Día A Día Contigo

Incómodo II

2D se sintió intimidado ante la mirada de Noodle, sus grandes manos anclándose en la cintura de la joven guitarrista, tratando de alejarla, sin embargo, ella volvió a chocar sus caderas contra las del cantante, provocándole un gemido placentero.

- ¿Qué estabas haciendo? – Su garganta se secó, no podía admitir la verdad y decirle que se estaba masturbando, pensando en ella, pero su mente aún estaba adormecida, por lo cual se limitó a suplicar que se alejara.

- Noodz, déjame solo. – Noodle hizo caso omiso al pedido, comenzando a menear sus caderas sobre la tela que cubría la erección, el cantante luchando contra sus instintos que le demandaban tomar a la pequeña mujer sobre él.

- Responde ¿qué estabas haciendo? – Exigió, los ojos de Stuart apretándose como si estuviese sufriendo, sin embargo, se relajó cuando sintió la suave y húmeda piel de los labios de la mujer sobre los suyos, besándolo superficialmente. – Anda, dime.

- Yo...yo...amor...me da vergüenza. – Sintió como una mano femenina se soltaba de su agarre en el cuello, bajando hasta la manta que le cubría la parte inferior, apartándola para tocar su pene endurecido.

- Alguien no está de acuerdo con eso. – 2D gimió, ella pasando sus uñas por su piel antes de tomarlo con su mano, pareciendo sopesar su tamaño. – Parece que todo en ti es grande, Toochi.

- Me estaba...me estaba tocando. – Su voz sonó más desafinada que de costumbre, suspirando ante el toque de los suaves dedos, la mano adquiriendo un ritmo regular.

- ¿En quién pensabas?

- En ti...- Contestó sin pensar, sus caderas arqueándose en busca del delicado toque que se hacía más y más rápido, apretando levemente.

- ¡Oh, Stu, que dulce! – Apartó su mano, dejando al cantante confundido, él dándose cuenta de lo que había dicho y separando los párpados, listo para enfrentar la furia de la japonesa, sin embargo, se encontró con los ojos verdes cargados de sorpresa y un hambre que lo hizo jadear.

- ¿No estás...enojada? – Por respuesta, ella le besó, deslizando la lengua sobre los labios agrietados de él, gimiendo con aprobación cuando él abrió la boca, sumergiendo su lengua en busca de su contraparte.

Las grandes manos masculinas la tomaron del trasero, animándola a frotarse contra su cuerpo huesudo, ella respondiendo con un ronroneo que calentó aún más la sangre del hombre de pelo azul. Dio una última mordida antes de separarse de él, llevando sus manos hasta el dobladillo de la camiseta que estaba usando, quitándosela y mostrando sus pechos a Stuart, quien observó atentamente los pezones rosados antes de alzarla lo suficiente para que estuviesen a la altura de su boca, tomando uno entre dientes.

Noodle se sintió incomoda, su cuerpo calentándose ante las atenciones de 2D, su interior apretándose, suplicando por lo que había estado tocando previamente.

Con esfuerzo, salió de la cama, mirando al cantante con una sonrisa mientras deslizaba sus pantalones cortos junto con su ropa interior, volviendo a su lugar, apartando la cobija que aún cubría lo que ella deseaba.

- Alguien nos puede ver. – Susurró 2D, respirando agitado al sentir la resbaladiza entrada de su pequeño amor.

- Cúbreme con la cobija, así pensaran que solo soy una groupie. – Suspiró cuando él hizo lo que ella dijo, cubriéndose también para alejar cualquier mirada curiosa.

Ambos lanzaron un gemido placentero cuando 2D entró lentamente en Noodle, los dos saboreando la sensación de ser uno. Las manos de la guitarrista se agarraron de la camisa del cantante, su cuerpo comenzando a moverse, disfrutando del grosor y dureza del hombre.

Stuart se dedicó a besar y beber el sudor de su amante, correspondiendo los choques de ella contra él, gruñendo de placer, tratando de concentrarse en los hermosos sonidos que escapaban de la boca femenina.

Ella le agarró la cabeza, chocando sus labios con fuerza, montando más rápido la erección, lloriqueando, sintiendo como la punta de sus pies se entumecían, sus piernas enredándose en torno al cantante.

La espalda de Noodle se arqueó, un gemido agónico escapando de sus labios mientras todo su ser se estremecía, su vagina estrechándose y apretando al cantante en su interior, él gruñendo cuando su cuerpo llegó también al límite, vaciándose dentro de ella.

Se abrazaron en medio del éxtasis, ambos jadeando, Noodle sonriendo; a pesar de haber sido algo rápido, había sido sumamente placentero para ella.

2D la miró fijamente, riendo antes de sentir como se acercaba a su rostro y lo besaba lentamente, exhalando su aliento sobre sus labios.

- La próxima vez que tengas ganas, ve a verme, te recibiré con gusto y no tendrás que tocarte.

- Noodz...- Se limitó a apretarla entre sus brazos, relajando sus músculos en cuanto ella comenzó a acariciar sus hombros. - ¿En qué necesitabas ayuda?

- En nada importante. – Murmuró aún sonriente. - ¿Crees que posamos tener una segunda...? – La pregunta quedó en el aire, la mujer jadeando al sentir como él besaba su cuello, listo para prepararla para algo aún más placentero.

Después le diría que solo lo necesitaba para colgar un cuadro y el pequeño detalle que estaban solos en casa, por el momento solo quería disfrutar otra vez de la pasión del cantante.

Y lo iba a hacer. Varias veces de hecho.