El Globo

1.2K 84 4
                                    

Cuando desperté vi a Ji Yong durmiendo, se veía lindo y pasivo. Su cabello que ya estaba creciendo un poco me encantaba, sus labios y todo de él. Deslicé mi dedo índice por sus labios, esos labios que me fascinan, luego a sus mejillas... ¿Cómo es posible  que llegué a enamorarme de esta forma? A tal punto que creo que no podría vivir sin él, él se volvió como el aire que siempre respiro y ahora tendré un bebé, de él, de ambos y me encantaba esto, pero siempre en toda historia debe haber algo malo (y bueno en mi historia de amor siempre lo hay) y eso malo era que dentro de un día iríamos a Londres y debía de enfrentar la realidad... estaba nerviosa, asustada y no sé que más, mi mente y mis emociones estaban colapsando.

- Estúpida realidad - bufé despacio mientras revolvía mi cabello - Ji Yong no me dejes - susurré y deposité un corto beso en sus labios.

Luego de un rato Ji Yong me despertó, él hizo el desayuno o bueno intentó hacerlo.

- Desayuna mi panda-mono - sonrió.

- lo imité y vi el desayuno, se veía perfecto, delicioso y por más que amo a Ji debo ser realista él no sabe cocinar ¿La razón? Toda comida que quería lo preparaba Dae o compraba, sencillo - Ji ¿Tú preparaste todo esto?

- sonrió demasiado, tanto que no podía ver sus ojos, solo sus dientes blancos - ¡Si!

- arqueé la ceja - ¿Seguro? ¿No me mientes?

- hizo un puchero - No te miento, aprendí a cocinar sólo un poco.

- no le creo... así que seguía frunciendo el ceño -

- No me veas así, hablo en serio. Yo aprendí a cocinar, me fue difícil pero no imposible - hizo un mohín y como vio que no le creía sacó su teléfono y llamó a alguien -¿Dami?, noona necesito tu ayuda... Mi Yong no me cree que tomé clases de cocina, puedes decirle la verdad.

- me dio el teléfono mientras hacía un mohín - Hola Dami - dije nerviosa.

- Omo unnie Ji Yong-ssi dice que no le crees ¿Verdad?

- Bueno es verdad, es que no sabía y me sorprendió con el desayuno.

- Aigoo ese chico se fue a clases de cocina, contrato a la mejor chef para que le dicte clases - rió - y parece que la chef logró hacer un milagro.

- reí - Hoy lo comprobaré, bueno unnie gracias por haberme sacado de dudas.

- No te preocupes, adiós unnie - colgó y le devolví el teléfono a Ji Yong.

- Ahora ¿me crees? - estaba cruzado de brazos y parecía triste, creo que lo herí.

- mordí mi labio - ahh... lo siento, si te creo.

- no me miraba y parecía enojado -

- Aishh lo siento, ya no me trates así - protesté.

Cómo no obtuve una respuesta ya que estaba resentido, me levanté de la cama con cuidado sin hacer ningún desorden y lo abracé por la espalda, pero vamos él es más alto que yo por unos 10 cm así que  de puntillas pude colocar mi barbilla en su hombro.

- Ya no estés así - susurré en su oído - así luces malvado - bromeé.

- escuché que rió despacio, pero volteó rápidamente así que caí a la cama y él se puso encima mío y me vio fijamente y sonreía - ¿Luzco malvado ? - se acercó más a mí - ¿Quieres ver que tan malvado puedo ser? - susurró en mi oído - ¿Quieres ver que cosas malas puedo hacerte? - mordía su labio.

¡Diantres! Que tentación, lo tengo cerquita, esos labios me están tentando demasiado, bueno quiero saber que tan malo es mi chico.

- Uhmm ojalá que mi chico sea muy malo... a bad boy - entrelacé mis brazos sobre su cuello y lo atraje hacia mi. ¿Qué hice? Lo besé, me gusta hacerlo y creo que esto iba para más si no era porque  el teléfono de Ji Yong timbraba.

®Mi "Rara" vida en Corea del Sur (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora