1998, Carabanchel. Un partido se disputa en el campo público del barrio. El sol ardiente de verano hace que los pocos espectadores anden de un lado para otro en las gradas, en busca que unos pocos centímetros de sombra. La mayoría no están ahí por gusto, sino para vigilar que sus hijos no se partan algún hueso.
Nuestro protagonista se encuentra luchando por continuar en la liga esta temporada. Stuart, un joven sencillo de 16 años con gustos no muy particulares y una vida común entre los adolescentes. Su novia se encuentra en el banquillo aburrida, deseándole suerte desde la distancia. Tampoco está ahí por gusto. Stuart había insistido mucho en que por lo menos hiciera acto de presencia.
Los dos equipos, empatados, están luchando por ganar como si no hubiese un mañana. Con el tiempo que les queda, el equipo que marque el último gol continuará y el perdedor tendrá que sumirse en la máxima derrota.
Stuart está de portero, confiado, ya que su equipo es mucho mejor que el contrario y él no tendrá que hacer mucho.
Sus amigos lo están haciendo genial, estan dándolo todo, ya que si pierden no volverán a competir hasta el próximo año.-¡Vamos, que el partido ya está ganado! -grita Stuart en un intento por animar a sus compañeros.
Sin embargo, al estar distraído pensando en la gran victoria de su equipo, la fiesta que celebrarían más tarde y el reconocimiento de todo su distrito, no ve venir a un alto y corpulento jugador contrario que se aproxima peligrosamente con el balón en los pies.
Sus amigos se habían distraído por sus gritos y no habían podido impedir que el equipo contrario se hiciera con el balón.Antes de que Stuart se pueda dar cuenta, se encuentra en el suelo totalmente inconsciente con un balonazo en la sien y todo su equipo y su novia observando asustados el cuerpo inerte del joven.
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2000, Carabanchel. Un bonito amanecer asoma por la lejanía, a través de una sobria ventana del hospital central en Madrid. En la cama de dicha habitación yace Stuart, desde hace ya más de dos años, en coma por un simple balonazo.
Como de costumbre, sus familiares acuden a visitarle, con la esperanza de que despierte de su largo sueño. Sus amigos también iban de vez en cuando, y tenía atención de enfermeras y médicos las 24 horas. La única persona que no se acercaba al hospital era su novia, Rita, una de las chicas más populares del instituto. No tardó mucho en superar el accidente de su "queridísimo" novio ya que ni un mes pasó y ya había encontrado más de 3 sustitutos de Stuart.
—¡No vale la pena seguir viniendo, Margaret! –exclama su padre– ¡No va a despertar, por el amor de Dios!
—¡Miguel! Tenemos que preservar la fe en nuestro señor. El señor es bueno, solo quiere lo mejor para nuestro hijo, no quiere hacerlo sufrir...
Su madre, anteriormente atea, había empezado a asistir a la iglesia por Stuart. Ella pensaba que podría ocurrir un milagro si toda su familia rezaba por su hijo. También convenció a su marido, pero éste no llego a creer en el supuesto milagro en ningún momento. Margaret se había convertido en una persona extremadamente religiosa de un momento a otro. Y todo por culpa de Stuart.
—¡No digas estupideces! Hace dos años que empezamos a rezar y todavía no ha pasado nada.
—Pero Dios es bueno, y sucederá un milagro, –dice entre lágrimas– yo lo sé, yo sé que Dios puede.
Sus abuelos, Fortunato y Asunción, que también se encontraban la habitación aquella desdichada tarde, comenzaron a rezar, una de sus prácticas diarias. Mientras tanto Miguel los observaba con cara de desaprobación ya que él sabía que eso no iba a solucionar nada. Lo único que podían hacer en esas circunstancias era esperar. Esperar al día en el que Stuart decidiera despertar de su largo sueño lleno de fantasías.
Tras su práctica religiosa, los familiares abandonaron el lugar, dejando atrás sus esperanzas, como de costumbre.
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El secreto de Stuart (El Trío Secreto De Harry 2)
Ficção AdolescenteStuart, un jóven de 16 años con una vida sencilla, sufre un accidente que le cambiará la vida por completo. Nuevos recuerdos se manifestarán en su mente y se verá obligado a diferenciar entre la vida y la ficción. (Historia en proceso) PREMIOS/POSIC...