Todo a mi alrededor es negro. A lo lejos escucho una voz que dice mi nombre, cada vez se hace más y más cercana.
Keitlyn.
Keitlyn.
Keitlyn.
-¡Keitlyn! -abro los ojos lentamente, los cuales están cristalizados y veo a mi hermanita, parada junto a mí.
-¡Melody! -grito feliz y me siento, ya que me encontraba acostada, para abrazarla hasta que me separo de ella a los minutos-. ¿Y Nathan, Beth, Tiffany, Sasha y Jake? ¿Y nuestros padres? ¿Y que hay de Lesly? ¿Dónde están todos? ¿Y por qué estamos en el gimnasio?
Melody se me queda viendo asustada, como si fuera un bichito raro.
-¿Estás bien? ¿Te golpeaste la cabeza cuando te quedaste dormida en la banca? -pregunta divertida-. Jake está entrenando a los otros chicos que vinieron al gimnasio; Beth y Sasha se encuentran en sus casas, creo; nuestros padres están en casa. No sé quien es Tiffany, Lesly o Nathan; creo que estás delirando.
-¿Qué? ¿Todo fue un... Sueño todo este tiempo? -pregunto para mí misma reincorporadome.
Mis lágrimas salen de mis ojos recordando como finalizó todo. Meneo la cabeza entrando en razón, todo fue un simple sueño. Vaya ¿Quién lo diría?
-¿Estás bien? -asiento-. Perdón por despertarte, pero ya llevabas mucho tiempo durmiendo. Desde que inicié la clase te dormiste y eso fue hace tres horas.
¿En tres horas soñé todo eso?
-No te preocupes -limpio mis ojos y me estiro para desperezarme un poco-. Vamonos.
Empezamos a caminar rumbo a nuestra casa. Melody iba contadome sobre la clase de hoy y como Jake la felicito por superarse cada vez más, lo cual no me sorprende debido a que Jake les hacen cumplidos para subirle la moral a todos, y sobre todo a Melody que en un principio no quería asistir a las clases.
Iba tan sumergida en la plática que no me fije por donde iba y choqué con algo, o mejor dicho alguien.
-¡Wow! ¡Ten cuidado! -dijo una voz demasiado conocida para mí, le mire y no podía creerlo.
Estaba allí, frente a mí, sostenido mi mano para que no cayera al suelo por el impacto.
-¿Nathan? -pregunté sorprendida.
-Eh...¿si? -él arrugo el ceño-. Disculpa ¿Nos conocemos?
-Yo... Creo que no -digo parpadeando.
Me reincorporo, más no le suelto. Esto es tan extraño, lo tengo frente a mí, estoy viva, todo fue un simple sueño pero él está aquí. ¿Cómo es eso posible? ¿Dejá vu?
-Eh ¿Podrías soltarme? -dice sacándome de mis pensamientos.
-Oh si, lo siento -digo nerviosa soltándome de él, lo que provoca que él suelte una risa ronca.
-No te preocupes -dice con una sonrisa en sus labios-. Soy Nathan Hold, aunque creo que ya me conoces -no quita la sonrisa de su rostro.
-Eh, yo soy Keitlyn McGavern y ella es Melody McGavern, mi hermanita -digo de la misma forma.
-Hola -pronuncia Melody a mi lado.
-Hola pequeña -dice tendiéndole la mano a mi hermana para luego incorporase-. Un gusto, Keitlyn.
-Dime Keit -le digo.
-De acuerdo, Keit. Bueno, debo irme, mi primo me ha de estar esperando. Adiós y un gusto, nuevamente -nos dice avanzando.
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El asistente de mi padre
Novela JuvenilElla siempre tenía mala suerte en todo lo que ocurría. Apenas empezaba a vivir su adolescencia y ya tenía desilusiones, tanto amorosas como familiares. Pero algo cambiará su vida y le permitirá conocer algo que no solo se basa en problemas, desilusi...