Prólogo

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-Haber chicos hoy harán algo diferente.- Mencionó Virgo mientras llevaba algunos papeles al comedor de esa "humilde morada" que más bien era una mansión de cuatro partes.

Todos los signos estaban reunidos ahí esperando su tan preciado almuerzo. Hasta que llego Virgo a anunciar la noticia. Por un lado estaban los signos de agua prestando atención al signo de tierra. En el otro lado de la mesa estaba un adormilado toro esperando ansioso su almuerzo mientras que observaba como el león se observaba en su pequeño espejo mientras Libra le hablaba animadamente.

El mayor de los tierra carraspeo la garganta un poco para que todos le prestaran atención a Virgo quien desde ya un rato intentaba que Aries, Géminis, Sagitario y Acuario le prestarán atención.

Virgo agradeció internamente a Capricornio.- Hoy haremos una misión que Oficuo tuvo la confianza de dejar en nuestras manos- vio como el signo del pez alzaba la mano.- ¿Si, Piscis?

-¿Por qué nos daría una misión sabiendo que somos un desastre?- esas palabras habían salido de la boca de Escorpio quitándole la oportunidad a Piscis de poder hablar.

-Bueno, no lo se, pero tenemos que completar la misión.

-¡Ojala se trate de ser espías!- grito emocionado el arquero.

-¡¿O que tal si nos mandan a detener un metioríto?!- ese fue Aries.

-Ojala sea destruir la Tierra- hablo el acuariano sonriendo mientras todos le veían confundidos.- Vamos, ¿quién no quisiera destruir la Tierra?

-Acuario, literalmente nos mandaron a la Tierra para cuidarla, no para destruirla- le explico cariñosamente Cáncer.

-Estoy harto de la tierra, siempre que intento conquistarla ustedes me lo impiden- se cruzo de brazos hundiéndose en su asiento.- Malditos mortales.

-Acuario, te lo e explicado quinienta y cinco veces, la tierra es el planeta más débil, debemos cuidarlo, para eso nacimos- le explico esta vez Virgo.

-Si, si, lo que digas- bufó, algún día dominará el mundo, de eso estaba seguro, mientras tanto seguiría con las misiones que les enviaba Ofiuco.

-Nos desviamos del tema. ¿Cuál es la misión Virgo?

-Bueno, Capricornio, la misión es-...- fue interrumpido.

-Por favor que no sea como la última vez que tuvimos de ir detrás de "aliens" que resultaron ser estrellas admiradoras de Acuario- se quejo el leonino.

-Por lo menos yo si tengo admiradoras león- sonrió orgulloso.- Esas estrellas, fue la primera vez que me sentí querido- fingió secarse una lágrima.

-Tuvimos que viajar hasta Neptuno por una falsa alarma- suspiro Piscis al recodar ese suceso.

-¿Me dejaran hablar?- preguntó un enojado Virgo, y eso no era bueno para algunos.

-Callense, no me quiero quedar sin almuerzo por su culpa.

-Tú siempre con hambre torito- se burló.

-Calla alacrán.

-Callate tú, vaca.

-No es vaca, es toro imbécil- fruncio el ceño.

-¿Cómo me dijiste?- se acercó peligrosamente a este.

-Te llame imbécil, ¿algún problema?- la sonrisa de soberbia en su rostro se borro al sentir como el otro lo agarraba por el cuello de la camisa.

-Vuelves a decirme imbécil y juro que uso tu cuerpo en sacrificio a Hades, enano- sus ojos se habían ensombrecido. Todos en la sala se quedaron callados en espera de que Tauro respondiera, al eso no pasar Escorpio lo soltó.- Eso creí.

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