- Que buen incentivo nos da Althea- susurré y me dirigí hacia la cama.
- Sera mejor que por hoy, nos quedemos en otra habitación
- ¿Nos quedemos? - me atreví a preguntar
- -Claro que si- me tomo de la mano y me hizo levantar
Caminamos hacia el pasillo y fuimos a una habitación alejada del resto de los demás, en mi excursión de la Manoir (aunque anteriormente fuera bien precisa que digamos), no la había visto, la puerta era completamente negra, ya con ese color, aunque fuese hermoso, el aura que emanaba era oscuro, busque disimuladamente entre mis ropas mi varita, por si acaso.
Si digo que las apariencias engañan, es porque en verdad es así. Al entrarnos pude divisar una cama matrimonial de madera, y hermosamente tallada, poseía un amplio ventanal que daba vista hacia un lago, sus paredes blancas como el mármol, al frente de la cama se encontraba una chimenea, ya estaba encendida, y daba un aspecto hogareño a la habitación.
-Que hermosa vista- pude decir
-Puede que sea incomodo- mire hacia Theo y puso una mano en la barbilla- Pero era la habitación de mis padres, aunque no la ocupaban de hace años, exactamente 16 años, ellos quisieron otra habitación después, pero esta era la principal, mmmm... puede que sea raro, pero también fue la habitación de mis abuelos, tatarabuelos y tatataabuelos, y muchas tátaras más- soltó una risa – y esta seria nuestra habitación- tosió- por tradición familiar.
-O sea tus padres y todos tus demás familiares tuvieron relaciones en la cama- y apunte a ella- me perturba un poco- dije
- Yo he tratado de no pensar en ello Hermi- pego un salto en dirección a la cama y se quedó ahí, hice lo mismo para acompañarlo, debo reconocer que el techo igual es increíble, aunque un poco anticuado. Había un enorme árbol genealógico, trate de no pensar que todas aquellas personas (que eran muchas), durmieron en donde yo estoy ahora mismo.
-Mira- miré hacia Theo y vi que señalaba hacia un punto en específico del árbol en la parte final para ser exacto.
En la última rama se encontraba al último descendiente de la familia Nott, se leía claramente Theodore Nott... pero ahora se le estaba uniendo una que se entrelazaba con la de él, a pesar que estaba borroso aun, se podía apreciar el nombre mío Hermione Granger, y de ellas dos se desprendía una tercera, he de suponer que será de nuestro hijo... nuestro hijo, que fuerte, no sé si estoy preparaba para ser madre a tan temprana edad, aunque en mi interior ya se estaba haciendo la idea, sentía un cosquilleo cada vez que pensaba en ello. Aunque aún no sé cómo lo haremos... en verdad si se, pero una cosa es decirlo y la otra hacerlo.
-Serán 5- sentí que Theo hablaba en voz baja, al mirarlo ladea la cabeza pude ver su perfil y una pequeña sonrisa se podía divisar.
-¿Porque sonríes?-
-Serán 5!!- exclamo y sorpresivamente me abraza, pude oler su fragancia.
- ¿5 que? - le devolví el abrazo algo torpe.
Se separó un poco de mí y me miro – ¿No te figaste en el árbol? – me pregunto.
Miré hacia el techo y vi que ahora debajo de nuestros nombres había 5 ramitas pequeñas, se supone que ahí irán nuestros hijos ¿o no? espera!!... 5 hijos!!, yo toda asusta al pensar que tendría uno y este árbol de cuarta me dice que ¿tendré 5?
-Debe de estar mal Theo- me senté en la cama y vi que él se colocaba al frente mío.
-Sabes ahora sé porque la mayoría se fue de esta habitación- se volvió acostar y mirar el techo- este árbol te dice exactamente cuantos hijos tendrá la pareja a lo largo de su vida, y como vez – dirigió sus dedos hacia las demás ramas- mis familiares solo han tenido uno- sonrió- 5... no puedo creerlo.
-Ni yo- dije
Cuando paso mi momento de shock, porque ¿Quién se entera que tendrá 5 hijos en un día? ¿Nadie?,¿Verdad? pedimos a Althea que nos llevara la comida a nuestra habitación... y si, nuestra habitación de ahora en adelante, por decisión de los dos.
-Hermione...- me giré para ver qué era lo que quería Theo, y vi que andaba solamente con bóxer y se le notaba todo, sentí mis mejillas arder y aparte la vista, aunque la imagen aun la tenía bien presente en mi cabeza, esos abdominales bien marcados, daban ganas de arañarlo lentamente.
Sentí su mano en mi cara y la giro lentamente, nuestros ojos se encontraron y vi esos azules, vi deseo, ansia de lo que iba a venir, levanto mi mentón y vi que se acervaba, nuestros labios chocaron lentamente, a pesar de no haber sido nuestro primer beso, este se sentía tímido, fuimos probándonos el uno al otro, nuestras lenguas chocaban entre ellas, su mano se fue hasta mis caderas y con sus dedos masajeaba en ellas. No me quise quedar atrás y comencé a tomar sus abdominales y como suponía, arañarlos suavemente se sentía tan bien, el calor iba tomando parte de mi cuerpo, las prendas sobraban en estos momentos, y cuando menos lo espere ya estaba en ropa interior sobre la cama.
-Eres tan hermosa- me comenzó a besar mi rostro y fue bajando por mis hombros, hasta el inicio de mis pechos, al llegar ahí saco mi brasier y se apodero de mis senos saboreándolo, deleitándose con cada uno de ellos. Siguió bajando hasta llegar a la zona prohibida, en donde nadie ha puesto las manos, quería que el fuses el primero, lo soñaba, pero ahora era una realdad.
-Seré cuidadoso- vi cómo me sacaba las bragas y las dejaba a un lado, desde mi posición se veía tan guapo, la luz de la luna hacia resaltar su color de piel, tan cremosa, su cabello negro hacia contraste perfecto con sus ojos azules y ese cuerpo de infarto que se gastaba, y ese bulto grande que se escondía entre sus piernas, sería mi perdición.
Vi como bajaba su bóxer y no pude despegarme de aquella monstruosidad, ¿enserio?, abajito que es tan chico no caerá esa cosa, por inercia junte mis piernas, sus manos trataban de abrir paso con delicadeza y no me quedo de otra que acceder, ahora seriamos uno.
-Theo...- sentí algunas lágrimas caer por mi rostro, el dolor era insoportable, quería que lo sacara, Theo trato de que me calmara con besos por toda mi cara, aunque él no paraba para nada, al dejar de un lado el dolor dio paso a la pasión, el gozo, el querer más.
-Theo ...mas ...rápido- pude decir mientras mis palabras eran calladas por mis gemidos.
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Destined to be together
RomanceElla la castaña, heroína del mundo mágico, ha tratado de dejar el odio hacia una de las casas de Hogwarts que tanto repudio le tienen. Hará todo lo posible para que los demás hagan cuenta nueva, pero los resentimientos serán difíciles de borrar. Sol...