Nunca me lo imaginé

Capítulo 22

*Nayeon:

Estaba en el sofá viendo la televisión esperando a que Momo llegara a casa, espero que haya podido hablar con Jeongyeon, estaba muy alterada cuando recibió la noticia pero no quería que sus amigas la vieran en ese estado.

-¡Momo!- me levanté rápidamente del sofá para abrazarla en cuanto entró al departamento.

-Conejita- respondió al abrazo y luego dio un beso en mis labios- ¿qué haces despierta a esta hora? te dije que no me esperaras- 

-Lo sé amor, pero... no tenía sueño- mentí, el sueño me estaba matando pero quería asegurarme que mi lindo mapache llegara sana y salva a casa.

-Hm, está bien- su cara lo decía todo, no me creyó.

-¿Quieres ir ya a la habitación? debes estar cansada- di un pequeño masaje en sus hombros los tenía un poco tensos.

-Antes quiero ducharme- bajó mis manos de sus hombros y caminó hacia el baño, a veces me duele que diga las cosas tan seria- ¿quieres entrar conmigo?- se volteó haciendo una sonrisa picara.

-Estaba esperando que lo dijeras- me crucé de brazos y pasé a su lado dándole un leve empujón.

-Ay pero contigo no se puede jugar- sobó su hombro *Exagerada ni siquiera le golpeé tan fuerte* 

-Me voy a salir si no entras ya- grité desde el baño. Oí sus pasos apresurados y finalmente entrar al baño cerrando la puerta tras ella.

(...)

*Chaeyoung:

Íbamos con las demás chicas en dirección al hospital, hoy es el cuarto día desde que hospitalizaron a Jeongyeon. Mina y yo estábamos agarradas de mano, se sentía tan bien sentir el calor de su manos mientras caminábamos por las calles de Seúl.

-¡Oigan!- la voz chillona de Sana captó la atención de todas- quiero comprarle ese peluche a Jeong- apuntó con el dedo a una tienda de regalos que teníamos al frente, era como una niña pequeña cuando quiere algo.

-¿Tienes dinero, Sana?- preguntó el amor de mi vida.

-Obviamente, permiso- entró a la tienda mientras batía su cabello, todas la mirábamos de lejos algo asombradas por su actitud.

-Ni yo soy así de diva- Nayeon la siguió también batiendo su cabello, no cualquier diva le hace competencia.

Dahyun, Mina y yo solo reímos y seguimos a las divas que se nos adelantaron a la tienda. Dahyun fue en busca de Sana y Nayeon, mientras que Mina y yo paseábamos por los pasillos de la tienda viendo los peluches en exhibición.

-¡Minari ven a ver esto!- a veces me comporto como una niña cuando algo llama mucho mi atención- un puingüinito- tomé el peluche que había señalado y lo abracé fuerte, de cierta forma el peluche y Mina tenían un parecido.

-¿Por qué me miras así?- detallé a Mina y al peluche, se parecían bastante.

-Se parece a ti- solté una risita nerviosa bajando la cabeza, me daba vergüenza comparar a Mina con un animal, pero es un animal muy tierno y lindo como ella.

-Mi amor- río- me gusta que me compares con este tierno animalito- con suaves movimientos llevó mi cabeza a su lugar y plantó un beso en mi labios.

-¿En serio?- aún me sentía apenada.

-Mira, para que estés tranquila y no creas que eres la única que compara personas con tiernos animalitos- tomó mis manos y se acercó a mi oreja- eres el tigresito más tierno que he visto- su voz tan suave y delicada hizo que me estremeciera, y más si me hablaba tan cerca.