¿Qué es lo que siento por ti?

Capítulo XXV: Secretos Expuestos...

Los rayos del sol pegaron directo en mis ojos, los abrí molesta, odiaba despertar así; confundida vi a mi alrededor y sentí un agradable calor contra mi cuerpo, mis brazos, ahora entrelazados en el cuerpo de Peridot se negaban a separarse de ella y luego recordé todo, estaba en la casa de Garnet, durmiendo con Peridot y, lo de anoche... Mis ojos se abrieron como platos y un muy notable sonrojo se apodero de mis mejillas, baje la vista y ahí estaba ella, tranquila y respirando pausadamente mientras se aferraba a mi, no quería despertarla pero debía hacerlo... -Peridot...- dije suavemente –Peridot- repetí a lo que ella hizo un gesto arrugando la nariz –Cinco minutos mas please- dijo aun adormilada, sonreí y me atreví a peinar un poco su cabello, pareció gustarle ya que sonrió pero seguía sin abrir los ojos –Peri... Debemos irnos...- susurre de nuevo y acaricie su mejilla con mi pulgar –Si... Irnos... Ya voy solo cinco minutos mas- reí y bese su frente –Tengo que llevarte a casa Peri- parecía que mis intentos por despertarla estaban siendo en vano –A mi casa... Llevarme... A... Casa... ¿A mi casa?- su rostro se arrugo –Si, debo llevarte a tu casa con tu madre- cuando dije eso inmediatamente abrió los ojos -¿Mi casa?- repitió viéndome y viendo todo alrededor y de inmediato se alejo un poco de mi, decepcionada me senté para verla -¿Paso algo?- le dije bajito, ella pareció calmarse un poco –No... No... Es solo que... Olvide que estaba aquí- bajo la mirada sonrojada –Me paso lo mismo, el sol me despertó- dije estirándome –Deberíamos buscar nuestras cosas y luego a Garnet, olvidamos hacerlo ayer para hablar sobre el viaje- ella se sentó y con su puño froto sus ojos

"Se ve tan tierna"

-Cierto, lo olvidamos por completo ¿Qué hora es?- yo negué –No lo se, mi teléfono esta dentro de mi pantalón y la verdad dudo que tenga batería...- -El mío murió anoche... Pero parece que apenas amanece, mejor vamos de una vez, mamá debe estar preocupada- nos levantamos y lavamos nuestras caras, arreglamos un poco nuestro cabello y fuimos directo a la piscina, en el camino encontramos varias chicas durmiendo por todos lados, muchas, aun con botellas en sus manos, otras, menos afortunadas habían botado el contenido de sus estómagos justo a sus lados e incluso sobre ellas... Pasamos con cuidado, esquivándolas... Llegamos a la piscina y Amatista y Perla estaban durmiendo sobre una de las sillas para tomar sol, abrazadas y tapadas con una toalla, nuestras cosas seguían en la mesa, nos vestimos, tomamos nuestras pertenencias y nos dirigimos a buscar a Garnet –Mmm... ¿Dónde crees que este, Lapis?- -No lo se, tal vez este durmiendo- -Preguntemos en el salón de la comida- asentí y nos dirigimos al mismo, estaba aun lleno de comida, Peridot tomo un pastelito pero yo no quise nada –Mmm... Esta bueno, Amatista estará feliz cuando vea esto- dijo Peri riendo, yo asentí mientras me reía –Si, este es el paraíso para ella- le preguntamos a uno de los mesoneros que estaban atendiendo y nos indico que estaba al lado de la tarima, fuimos y en efecto, estaba ahí sentada en una silla y parecía dormir aunque era difícil decirlo porque aun tenia sus lentes puestos -¿Garnet?- dije bajito a lo que ella en seguida se levanto sentándose bien –Peridot, Lapis ¿Qué tal la pasaron? ¿desayunaron?- asentimos –Estaba todo muy rico y la pasamos genial- dijo Peridot a lo que yo sonreí afirmando lo que había dicho –Bien; imagino que me buscan por lo del viaje ¿no?- nosotras asentimos –Bueno, hable con mi abogada, podemos sacarle un permiso a Lapis para que sea tu representante en este viaje, lo único es que tu madre debe aprobarlo y firmar un documento; si me permiten mi abogada se hará cargo de todo y les avisare cuando deben ir a firmar- nosotras asentimos –Seria perfecto Garnet- dije yo -¿Tienen alguna fecha en mente?- -Dentro de una semana podría ser? Es que salgo de vacaciones- dije bajito rascando mi nuca -¡Si, perfecto! Entonces déjenme poner a mi abogada a trabajar en el permiso y les estaré avisando chicas- nosotras sonreímos –Gracias Garnet, en serio eres la mejor- dije, ella solo sonrió y levanto su pulgar –Bueno, ya nosotras nos vamos- -Es temprano aun- dijo Garnet –Si pero debo dejar a Peri en su casa y luego ir a casa de mi madre- -Oh, entiendo, un compromiso familiar- -Si... Digamos que algo así- dije nerviosa a lo que Peri presiono un poco mi mano, al final nos despedimos y salimos de la mansión, subimos al auto y viajamos en un agradable y tranquilo silencio... Sin darme cuenta ya estaba en la casa de Peridot, me detuve y cuando iba a bajarme a abrirle la puerta ella halo mi brazo –No es necesario, puedo abrir la puerta yo Lapis- yo solo la vi y asentí –Esta bien... Entonces... ¿Estamos hablando?- dije nerviosa –Si, estamos hablando, avísame como sale todo con tu madre- sonrió y despeino mi cabello -¡Heeey!- le dije a lo que sonrió -¡Suerte!- beso mi frente y rápidamente se bajo –Gracias- susurre mientras la veía marcharse y junto a ella ese calor agradable y la tranquilidad que tenia hasta el momento... Entro en su residencia y arranque con rumbo a mi casa, debía tomar un baño y arreglarme antes de ver a mi madre –Seguro debe estar llamándome- dije para mi, conecte el teléfono a cargar pero apagado, así cargaría mas rápido, llegue a mi departamento en cuestión de minutos, subí y de inmediato tome un baño, busque un pantalón que aunque de vestir me quedaba algo holgado y su tela era súper suave y cómoda, una camisa negra y un pequeño chaleco azul, día de descanso así que quería ropa cómoda, arregle un poco mi cabello y prepare un pequeño bolso para llevármelo, solo lo esencial, tenia sueño pero había pensado en que dependiendo de como saliera todo llevar a mi madre a almorzar o algo, salí y encendí el teléfono, en seguida comenzó a sonar, muchas notificaciones... Lo deje mientras arrancaba de nuevo y active el altavoz del auto, marque el número de mi madre y al segundo tono contesto