12 de junio (1493)
Se escucha en el lago cerca del territorio del Conde de Lazar las voces y risas de jóvenes divirtiéndose y danzando al compás de una cítara.
Zita estaba dando una presentación especial a Darien y a Davinia de los nuevos estilos y movimientos de baile que había aprendido en los viajes que realiza con su padre en los otros territorios. Los tres llevaban cuatro años de amistad, y cada año Zita y su familia regresaban a Moldavia a entretener al Conde en su cumpleaños, este año no era la excepción.
Los tres jóvenes se reunían en las orillas del lago Prut cerca del castillo para escuchar las asombrosas historias que Zita les contaba, ella los cautivaba con su voz y los mantenía absortos con la fantasía y misterio que tenían sus cuentos y leyendas.
--¡Ahhh! ¡Maravillosa historia! Zita, me has dejado perpleja –comenta Davinia
--Sí, tus historias son asombrosas y me encanta la forma en que las cuentas, no hay nadie en mi reino que lo haga como vos –alega Darién con una hermosa sonrisa en sus labios que hace que las mejillas de Zita se sonrojen, ella trata de disimular dándole la espalda y mirando hacia el horizonte. De entre los árboles sale un personaje que interrumpe el plácido momento que están pasando, diciendo...
---Tu reino, ja, ja, ja es una tonta broma, este reino es solo mío y me pertenecerá por ser el primogénito, a ti solo te pertenecerá un simple pedazo de tierra que yo quiera otorgarte, si es que me da la gana. -– refuta Dante
---¿Qué haces aquí, hermano? Este lugar no es de tu agrado según me has dicho –- mira Darién a Dante con recelo.
---Si hermano vete, tu destruyes todo lo divertido - – comenta Davinia haciendo pucheros.
---¡Callate!, contigo no estoy hablando y deja de hacer pucheros que me desagrada -–alza la voz Dante para asustar a Davinia.
---Y vos gitana indigente deja de manipular a mis hermanos y retírate, no te he dado permiso de estar en mis territorios, tu sola presencia me repugna. -–mira a Zita de pies a cabeza y escupe en el suelo cerca de los pies de ella.
---Como dijo Darién, no eres todavía el rey y nada te pertenece. Y según mi abuela en sus visones nunca llegarás a sentarte en el trono de tu padre. –-las palabras de Zita se clavaron como filosas espadas en el corazón de Dante, su semblante cambia de color y parece que la vena en su frente va a reventar de cólera y rabia. Se acerca a Zita y trata de golpearla.
---No te atrevas a tocarla y menos enfrente de mí –- toma Darién el brazo de Dante antes de intentar golpear a Zita.
---Te atreves a desafiarme, seré tu rey y soy tu hermano mayor, me debes obediencia y respeto, y prefieres defender a esta sucia gitana que no es más que una ...---Darién le da un golpe en la quijada a Dante antes de terminar su oración.
Dante se tambalea y se desorienta por el golpe, cae al suelo. Mira a su hermano con odio y desprecio, se levanta y arremete contra Darién con toda su fuerza. Zita y Davinia tratan de separarlos ya que los dos se encuentran inmersos en una pelea personal.
Dante en su afán de ganar golpea a Darién con una roca en la cabeza y lo deja inconsciente.
---¡Nooo! , lo matastes –- grita Davinia al ver que sale sangre de la cabeza de Darién y más aún que no despierta. Zita corre a su auxilio.
---No te preocupes Davinia sigue respirando, ve a buscar ayuda -– le indica Zita
---Iré a buscar a nuestro padre y le diré lo que hicistes, ya verás lo que te hará por a ver lastimado a su hijo predilecto, ¡Si su hijo predilecto! Aunque te duela, así es... –--corre Davinia en dirección al castillo.
Dante trata de detener a su hermana pero ella se le escapa entre sus manos, se acerca donde esta Zita con Darién y le dice...
---Esto es solo tu culpa, si a él le pasa algo será solo tu responsabilidad –-le asevera Dante a Zita.
---¡Mi responsabilidad!, la envidia y codicia que estas acumulando en tu corazón es lo que te hace actuar de esa manera tan cruel y atroz, no eches culpas a terceros. Y esa actitud es la que hará que pierdas todo –- le advierte Zita.
--¡TODO! , ja, ja, las visiones desatinadas de tu estúpida abuela, no me asustan, ni me quitan el sueño. Todo lo que ven tus ojos será mío e inclusive tú misma. – al terminar de decir estas palabras, Zita lo mira y abre los ojos en señal de asombro.
---¡Qué, no te acuerdas! Te dije que serias mía hace cuatro años atrás y no he cambiado de parecer –-sonríe en forma tétrica Dante.
Zita no puede pronunciar ni una sola palabra, se encuentra asustada por la forma siniestra en como la mira Dante y tiene miedo en que él trate de aprovechar que Darién esta inconsciente y le haga daño a los dos.
Pero se escucha a los perros y la guardia del rey acercándose, parece que Davinia ya informó sobre la situación y todos vienen a socorrer a Darién.
Zita da un suspiro de alivio a ver que otras personas se acercan y que Dante no puede hacerles daño.---No creas que siempre te van a venir ayudar, yo siempre obtengo lo que quiero, ten eso bien presente cuando vayas a dormir.
Dante guía a la guardia a donde esta Darién y les indica que fue un accidente y entre todos lo socorren y lo llevan al castillo.
Zita está en el gran salón de baile esperando noticias de Darién, ya que no la dejan ingresar a las habitaciones. Se encuentra preocupada porque han pasado horas y no tiene noticias de él, ingresa al salón Daria con su característica mirada de desprecio ante las personas que son inferiores según ella.
---Te informo que Darién ha despertado –-Zita al escuchar esas palabras salta de emoción.
---No entiendo como Darién puede ser tu amigo, y no me interesa la clase de amistad absurda que tengan, pero debes tener muy presente ¡Qué solo serás eso para él!, no habrá ninguna otra clase de relación entre los dos, espero a ver sido muy clara. –-su mirada se clava en Zita.
---Ahora puedes retirarte --– le indica Daria la puerta
---Pero yo necesito ver a Darién, necesito que.... –--Daria la interrumpe con un grito y no permite que termine su oración.
---Te informe que está bien, es más de lo que mereces, por tu culpa mis hermanos están enfrentados, así que si no te vas de buen agrado, tendré que llamar a los guardias para que te saquen a la fuerza. ¿Tú decides? –-Daria mira con altivez a Zita esperando que se vaya de inmediato.
Zita baja la cabeza, hace una venia a Daria y se retira, sus ojos están llenos de lágrimas por no poder ver a Darién pero entiende que si se queda ocasionara más problemas
********.
Darién se encuentra dormido en su habitación, el médico de la familia le mandó reposo hasta que sane la herida de la cabeza. Una figura observa a Darién desde las sombras y se acerca poco a poco a la cama en donde reposa él.
---Eres un tonto, pelearte por esa sucia gitana; espero que solo sea amistad y lastima lo que te mueve a protegerla. -–Se inclina y lo besa en la frente.
---No permitiré que nadie se interponga entre los dos, eres mío Darién y no me importa que seas mi hermano. ¡Yo te amo! Y nadie te alejara de mí. –- Daria lo besa en los labios y acaricia su cabello mientras él sigue durmiendo.
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La Maldición de la Luna de Sangre
VampireEn 1493 en una noche de luna roja los gitanos en su afán de conseguir justicia y venganza lanzaron una maldición a la familia Lazar convirtiéndolos en los primeros vampiros, caminantes de la noche, saciando su sed con la sangre humana. Darién terc...