Acto 9. El Pasado -Ya no me siento solo-

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Había pasado ya una semana desde la cena que tuvo con su mamá, con su hermano y con Alfonso. Y desde entonces Chris se ha sentido mucho más vivo, con mucha más energía. Su amistad con Alfonso seguía igual, incluso podía sentir que la confianza que tenían entre ellos había crecido mucho más. Sin embargo, le seguía intrigando que Alfonso no le haya contado sobre la pérdida de su mamá y a la vez su separación de su papá, cuando él desde la primera oportunidad que tuvo, le contó todo sobre él a Alfonso.

Esto era lo que Chris pensaba mientras trotaba a lado de Alfonso ese martes por la mañana. El ejercicio matutino también había mejorado mucho gracias a Dodger, incluso podría decir que es más divertido, pero ese día, la mente de Chris se había enfocado en conocer más a fondo a su amigo Alfa.

-Oye Chris...- Dijo jadeante Alfonso -No crees que es momento de parar un momento a descansar. Ya tengo hambre.

-Soldado, ¿que clase de rendición física es esa?- Dijo Chris en su tono de Steve.

-Por favor, además Dodger también ya tiene sed y es hora de que también coma algo.- Dijo suplicante Alfonso poniendo su cara de preocupación exagerada.

-De acuerdo, yo daré dos vueltas más, Dodger y tú pueden esperarme en la banca de en medio.- Ni tarde ni perezoso, Alfonso tomó al perro para ambos llegar a la banca que le indicó Chris. Se sentó y ató ligeramente la correa de Dodger para que no saliera corriendo; agradeciendo Alfonso que Dodger fuera un perro muy tranquilo en las mañanas, especialmente cuando salían a ejercitarse, por lo que no era necesario atarlo con fuerza.

El lugar donde corrían era amplio, lleno de árboles y vegetación, pero también tenían los respectivos caminos alrededor para no pisar las áreas verdes, también pequeños pasillos dentro de la misma para llegar a la bancas que habían. El lugar donde se encontraba Alfonso, era exactamente en medio del espacio.

Se dio cuenta que Chris se detuvo exactamente en medio de lugar, quedando frente a él, pero en la orilla del área; ésto con el objetivo de trotar en línea recta hasta poder llegar a donde estaban ellos. Mientras Chris trotaba con un ritmo normal (ni muy rápido ni muy lento), Alfonso no podía apartar la mirada de él. Trotaba con una sonrisa en su rostro (le estaba volviendo a  crecer su barba), y conforme se iba acercando Alfonso admiraba más su belleza; ese sudor matutino lo hacia ver muy sexy, se había marcado una mancha húmeda en su playera, y cuando lo tocaban algunos rayos de luz, se podía ver su piel húmeda brillar. Es increíble pensó Alfonso mientras lo admiraba; Chris se iba acercando más y la mirada de Alfonso fue bajando hasta ver la parte baja de su abdomen.

Chris estaba usando unos pantalones deportivos muy holgados de color azul marino, y su forma de trotar hacía que su bulto resaltara y se marcara con mucha claridad en ellos; incluso Chris lo podía sentir ya que trató de acomodarlo, pero era inútil. ¿Bulto? Más bien su miembro, su pene. Dijo en voz baja Alfonso mientras podía sentir que se estaba sonrojando y esbozaba una sonrisa algo pícara. No podía creer que él mismo estaba pensando en el miembro viril, de su amigo. ¿Mi amigo? No. Somos casi hermanos, él mismo lo dijo. Pero... ¿cómo será? En ese momento finalmente llegó Chris sentándose a su lado.

-¿Y eso Alfa? ¿Por qué estas sonrojado? ¿Acaso viste a una chica guapa?- Pregunto Chris empujándolo de lado.

-No para nada. Solo que esta vez si me cansé de trotar.- Contestó Alfonso algo apresurado por los nervios, mientras Chris abría su botella de agua.

Ambos estuvieron sentados, platicando de diversas cosas, mientras Dodger se había acostado en el pasto al ver que su dueño estaba muy concentrado en la charla. Finalmente Chris optó por preguntarle a Alfonso sobre su pérdida, así que tomó un tono serio:

¿Será esto AMOR o CONFUSIÓN? (Chris Evans) (Yaoi) (Fanfic) (Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora