¿Que sientes por mi? - Lucaya

Cap. 50

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Narra Maya:

Nuestra amistad no era sana, lo sabía... siempre lo había sabido pero la amaba, era la persona con la que siempre podía contar.

Riley me hacía sentir insegura en todos los sentidos, siempre había visto por ella dejando mis necesidades aún lado. Siempre había estado dispuesta ah dejar todo por ella porque me sentía sola, insuficiente, imperfecta y rota ah comparación de mi mejor amiga.

Ahora quería ser fuerte, independiente. Por primera vez quería luchar por mi felicidad y ser feliz con la persona que amo más que ah nadie, con aquella que me dejaba respirar con tranquilidad. Que me quería por ser quien soy.

Había leído alguna vez que, "Habrán docenas de personas que te robaran el aliento, pero solo una te recordará como respirar..."

Lucas era eso para mi, el aire se atoraba en mi garganta con sólo un roce de manos, y con una miraba, con sólo ver sus hermoso ojos verdes me recordaba que debía respirar de vez en cuando.

Él lo era todo...

Él era mío, y yo suya. Solo eso necesitaba para ser feliz... ah Lucas Friar.

Deje que mis pulmones se llenarán con el frío aire de Nueva york antes de atreverme ah subir las escaleras de la azotea y terminar con esto de una vez por todas. El resultado era simple, eramos él y yo, juntos.

- Amo ah Maya - aquel grito llegó ah mi de sorpresa - pero si tuviera que elegir, te prefiero mil veces -

Narra Lucas:

Mala idea... esto era una mala idea, y sin embargo, aquí estaba. Esperando ah aquella castaña que volvería mi mundo de cabeza en un parpadeo.

R.- Viniste - escuché antes de cerrar los ojos y suspira

L.- Lo hice - giré, frotando mi nuca instintivamente - ¿Que necesitas decirme? -

R.- Mira... - desvía la miraba unos segundos - Lucas, en mi vida eres el primer chico que me ah gustado, mi primer beso y mi primer novio. Eres mi primero en muchas cosas y solo de pensar en lo que paso en Texas me revuelve el estómago... no quiero esto. Me. arrepiento. -

No digo nada, soló espero ah que continúe para poder entender sus palabras, toda ella me dice que es sincera, con cada letra.

R.- Duele, verte en sus brazos, duele... duele como nada me ah dolido antes. Odio verlos besarse, sonreírse, mirarse, reír juntos, odio ver lo mucho que se quieren. Me arrepiento rotundamente de haberte arrojado ah sus brazos - habla tan rápido que su pecho sube y baja sin parar mientras trata de contener el aliento, aun mirandome - soy egoísta y lo se, lo sé y lo siento. Pero te amo, desde el primer día, desde que nuestros ojos se encontraron por primera vez en clase de historia. No puedo simplemente dejarte ir para que seas feliz con mi mejor amiga -

Río un poco, dejando salir algo de frustración en el momento.

R.- Amo ah Maya - su primera lágrima cae y me sorprende cuando no siento nada - pero si tuviera que elegir, te prefiero mil veces -

L.- Esta no es tu decisión - quizás sueno muy rudo al decirlo - también me gustas Riley, pero, con Maya todo es distinto. Nunca había tenido este sentimiento... como si mi corazón se fuera a salir de tan rápido que late cuando la veo, cuando sonríe oh la escucho reír... me mata cada vez que esa felicidad llega ah sus delirantes ojos azules y se que es por mi. No puedo, Riley - suspiro entregándole mi corazón en palabras - no puedo elegirte porque estoy estúpidamente enamorado de Maya Hart -

Nuestras miradas siguen en contacto, sus ojos llenos de lágrimas, los míos, con aquel anhelo de decirle ah Maya y ah todo el maldito mundo lo que eh estado sintiendo todo este tiempo. Ahora es cuando caigo en cuenta.

Siempre ah sido Maya... siempre ah sido Maya desde el día uno. Desde el momento en el que cayó ah mi regazo.

La recordé ah mi lado, siempre con una sonrisa en el rostro y ojos brillantes, recordé las risas, las conversaciones, los momentos, las inusuales ganas de verla y nunca apartarla de mi lado, sus labios sobre los míos, las indirectas. Recordé todo de ella, recordé cuanto la amaba y cada facción de su rostro... su perfecta estatura y esa inconfundibles voz que tiene. Su perfume.

Así era ella, perfecta y feliz de vez en cuando; y era toda mía.

L.- Te quiero, Riley - mi voz es suave, gentil - pero no puedo. No puedo cambiar lo que siento -

Ella solloza, y quizás me siento mal pero eso no cambia nada. No puedo imaginarme como se siente en este momento, no puedo hacer nada para mejorar las cosas porque solo la lastimaría más.

Solo.... no puedo.