No me dejes Fred weasley

un sueño realista

Iba a empezar el tercer curso en Hogwarts, al final lo pasé muy bien en la casa de los Weasley aquel verano, fuimos a la playa y todo.
Cuando volví a casa me enteré de que a mí hermana pequeña le había llegado una carta de Hogwarts, por qué a mí?
Antes de entrar en el andén mis padres me obligaron a estar con ella en el tren.
- R - Lusy, por favor ni se te ocurra hacer ninguna de las tuyas delante de mis amigos.
- L - Vale, pero cuando voy a conocer a Fred. - pegué un frenazo y la miré con cara asesina.
- R - Le conocerás, pero no estarás más que en la ida del tren cerca de él.
- L - Que te lo crees tú.
Quiero a mi hermana enserio, pero a veces me dan ganas de matarla.
Entramos en el vagón en el que se encontraban los gemelos.
- F - Hola Rouse- se fijó en Lusy.- Y esa?
- L - Tú debes de ser Fred no?- el asintió- mmmm no está mal Rouse, es bastante guapo.- Fred abrió los ojos como platos
- R - Chicos os presento a la tonta de mi hermana, Lusy.- ella me miró con su cara de angelito, pero no hay que tragársela, en el fondo es un demonio horrible.
- G - Yo me llamo George - saludó
- L - Si Rouse me habló de los dos.- se sentó entre los dos y ellos se separon a la vez de ella, de hecho Fred se cambió y se sentó a mi lado, y lo mismo hizo George después, me hizo gracia ver la cara de enfado de mi hermana.
A la mitad del recorrido el tren se frenó y cada vez hacía más frío.
- L - Rouse- susurró - esto ocurre siempre?
- R - No- miré a Fred y a George, ellos parecían igual de extrañados.
George miró por la ventana.
- G - Alguien se ha subido al tren.
- L - Rouse, tengo miedo- la agarré de la mano
- R - Tranquila.
Entonces lo que parecía un fantasma negro pasó por delante nuestra, paró y miró a mí hermana, y como un impulso cuando él entró yo me puse entre ellos, entonces sentí como mi alegría desaparecía, estaba haciéndome algo y no sabía cómo detenerle, lo único que se me ocurrió fue sacar la varita y pegarle con ella, por suerte me soltó y yo me caí al suelo, después de eso aquel bicho desapareció, miré a Lusy, estaba bien, pero muy asustada.
- G - Rouse estás bien?
- F - Qué te ha hecho daño?
- R - Estoy bien, que era esa cosa?
- G - Es un dementor.
- F - Protegen Azcabán.
- G - Es una especie de prisión mágica.
Estaba aturdida, pero me encontraba bien, pero sentí que algo en mí había sido abierto, y no era nada bueno.

Al llegar a Hogwarts encontré a Hermione, estaba con Harry, resulta que por el camino también le había atacado un dementor. En la cena Dumbledore nos contó que había ocurrido y después de eso todos nos fuimos de camino a nuestras habitaciones, pero por el camino aquello que sentí en el tren salió.
Me empezó a dar un dolor terrible en la cabeza intenté apoyarme en la parezca pero no la encontré y me caí.
- H - Rouse? Rouse!- sentí como se agachaba, pero no pude verla, mi vista empezaba a nublarse.
- F - Que le ocurre?!- noté como me cogía en brazos, pero justo en aquel momento me desmayé.

*************** SUEÑO*************
Abrí los ojos, pero ya no estaba en el pasillo, si no en la entrada, estábamos en mitad de una guerra, entonces vi a Fred y a Percy luchando contra unos mortifagos, corrí hacia ellos cuando derrepente hubo una explosión, cuando recuperé la vista deseé no  haberla recuperado nunca, Fred estaba tumbado en el suelo y no se levantaba, me puse en pié y con los oídos pitando llegué hasta él.
- R - Fred! - las lágrimas empezaron a rozar mis mejillas- Fred por favor no me dejes - no me contestaba - Por qué?! Por qué él?!  Fred! Despierta!.
Entonces todo a mi alrededor se frenó, todo se volvió blanco a mí alrededor y una voz sonó.
- ? - Tú elegirás, solo tú- cada vez sonaba más lejos - Busca lo que se perdió.

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Abrí los ojos, respiré hondo, no sabía dónde estaba, me fijé mejor y vi que estaba en la enfermería, me fui a levantar cuando me di cuenta de que alguien me estaba agarrando la mano, era Fred, estaba dormido con la cabeza apoyada en la camilla, le acaricié el pelo, estaba vivo, solo había sido una pesadilla, le escuché respirar y eso me tranquilizó. Era de noche, así que decidí intentar volver a dormir, ya descubriría que había pasado por la mañana.

Cuando me desperté, Fred ya no estaba a mi lado, pero no me sorprendía porque sabía que se había ido a las clases.

A mi lado había una silla en la que se encontraba mi ropa, todavía tenía dolor de cabeza y me sentía un poco mareada, pero tenía que salir de allí y averiguar qué me había ocurrido.
Salí corriendo y me tropecé con la profesora Macgonagal.
- R - Lo siento, no le había visto.
- Ma- a donde va con tanta prisa señorita Linse? He oído lo que le ocurrió, se encuentra mejor?
- R - Si ya estoy mejor. Me dirijo al despacho de Dumbledore, necesito hablar con él.
- Ma - Ahora mismo está ocupado, cuando esté libre iré a avisarla.
- R - Está bien.
En aquel tiempo me dirigí a la sala común de Griffindor, cuando llegaron Hermione, Fred, George y los demás les conté lo que había sentido, pero no mencioné el sueño, sería una tontería, y aunque aún mantenía el miedo y el recuerdo de Fred en el suelo en mi mente me pareció absurdo. Poco después apareció Minerva y me llevó junto al director, Fred se ofreció a acompañarme y nos siguió hasta el despacho.
Al entrar Dumbledore iba de un lado a otro sin parar quieto.
- R - Director venía para preguntarle si usted sabía qué me ha ocurrido.
- D - Tan solo tú puedes saber esa información, así que tenía planeado utilizar un hechizo que podrá revelarme tus recuerdos, después puede que te duela un poco la cabeza- a continuación sacó su varita y me apuntó con ella y pronunció un hechizo que luego descubrí que era de leglimancia.
Reviví aquel sueño parte por parte, pero algo más se añadió, al final me quedé sentada en mitad del bosque prohibido, y después sentí como salía de mi mente, tropecé y me caí al suelo, vi como Dumbledore se apoyaba en la mesa como si derrepente se hubiese quedado sin energía.
- D - Tienes el don - susurró
- F - Qué?
- D - Nunca había conocido a nadie con el don.
- R - Qué es el don?
- D - Hace años había gente especial que poseían un poder increíble un poder con el que podían salvar a alguien que estaba destinado a morir, Rouse, tienes el don de la visión.- le miré con cara sorprendida, y directamente miré a Fred que parecía no entender nada.
- R - Qué quiere decir? - me temía la respuesta pero aún así debía preguntar.
- D - En cuanto perdiste el conocimiento empezaste a ver imágenes muy reales en tú cabeza no es verdad? - asentí con la cabeza - Rouse, me temo que no fue un sueño, viste el futuro. - Empecé a hiperventilar.
- R - Pe... Pero.. no puede ser- fui retrocediendo- mi sueño no puede hacerse realidad - miré a Fred y una lágrima recorrió mi mejilla - vi como Dumbledore se me acercaba y me cogía del brazo - No me toque! - le grité y me aparté, estaba muy asustada.
- D - Rouse, ya sé que tienes miedo pero ese sueño tan solo es un aviso, significa que hay una forma de evitarlo, pero solo tú puedes averiguar cómo.- no podía más aquellas palabras no se me iban de la cabeza, así que salí corriendo al sitio al que siempre iba cuando me sentía mal, al sauce boxeador, cuando llegué lancé un hechizo para que no me atacase y me senté debajo, allí comencé a llorar.

Fred
No había entendido nada de lo ocurrido, pero no me importaba, porque lo que sí sabía es que Rouse estaba implicada y no era algo bueno, cuando salió corriendo Dumbledore me miró con cara de tristeza, todo me parecía muy raro, salí a buscarla, sabía dónde encontrarla así que me dirigí rápido al patio, y cuando la vi encogida llorando se me partió el corazón, me acerqué despacio.
- F - Estás bien? - Ella negó con la cabeza aún sin levantar la cabeza de entre sus rodillas.
Me senté a su lado y le pasé el brazo por los hombros.
- F - No sé exactamente qué está ocurriendo, pero quiero que sepas que estoy contigo. - por fin logré que me mirase - Ohhh vamos, sé que lo puedes superar todo, y no me gusta verte llorando y lo sabes - sonrió - mucho mejor.
- R - Fred... Yo... El sueño... No sé cómo explicártelo.
- F - Básicamente he entendido que ves el futuro y que en tu sueño no ocurría nada bueno no?
- R - Básicamente si.
- F - Pero Dumbledore te dijo que si habías tenido ese sueño es porque puedes cambiarlo, de alguna manera.
- R - ..... Tienes razón, y te juro que haré lo que sea necesario para que nunca llegue a ocurrir.
- F - Lo sé - la dí un abrazo y me levanté tendiéndole la mano - por desgracia ahora nos toca clase así que será mejor que vayamos para así no llegar a tener mi negativo número 200. - nos reímos y juntos fuimos en dirección al aula, seguía sin saber exactamente lo que había ocurrido, pero por alguna extraña razón sentía que yo estaba implicado.