La jinchuriki color de rosa

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Todo comenzó un lindo día de primavera, 28 de marzo, para ser exactos, en una humilde morada en el centro de la ciudad una mujer acababa de dar a luz a una pequeña niña, su cabello era color de rosa y al parecer sus ojos eran color jade, la casa de aquella familia se lleno del jubilo y la felicidad que desprendía ambos padres, pero sabían que no siempre sería así.
Con el nacimiento de esa niña el bijû que la madre guardaba en su interior escapó y comenzó a causar pánico entre los habitantes de la aldea.
-Mi pequeña Sakura, lamento todo el dolor que esto pueda causarte en un futuro pero... Es necesario, por tu bien y el de la aldea- dijo tristemente un señor de cabello lila grisaseo, la madre tenia lagrimas en los ojos que trataba no dejar salir, ella había pensado que podrían crecer como una familia, y le aferraba la idea de que su pequeña creciera sola, no quería que eso sucediera pero sabia que no podría evitarlo, entonces ya no aguantó mas, y todas las lagrimas que había guardado botaron de sus ojos por montones.
-No llores Mebuky, ella será el orgullo del clan Haruno, y no importa lo que pase, estoy seguro de que siempre saldrá adelante-
Mientras tanto en otra casa de la aldea 10 de octubre
Una mujer pelirroja acababa de dar al luz a un pequeño niño rubio de hermosos ojos azules, su pareja estaba feliz, ya eran padres, peromsu alegría no duraría mucho, con el nacimiento de bebe la madre había desatado el poder que mantenía oculto en su interior, el bijû de 9 colas estaba suelto y eso no se quedaria así, su esposo el cuarto hokage dijo que tendrían que guardar al kyubi dentro de su hijo, la Uzumaki estaba en  desacuerdo, no quería que si hijo sufriera por mantener oculto al kyubi en su interior, pero sabia que era lo mejor, al salir de casa se encontraron con sus viejos amigos, estos tenían a una linda bebe pelirrosa en brazos, al verlos los saludaros y les preguntaron a donde iban.
-Justo lo buscábamos cuarto, necesitamos que selle al bijû de 10 colas en Sakura, es por el bien de la aldea-
-Ibamos a hacer lo mismo con nuestro hijo Naruto, ¿porque no los sellamos al mismo tiempo?, les aseguro que serán buenos amigos en el futuro-
-Por supuesto hokage sama- y así fue como el bijû de 10 colas y el de 9 fueron selladas en el interior de esos dos niños, dos criaturas que mas adelante se encontrarían y compartirán todo el dolor causado por la perdida de sus padres y por mantener encerrado a un bijû.