Clavirence

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*nota de autora*
Este capítulo se lo dedico a mis amigas y fans, Lucia Q y Paula J.

¿Viene de Bleasen como yo?
Violeta se sienta a mi lado.
-Hola, soy James- le digo en voz baja.
-Soy Violeta, mucho gusto.
-¿Vienes de Bleasen no?
-Si, y por lo que acabo de oír tu también.
-Ah si, yo he venido hace unos pocos días.
Miss Collins se gira y me mira.
-Y yo que creía que por fin te centrabas en tus estudios Parish.
-Solo estoy siendo amable.
-Me conmueve tu simpatía, pero la hora de hacer amigos es en el recreo no en clase.
Pongo los ojos en blanco, ¿Se puede ser más borde?
-Esta bien.
-Vale, ahora prosigamos.
El resto de clases las paso callado y atendiendo.
Cuando por fin llega al patio, me dirijo a Violeta.
-¿Quieres que te presente a unos amigos míos?
-Claro.
Llevo a Violeta hasta el patio y allí veo a Calum, a Rubio y a Yonah.
Me acerco a ellos.
-Chicos, os presento a Violeta, este es Calum, el es Yonah y por último este es Rubio.
Calum la mira de forma normal, ¿Por qué a mí me miró de arriba abajo cuando nos conocimos, y a ella no?
-Es guapa- dice Calum secamente.
-Gracias-dice Violeta con una sonrisa.
-¿De dónde eres?- pregunta Yonah.
-De Bleasen.
-A pues James y yo también lo somos.
-Que bien, y yo que pensaba que no iba a conocer a nadie de la ciudad.
-Pues ya nos conoces, y si necesitas algo no dudes en pedírnoslo- Digo.
-Gracias.
Entonces vemos pasar por delante a Rubi, la cual está con su séquito de aduladoras.
-¿Quién es esa?
-Es Rubi- Dice Rubio.
-Es muy guapa.-dice Violeta mordiéndose el labio.
No me jodas que se va a unir al séquito de Rubi.
-¿Te liarías con ella?- dice Rubio con un tono burlón.
-Sin duda.
¿Le gustan las chicas?
-¿Te molan las tías?- pregunta Calum con cara seria.
-Si y también los tíos, soy bisexual.
-Yo soy algo parecido- digo.
-¿Algo parecido?
-Me gustan las tías, pero hay un tío en específico que me la levanta con solo acercarse, aunque lo raro es que desde que lo conocí, ya no me pone cachondo con ninguna otra persona.
Mierda, lo he dicho delante de Calum, ¿En qué cojones estará pensando?, si es que soy imbécil.
-¿Quién es?- pregunta Yonah.
Puto Yonah, sabe perfectamente quien es.
-No creo que lo conozcáis.
Puede que con esto le ralle un poco la cabeza a Calum, ¿Pero que podría decir?, ya le dije que le quería y el solo me ignoró.
Calum se levanta.
-Me voy a fumar.
Y se va.
Mejor, así pensará en mi.
Sonrío, la idea de que se coma el coco pensando en mi me hace feliz.
Entonces suena la sirena y cada uno se va a su clase.
Cuando acaba la última clase, me voy a hablar con Calum.
-¿Haces algo esta tarde?
-No, pensaba irme a mi casa como siempre, de hecho, ¿Por qué no te vienes?
¿Ir a la casa de Calum?, por supuesto que voy a ir.
-Vale, ¿Vamos juntos?
-Si.
Salimos juntos de Clavirence, nos montamos en mi moto y Calum me indica donde está su casa.
Llegamos a su casa o más bien a su apartamento.
Calum vive en un barrio, que es muy diferente al mío.
El edificio en el que vive, es viejo y está lleno de grafitis.
-Sígueme.
Sigo a Calum hasta recepción.
-¿Qué tal Cal?, ¿Vuelves a traer carne fresca?
Miro al chico de recepción, es flaco, alto y bastante guapo.
Su pelo es de color negro y está rapado por los laterales.
Tiene unos ojos de color azul celeste.
Lleva piercings en la oreja y tiene un tatuaje en el brazo derecho en el cual pone.
-Fate-
-Que va, este es diferente.
-Ah, el don Juan del barrio se ha jubilado.
-Tampoco te flipes, yo nunca descanso.
-El día en el que no te vea con la polla levantada, te juro que te regalo el piso.
Calum se ríe.
-¿Y me lo cambiarías por un polvo?- dice acercándose a él.
Joder, ¿Y yo para qué le pregunto si tiene planes?, es Calum, siempre está follando, ese es su plan perfecto, al fin y al cabo solo soy uno más de sus "polvos mañaneros".
-Buen intento pero no cuela, tendría que ser algo más que un polvo para que te regalase el piso. Aunque ahora no me vendría mal uno, ¿Te apuntas?
¿Carne fresca?, ¿Soy diferente?, ¿Cambiar un piso por sexo?, ¿Qué cojones está pasando?
-Na, ya vengo acompañado, se llama James.
Su ¿Amigo?, me mira de los pies a la cabeza.
Qué manía tienen con mirarme de arriba a abajo.
-Me gusta, tiene su toque pijo, ¿Lo compartes?
-No, es mío.
¡¿Qué cojones está pasando?!, ¡¿Compartirme?!, ¡¿Que soy suyo?!, no entiendo nada.
-En fin, avisadme si necesitáis algo.
-Okey, adiós Hans.
-Adiós Cal.
Calum me hace una señal para que le siga.
-Adiós pijillo.
-Adiós-Digo sonriendo.
Subimos las escaleras y llegamos a su apartamento, Calum saca una llave y abre la puerta.
-Bienvenido a mi humilde morada.
Sonrío, es un piso bastante normal, es simple y acogedor.
-Me gusta.
-Me alegro, ¿Quieres comer algo?
-No tengo mucha hambre.
-Okey, ¿Qué quieres hacer?
Miro si sofá, quiero que me folle en el, pero no se me ocurre la manera de decírselo.
-¿Vemos alguna peli?
-Tengo "no respires".
-Va.
Nos sentamos en su sofá y empezamos a ver la película.
Al principio estaba centrado en la película, pero poco a poco me he ido desviando de ella, en lo único en lo que puedo pensar, es, en que estoy en la casa de Calum, en lo diferente que es su vida de la mía y en las "maravillosas" charlas que tiene con ese tal Hans.
Joder, quiero aprovechar la ocasión y tirármelo.
-Calum.
Se gira y me mira.
-¿Qué?
-Quiero follar.
Calum me mira sorprendido.
Puede que haya sido un poco directo.
-¿Te ha puesto cachondo la película?
-Que va, llevo queriendo metértela desde que hemos entrado.
-¿Y por qué no me lo habías dicho?
-Emm...
¿Y ahora cómo le digo a este que me daba vergüenza después de todas las cosas que hemos hecho?
Que cojones, me lanzo encima de él y ya.
Me acerco a la boca de Calum.
-Quiero que seas mío...