Estaba tranquilo leyendo "Las ventajas de ser invisible",en mi sofá color bordo favorito,bajo la tenue eliminación de una lampara sobre una mesita color caoba. Todas las semanas venia a este espacioso lugar lleno de altas y anchas estanterías repletas de libros que moría por leer.
Para ser honestos mi perfil no daba pinta de venir a este lugar,vestía con vans,remeras con dibujos como calaveras o lisas,leggins ajustados negros,poseía bastantes tatuajes y algunos días como no tenia ganas ni siquiera me afeitaba,lo que me daba un look un toque mas de "chico malo".
Es mas,ninguno de mis amigos tenia ni remota idea de que yo venia aquí,ellos pensaban que no tocaba un libro ni por casualidad Y es que nunca hacia los deberes que me mandaban en la universidad,simplemente me parecía insulsa y aburrida.En cambio yo podía elegir un libro y leer sobre algo que me gustara.
Levante mi mirada del libro luego de escuchar como una silla era arrastrada en el inminente silencio de la biblioteca. Me quede hipnotizado,mi vista quedo clavada en esas largas y delgadas piernas envueltas en ese skinny jean,eran perfectas. Mis ojos se dirigieron a la parte de arriba del cuerpo,pero sorprendentemente no podía descifrar si era un hombre o una mujer ya que llevaba una campera abultada con capucha que cubría su cabeza y rostro,sin mencionar que además estaba de espaldas.
La persona "piernas perfectas" dio unos pasos hacia atrás y se sentó en unos de los pequeños sofás y dio inicio a su lectura.
Trate de concentrarme y volví la vista a mi libro. Hice un esfuerzo sobrehumano pero falle rotundamente,volví a mirar al joven y casi se me sale la mandíbula. Cruzo sus piernas,así es,como lo hacen las mujeres.Esa pose era la mas sexy y provocadora que había visto.
Luego de un rato se levanto de su asiento y fue hacia donde estaba la bibliotecaria,le dijo algo que desde mi distancia era obviamente indescifrable y se marcho. Después de su partida no pude seguir leyendo,simplemente no me concentraba, así que me fui para mi casa.
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Mire mi reloj,las tres y media de la tarde,a las cuatro debía ir para mi trabajo que gratamente quedaba enfrente de la biblioteca. Trabajaba en un Starbucks,no era el mejor trabajo del mundo,menos cuando los clientes se impacientaban o eran groseros, pero me servía para ganar algo de dinero y ser un poco independiente de mi madre. Busque el libro que esta leyendo ayer,pero no lo encontré por ninguna parte.
-Marion-La bibliotecaria despego la vista de la computadora-No sabes si esta "Las ventajas de ser invisible" ?-La mujer dio unos cuantos vistazos a su pantalla y volvió su vista a mi.
-Lo siento Louis alguien ya se a llevado el libro-Suspire frustrado y le di las gracias a Marion.
Considerando que no había mas nada que captara mi interés para leer,decidí ingresar a mi empleo mas temprano.
Me saque la chaqueta, salude a mis compañeros,me puse mi típico delantal verde con la placa que decía mi nombre y me coloque en frente de la caja a realizar mi labor.
La tarde transcurrió como siempre, con bastante gente con variados tintes de humor,ya eran las seis asi que ya no llegaban tanto clientes.