Capítulo 4

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Pronto habían 4 integrantes nuevos en nuestra mesa, todos conversaban de temas diferentes pero Maria José parece ajena a las diferentes conversaciones, me gustaría hablar con ella pero...

"Hola Daniela" Una suave voz interrumpió mis pensamientos, levante la vista y vi una pequeña sonrisa tímida extenderse por toda su cara en el momento que la mire "No hablas mu-u-cho" Ella estaba nerviosa, ¿Por que se pone nerviosa? No le voy a hacer nada.

"No sé de que hablar" Admiti "Todos están hablando y a mi solo me gusta escuchar" Mire hacia abajo con timidez "No es gran cosa" Murmuré

"Pensé que hablabas mucho, te ves como una persona habladora" Despues de un tiempo añadió "Cuando te veo, siempre estas hablando y sonriendo" Sus mejillas se tiñeron de un rosado al darse cuenta de sus palabras "Digo, no-o te miro-o mu-ucho"

"Así que me miras" Levante una ceja "Interesante"

"Hoy la profesora dira de que trata el trabajo" Cambió rapidamente el tema "Estoy emocionada, me va bien en química"

"A mi también me va bien, pero a veces me confundo con las formulas" Mis mejillas estaban rojas, ella estaba tratando de no reírse.

"Eres demasiado tierna" Admitió con una sonrisa sincera "Nuestra siguiente hora es Química, ¿Quieres que te acompañe a el salón?" En ese momento Sebastián golpeo mi brazo con su codo, sonriendo juguetonamente.

"Yo eh... Si" Era extraño, no éramos muy cercanas "Falta poco para que empieze la clase" Revise la hora en mi IPhone, faltaban exactamente 5 minutos para terminar el receso de almuerzo.

"Okey vamos" Maria José se levantó y empezó a despedirse de todos, imite lo que hizo.

"Me dejas solo Daniela" Susurró Sebastián al momento de despedirme "Tenemos clases juntos y te vas sin mí" Fingió estar dolido.

"Si quieres puedes venir con nosotras" Mordi mi labio mirando a Maria José "Vamos a el mismo lugar ¿no?" La chica peli-azul asintió y Sebastián se levanto de su asiento despidiéndose de todos.

Él camino a el salón de química fue silencioso, al llegar Sebastián y yo nos sentamos en el mismo lugar de siempre mientras que Maria José se sentó unos asientos más adelante. Poco a poco se empezó a llenar el salón con estudiantes, la profesora pidió que todos se sentaran con sus respectivas parejas, vi a Maria José caminar hacia mí.

"Hola de nuevo" Saludo animadamenre, le devolví el saludo y se sentó en el lugar de Sebastián.

30 minutos más tarde la profesora ya había dado las indicaciones, todos estaban trabajando concentrados, Maria José estaba examinando la hoja con el procedimiento, tenia el ceño fruncido, me parecía adorable.

"Podríamos repartirnos el trabajo" Dijo después de 5 minutos "Creo que esta vez la profesora nos dio un verdadero reto" Dijo rascándose el cuello mientras analizaba el salón.

"Entonces ¿que deberíamos hacer?" Arruge mi nariz pensando en como repartirnos el trabajo "Podriamos dividir los problemas" Dije inspeccionando la hoja.

"Esta bien" Asintió y no volvimos a hablar hasta el termino de clase.

"Deberíamos seguir en mi casa" Sugerí "Es espaciosa y cómoda" Expliqué entregandole mis cálculos para ordenarlos.

"¿Que día?" Pregunto con una gran sonrisa, mientras empezaba a ordenar todo.

"¿Viernes despues de clases?" Dije mientras tomaba mi bolso "Es el único día que tengo libre" Era cierto, los demas días hacia fiestas en mi casa y asistía todo él instituto.

"Bueno, entonces el viernes en tu casa" Afirmo mirándome "¿Me das la dirección?" Preguntó Maria José mirandome a los ojos, ¿había mencionado que sus ojos son hermosos? No puedo identificar su color pero son únicos.

"Si quieres Sebastián y yo te podemos llevar" Dije perdiéndome en sus ojos por unos segundos "Él tiene un auto y siempre me lleva, podrías ir con nosotros, pero tendras que soportarnos cantar" Mencione eso recordando como cantamos esta mañana.

"Gracias, creo que es mejor que me vaya contigo, seguramente me pierda tratando de llegar" Suspiro y soltó una risa juguetona.

Me despedí y fui caminando a mi seguiente clase, pero sólo pude pensar en Maria José. No entendía porqué pero lo deje pasar. Estaba metida en mis pensamientos cuando me di cuenta de que había escrito "Maria José" en mi cuaderno, al instante lo borre y deseé que fuera viernes.

Al salir de clases fui directamente al baño, necesitaba refrescarme, al llegar tire mi bolso a un lado, comenze a labarme la cara. Se formo una mueca en mi cara al ver mi maquillaje corrido, mierda, había olvidado totalmente el maquillaje, bueno ¿Un día sin maquillaje que haría de malo?

Al salir instantáneamente busque a Sebastián, No lo veía, ¿Donde estaba? Lo llame pero no contestaba.

A lo lejos divise a Paula, estaba manteniendo una platica divertida, quizás ellas sabrían donde estaba Sebastián.

"¿Han visto a Sebastián?" Fue lo primero que solté al verlas.

"Hola, estoy bien, gracias, y ¿tu como estas?" Paula bromeo, fue un poco descortés de mi parte no haber saludado.

"Lo siento" Me senti apenada por mi comportamiento "Y estoy bien"

"Tranquila Dani, y respondiendo a tu pregunta, Sebastián se fue a su casa" Paula me miro con preocupación. Todavía no acababan las clases ¿Por que se fue? Y ¿Como volveria a mi casa?

"¿Que sucedió?" Sebastián no saldría tan rápido del instituto si no fuera algo importante.

"No sé, solo lo vi salir corriendo, no contesta las llamadas" Paula eso ya lo sabía, lo llame 10 veces pero solo escuchaba el buzón de voz, pensé.

"Escuche que en clases recibió una llamada y salió del salón" Kim se mordió el labio.

Intente llamar de nuevo a su numero, buzón de voz, intente otra vez con esperanza, buzón de voz, este proceso se repitió 8 veces hasta que me di por vencida.

Al terminar mis intentos fallidos para que Sebastián contestara sentí que alguien me toco el hombro con delicadeza, como si tuviera miedo de molestarme.

Gire para ver a la pequeña persona que estaba frente a mí.

"Hola de nuevo" Maria José sonrió tímidamente "Te ves nerviosa" Me mantuve unos segundos en silencio, solo me limite a asentir vacilante mente "¿Paso algo?" Me miro con preocupación evidente.

"Sebastián" Suspire y mire hacia otro lado "Se fue y no responde las llamadas" Comprobé mi celular para ver si había señal de él "Él no se iría así"

"¿Crees que le haya pasado algo?" Me miro directamente a los ojos, nunca me cansare de decir que sus ojos son hermosos.

"Quiero pensar que no" Sonrió tristemente al escuchar mi respuesta.

Y como si pudiera leer mis pensamientos ella supo lo que yo necesitaba.

"¿Quieres un abrazo?" Al instante en el que asentí fui envuelta en un abrazo.

Diría que sentí mariposas, pero maldita sea, no sentí solo mariposas, sentí un zoológico completo.
Deseé quedarme en sus brazos toda mi vida.
Las corrientes eléctricas y miles de sensaciones diferentes se sentían en mí, mi corazón golpeaba mi pecho como un martillo, ¿Como podía sentir tanto con solo un abrazo de una amiga?

Tenemos Química •Caché•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora