Oreo «Yoonmin»

05

Esa misma noche: Narra Min Yoongi

-¡Jimin!- chillé lo más bajo posible para que no escuchara mi bica en todo el cine. Se suponía que no podía hacer ruido, obviamente. Pero Jimin mantenía su mano en mi rodilla y cada vez que pasaba alguna cosa o escena que diera miedo en la película, agarraba mi rodilla con sus uñas y de verdad dolía.

No puedo decir que es un dolor de esos que te haría llorar o quejarte. Sino que uno algo excitante si lo sientes por un buen rato. Sus uñas me arruñaban por encima de la tela de mi ropa, dejandome sin mas opción que admitir que me ponía los pelos de punta cada vez que lo hacía.

Eso no era el caso, sino que también sus manos algo pequeñas me parecían tan tiernas y fragiles mientras se arrastraban. Tan mías...

Todos nosotros estabanos en las filas de atrás. Las mejores sillas del cine, o asi era como nosotros lo veíamos. Primero estaba sentado el felíz Hoseok, el algo controlador de Jin, el poeta Namjoon, el raro Taehyung, el algo más raro que Tae Jungkook, yo y mi pequeño Jimin.

Me senté entre JungKook y Jimin para que no se hablaran o ni si quiera se miraran durante la película. Me he dado cuenta con el tiempo que este chico se le queda mirando a Jimin de una manera muy extraña. Aveces observa a Jimin con una sonrisa y luego me mira a mi con odio. No le he hecho nada malo a él como para que me observe así, de verdad me molestan esas miraditas algo extrañas e inocentes.

Pero por otro lado Taehyung es lo contrario a él. Taehyung puede ser extraño pero, es cariñoso cuando quiere, y más con Namjoon. En estos días he estado observando mucho, y de verdad que ellos dos se llevan muy bien. Aveces almuerzan juntos y pasan el rato. Al menos Taehyung disfruta mucho con Nam pero, cuando está con JungKook parace nervioso, tenso y más raro de lo normal. Me han dicho que después de estar un día con JungKook Tae regresa a la escuela algo adolorido y con algunas vendas en su cuerpo. El comentario me pareció interesante, y descubrí que era cierto la semana pasada.

Pude notar un tipo de vendado en su piel  en una de las reuniones del grupo y decía que se había caído de una bicicleta, lo cual me pareció una gran mentira bajo mis narices. Parecía algo demasiado de serio para ser un simple raspón.

No es que me preocupe mucho y me meta en lo que no me incumbe. Es sólo que JungKook me parece un problema, una amenaza o un reto. Estaré alerta, no quiero que nada malo pase, con Jimin ni conmigo.

Estabanos Jimin y yo delante del cine. Los demás se habían ido a sus casas antes que nosotros. Jimin mantenía su sonrisa suave y tierna en sus gruesos labios, mientras caminabanos hacia el estacionamiento.

-Es muy tarde Jimin- me acerqué a mi auto con mis llaves en mano y le abrí la puerta a él para que se adentrara en el, luego me monté yo al vehículo para encenderlo.

-Son las 10:30 p.m. mamá estará preocupada. Creo que le mandaré un mensaje de que ya salimos- su celular permaneció encendido entre sus dedos, a lo que salíamos de ese silencioso lugar y llegabanos a casa.

El camino estaba muy oscuro, sino fuera por las luces del auto, no podría ver la carretera. Pasamos por muchas tiendas, negocios y hasta vecindaríos que decoraban con luces sus exteriores. Todos estaban solitarios y sin ningún cliente a este hora. Tsk, ni que fuera el día de brujas para estar acostandose a esta hora.

El camino se había vuelto aburrido, teníanos las ventanas y puertas cerradas, la radio estaba en un completo silencio, hasta que pasamos por un edificio abandonado. Me habían contado que la empresa que estaba ahí antes era algo extraña. Se encargaban de organizar todo tipo de negocios e información, sabían todo sobre Corea. Era algo famosa y funcionaba muy bien, hasta que descubrieron que él hijo del jefe de esa empresa lavaba dinero y otras cosas más. Fue una pena su cierre.

Mi madre me lo había contado ya que salió en las noticias y para esos tiempos era un adolescente.

-Es muy grande para estar abandonado, ¿No crees amor?-pregunté mientras pasaba lentamente por ese lugar. Jimin apagó su celular y miró el edificio.

-Se ve muy aterrador, cariño. ¿Puedes conducir más rápido?-mordió su labio mientras los dos mirabanos alrededor. El lugar estaba tan solitario y viejo, o al menos, nosotros lo veiamos así.

-¡Y-Yoongi! ¿¡Acaso ese es JungKook!?-detuve el auto rápidamente al escuchar eso, mi respiración se volvió iregular al fijar mi mirada en los alrededores y ver a Jeon en una esquina de concreto con otro hombre, parecían estar hablando algo serio por las expresiones lejanas que tenían en sus rostros.

-¿Que carajos hace en este tipo de lugar?- fruncí el ceño y Jimin chilló aterrorizado.

-Él dijo que se iría a casa y ahora está aquí. Oh Hyung, ya vamonos. Esto da miedo- El otro hombre que estaba con Jeon tenía el cabello de color rosado, era alto y algo fuerte. ¿Porque estaría hablando con un chico como Jeon?

No creo que fuera un amigo de él, jamás lo había visto en la universidad ni nada parecido. JungKook reía cada vez que el rosado hablaba y movía sus manos en forma de expresarse mejor. De momento el chico rosado dejo de hablar y recogió un bolso que había en el suelo entregarselo a Jungkook, los dos mantuvieron una sonrisa al a ver cumplido con esa acción.

Luego miraron hacia mi auto, creo que aunque sea negro notarón que estababos observandolos. Tragué saliva y me sentí algo paralizado cuando las pupilas de esos dos sujetos no dejaban de analizarnos.

-¡Vamonos! ¡Vamonos!- gritó Jimin mientras movía sus manitas con nervios. Pisé el acalerador del auto rápidamente y arrancamos hacía nuestro camino más luminoso y lejos de ese edificio. Por suerte nadie nos siguió, o eso fue lo que vi por el espejo retrovisor. Pero...¿Porque JungKook o dijo que iría a otro lugar y mintió? ¿Que le dieron en ese bolso?, esas preguntas estaban rondando por mi cabeza que estaba algo confusa.

¿Esta escondiendo algo del grupo?