Pasaron tres meses y todo estaba perfecto.
Nuestro bebé crecía cada día más. Ya se movía y ya sabíamos que sexo era. Viene en camino una hermosa niña. Con Mauro le estábamos buscando nombre y comprando algunas cosas. Compramos la cunita de color rosa, un coche morado y una sillita para el auto de color blanco.
Estábamos tan bien, tan felices.
Mi amor me cuidaba tanto. Lo único malo es que estoy como elefante. Estoy tan gorda, que me llega a dar asco verme al espejo.
Después de salir de compras, llegamos al depa.
En esa, Mauro recibe una llamada. Se pone a conversar un buen rato por teléfono y, al cortar, se me acerca y me abraza.
-Amor, hay un problema.-
-¿Qué sucede?- le dije preocupada.
-Me llamó Tito... Tenemos que viajar fuera de Chile.-
-¿¡Qué!?-
-Yo no quiero pero, el trabajo es el trabajo po mi niña.-
-¿Y a qué país?-
-Argentina... Mi tierra.-
-¿Para qué?-
-Por el campeonato amor...-
-Mmm... No me gustó para nada la idea.-
-Pero mi niña, si va a ser una semana solamente.-
-Que saco con decirte algo si tu igual vas a ir.-
-Sos adivina.- me dijo sonriendo.
-No quiero que te vayas a ninguna parte.-
-Tengo que ir nena, te prometo que haré un gol y te lo dedicaré a vos y a mi hija.-
-¿Y tú crees que me vas a comprar con un gol?-
-No, pero debo ir. Después te quejas porque Tito no me llama. Como me va a llamar si vos no me dejas ir.-
-Pero no quiero estar sola.-
-Solo va a ser una semana cariño.-
-Ok.- le dije harta, yendo a la cocina.
Mauro me siguió y me vio sacando espaguetis del mueble. Él, por otro lado, sacó una olla y puso a hervir agua. Luego sacó un sache de salsa de tomates. Cocinamos juntos nuestro almuerzo pero sin hablarnos.
Cuando la comida estaba lista, nos la servimos y nos sentamos en la mesa a comer. Mientras almorzábamos, él me pregunta:
-¿Estas enojada?-
-Sí. No quiero que vayas a ninguna parte.-
-Solo va a ser una semana, ¿no entendés eso?-
-¿Me estas tratando de tonta?-
-No amor, pero no quiero que te enojes conmigo. Sabes que no me gusta que estés enojada.-
-Ya, ok, haz lo que quieras.- me levanté de mi silla enojada y me metí al baño.
Me desvestí y me metí a bañar.
De pronto, siento que abren la puerta.
-Mauro, déjame sola.-
-Amor, deja de enojarte.-
-Entonces déjame sola.-
-Que te vaya bien...- le dije cortante.
Mauro salió del baño y dio un portazo.
-¡Se te quedó abierta!- le grité.
En eso, siento otro portazo más fuerte que el anterior.
-¿¡Ahí sí!?- me gritó.
Yo, me salí de la ducha, me puse la bata y salí del baño más que enojada.
Lo vi sacando algunas ropas del closet y guardándolas en un bolso de mala gana.
-¿¡Por qué diste un portazo, ridículo!?-
-Vos me dijiste que se había quedado abierta, así que la volví a cerrar.-
-Qué chistoso tu...- le dije sarcástica.
-Gracias.- sonrió.
-Ah y vas a seguir.-
-Uy... Tan enojona que me saliste...- se acercó a mí y me tomó el brazo.
-Aléjate.-
-Nunca me voy a alejar de vos pequeña.-
-Mmm... ¿Y cómo vas a ir a Argentina?-
-Es trabajo amor... Solo trabajo.-
-Si po, trabajo se llama ahora.-
-Kelly, no te voy a ir a engañar a Argentina.-
-¿Y cómo sé yo que no?-
-No po cariño. Para que ir a Argentina si te puedo engañar aquí.- me dijo sonriendo.
-Mira. Ves que eres pesado. Te gusta hacerme enojar.-
-Jajaja... Nunca te sería infiel.-
-¿Y el beso con Dagmar?-
-Eso no fue infidelidad.-
-Yo lo sentí así, Mauro.-
-Aj... ¡Que te digo que no!-
-¡No me grites!-
-Ok...- me miró a los ojos. Luego se arrodilló y puso su cabeza apoyada en mi guatita. -Tu mami es una loquita. Sherto bebé...-
Ahí, mi princesa se empezó a mover. Siempre cuando el papá le habla se mueve. Daba pataditas y se cambia de posición. Lo malo, es que cada vez que se mueve, me da pánico y me siento para poder calmarme.
Me senté en la cama y Mauro se puso a mi lado.
-¿Aún te aterra que nuestra hija se mueva en tu vientre, pequeña?-
-Sí.-
-Tranquila, no te va a pasar nada.-
-Mauro, con respecto a lo del viaje, te quiero de vuelta el lunes sí o sí.-
-Sí mi vida.- me dijo. Me tomó la cara y me dio un delicado beso en los labios. -Te amo cariño. Y desde que supe que me ibas a hacer padre, me has convertido en el hombre más feliz del mundo. Gracias pequeña.-
Nos acomodamos en la cama y nos quedamos profundamente dormidos.
Hola... Bueno aquí les dejo otro capitulo. Quiero decirles que este findesemana no voy a subir capítulos porque voy a estar muy ocupada, tengo que ordenar todas mis cosas para el colegio y como me las di de vaga en las vacaciones, debo terminar algunas tareas.. pero es eso. VOTEN Y COMENTEN LO QUE LES PARECIÓ LA NOVELA. NO SÉ CUANDO VOLVERÉ A SUBIR OTRO CAPITULO, PERO INTENTARÉ HACERLO LO ANTES POSIBLE... Cuidense demasiado.. Besos... L@s quiero.. <3
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Mi verdadero platónico
FanfictionEstá es la historia de una típica adolescente que pasa por ese período dónde se enamora de alguien imposible! Pero la suerte de ella puede cambiar con tan sólo doblar la esquina!