo, no puedo ir a comer, nos ha surgido una operación de última hora y voy a tardar como 3 horas en llegar.

Yo:Te dejo la comida hecha, nos vemos por la noche.

Alex:Te quiero.

Cuelgo y quito su plato. Me toca comer sola. Me doy una ducha rápida y ¿por qué no?  Me pongo mi lencería nueva y voy al trabajo.

************

Tras una dura tarde, voy a casa. Para mi sorpresa Alex me espera en el coche. Guau, ¿cómo lo hace para ser cada día más sexy? Me acerco a él y nos besamos.

Alex:Quería llevarte a casa ya que no te he visto en la comida.

Dr.Alex:

Estoy en mi escritorio, veo el caso de una paciente con trastornos alimenticios. Es tan dura mi profesión, pero gratificante a la hora del resultado. Elisabeth toca la puert y entra.

Elisabeth:Bebé, son casi las once, hay que dormir.

Yo:Ven conmigo, anda.-ella me hace caso y se siente en mi regazo.

Elisabeth:¿Mucho trabajo?-acaricia mis brazos.

Yo: Sí, pero es reconfortante llegar a casa y estar contigo.

Ella juega con mi pelo y yo le hago cosquillas. Está tan preciosa con su camisón nuevo.

Yo:Oye,¿cuándo compraste ropa nueva?

Elisabeth:Te sorprendería saberlo.

Yo:¿Sabes ya lo que quieres estudiar?

Elisabeth:Sí. Lo he pensado muchi y creo que haré el módulo de Educación Social, quiero ayudar a gente que lo pase mal, como a mí.

Yo:Cielo, es tan bonito eso...¿no prefieres carrera?

Elisabeth: Quiero trabajar cuanto antes y ayudar cuanto antes.

Nos besamos, mi pequeña es de gran corazón. Ella se sienta a horcajadas de mí y pronto siente mi erección. Acaricio sus muslos descubiertos y pronto subo hasta su trasero. ¿Lleva lencería nueva? Me separo y lo compruebo, es un fino tanga de encaje negro,¿desde cuándo es tan pervertida? Ella se ríe y nos seguimos besando. Sus gemidos se ahogan con nuestros besos y la cojo para sentarla en el escritorio.

Yo:Nena, me gusta mucho tu lencería. -se quita su pijamas y me deja ver su parte de arriba y compruebo que va a juego con la de abajo. Es tan perfecta.

Seguimos basándonos, cada vez más unidos, hasta que la ropa molesta. La cojo de nuevo y llevo a mi caro sofá de cuero, pero me deja sentado y ella encima de mí. Me quita el pantalón, yo el resto de su ropa.

Yo:Bebé,¿estás segura?

Elisabeth:Sí, solo sigue con esto.

Humedece sus labios para luego darme besos en el cuello. Me vuelve loco eso. Quita mi boxer y ve mi miembro, decide jugar con él.  Introduzco mis dedos, está demasiado mojada como para hacerla daño. Ella se sube encima y entra en mí, una mezcla de placer, amor y seducción recorre mi cuerpo. Agarro sus caderas y empieza a moverse. Ella gime alto mientras beso sus pechos. Coge mis cabellos y se mueve más rápido. Si sigue así voy a irme pronto.  Aumenta su velocidad y ambos llegamos al climax. Agotados y sudados nos separamos.

Elisabeth:Voy a darme una ducha,¿vienes?

Yo:Sí.

Nos agarramos de la mano y entramos en ella. El agua templada recorre nuestros cuerpos.

Yo:No te imaginaba tan entregada en el sexo.

Elisabeth:Bueno, no sé mucho, quiero explorar contigo.

Sonríe y la beso, me encanta esta mujer. Nos secamos y de nuevo vestimos. ¿Ahora qué? ¿Dormiremos juntos?

Yo:Cariño, llevamos meses juntos y...bueno hoy ha sido algo especial,¿dormirás conmigo?

Elisabeth:Solo si me dejas entrar en tu cuarto.

Sonrío y la beso. La cojo y seguimos besándonos hasta que caemos en la cama. Una vez dentro la abrazo, esta será nuestra primera noche juntos.

Las marcas de una florDonde viven las historias. Descúbrelo ahora