TVD "Más que una inmortal"

Capitulo 1: El Inicio, Mystic Grill y un asesino

Me pare enfrente de un lugar llamado Mystic Grill, parecía el bar de esta pequeña localidad en Virginia así que decidí entrar, al hacerlo varias personas se me quedaron viendo y al llegar a la barra un chico rubio de ojos azules me atendió.

-Elena ¿en que te puedo ayudar? –me dijo.

-Mi nombre no es Elena – dije sonriendo de lado. 

-Elena no juegues - en su voz había descontento y cansancio.   

Hice cara de no saber de qué estaba hablando y la verdad era que no lo sabia, al menos no sabia quien era Elena.

-¿Te puedo ayudar en algo? Mi nombre es Matt- finalmente reacciono y dijo eso con una sonrisa de oreja a oreja. 

-¿Me podrías dar un vaso de jugo de naranja por favor?- respondí con una sonrisa de igual modo.

-Claro en un momento te lo doy- y se fue por mi orden. 

Mientras el me traía mi bebida yo observaba todo el lugar viendo quien sería mi próxima presa hasta que un chico guapísimo de ojos azules y cabello negro se sentó a lado mío y me hablo.

-Hola guapa- me dijo, su voz era ronca y sinceramente muy sexy. 

-Hola -le dije para que me dejara en paz, estaba hambrienta y se veía de lejos que el quería hacerme perder el tiempo, y yo no tenia tiempo, tenia hambre. 

-Aquí tienes tu jugo- llego Matt con la misma sonrisa con la que se marcho.

-Gracias Matt- le dije sonriéndole inocentemente.

-Mi nombre es Damon Salvatore ¿el tuyo es...?- dijo con una sonrisa de esas que matan a cualquier chica humana y no humana del mundo.

-Beverly- dije terminando mi jugo que estaba delicioso- ¿cuanto va a ser Matt?- me volví hacia el mientras le hacia la pregunta. 

-Oh nada, cortesía de la casa por ser nueva- volvio a sonreir.

-Insisto en que debo pagar y ¿como sabes que soy nueva?- pregunte con desconfianza.

-Eso es sencillo, no te había visto nunca así que supuse que acababas de llegar y enserio es cortesía de la casa.

-Okay bueno tengo que irme. Adiós Matt, adiós Damon.

-Adiós Beverly- dijo Matt, quien supongo había escuchado mi nombre cuando se lo dije al tal Damon  y salí del establecimiento.

Iba caminando por la banqueta admirando el paisaje, hacia mucho que no venia por aquí, cuando alguien me alcanzo y me hablo.

-Así que ...dime Beverly... ¿porque estás aquí?- era Damon , Dios este hombre no se cansaba de molestar.

-Eso no es de tu incumbencia- le respondí un poco molesta.

-Oh vamos no le tienes que contestar así a tus mayores-dijo el 

-¿Cuántos años tienes? ¿20? – pregunte, sabía que era vampiro, se podía notar desde kilómetros pero aun así el creía que yo podía ser una víctima suya así que decidí seguirle el juego.

 -Bueno... No es por presumir pero tengo 172 años- Este era momento perfecto de mi actuación.

-Eso es imposible ...¡no¡ – puse cara de espantada y empecé a alejarme de el, casi corriendo. 

-Tranquila, no te voy a hacer nada, soy un...-hablaba con voz muy lenta y tranquila.

-Vampiro- a complete yo, aun con mi actuación.

-Exacto, pero tranquila no te voy a hacer nada- me miro a los ojos intentando utilizar la compulsión conmigo – no gritaras, no harás nada, te tranquilizaras y actuaras normal ¿ok?

-ok- dije aun con la cara espantada, vaya parecía que el no tenia ni idea de lo que le esperaba. 

-Así que dime ¿cuántos años tienes?- pregunto curioso.

-¿Cuantos me calculas?- le dije todavía con voz asustada, ¡Dios¡ Amaba actuar, tal vez deberia pensar en estudiar actuación. 

-mmm unos 18 años- dijo sonriendo con una mueca.

Bueno, tiempo de terminar mi actuación. Y yo que me estaba divirtiendo...  Redoble de tambores....

-Tengo 1018 años- dije con una sonrisa de superioridad, de esas creidas. 

-¿¿¿¿QUEEEEEEE¡¡¡¡¡¡????- su cara era una mezcla de incredibilidad y enojo.  

-jajaja  tu cara es para morir- dije aun riendome.

-Pero ¿como?, espera, ¿que? No tienes anillo de lapislázuli- dijo el muy pero muy sorprendido.

-Si lo se.

-Pero como es eso posible eso es imposible, estarías quemándote ahorita mismo, ardiendo¡

-Bueno estoy aquí así que ...-dije encogiéndome de hombros.  

-Vamos- dijo jalándome con un poco de brusquedad.

-¿A dónde vamos?- pregunte confundida y molesta, ¿que le sucedía? Soy Beverly Linov, a mi nadie me jalonea.

 -A la mansión Salvatore, mi hermano tendrá algo que decir sobre ti.

-¿Sobre mi? - pregunte aún más molesta. 

-Si, sobre ti- dijo el también molesto

-Okay guapo, estoy dispuesta a ir yo sola por mi cuenta sin que me jales, si juran que después de eso me dejaran en paz. 

-Empieza a caminar entonces- dijo Damon

Hola chicos¡ no me he presentado debidamente, bueno esta es mi primera historia y espero que sea de su agrado, no olviden votar si es que les gusto.