To All The...Boys?... I've Loved Before // (Warmi)

3.

Las letras han salido a la luz. No puedes hacer nada. Menos mal que la de Agoney tenía la dirección del campamento. Nunca sabrá lo hecha polvo que estabas después de aquel partido. 

-Relájate- le miré mientras sonreía -Sé que me quieres-.

-Quería, en pasado-.

-Estás con Miriam-.

Su silueta se movió a mi cama.

"Querido Roi:

Me quedo despierta por la noche y me imagino acariciando tu pelo. Sintiendo tus fuertes brazos..."

-Cállate- agité la cabeza -No eres real- miré por la ventana y vi al verdadero Roi.

-Para ti, soy más real que él-.

Escuché el timbre. Mierda.

-¿Qué haces?- salté un poco del susto y miré a Aitana en mi puerta confundida.

Suspiré -Nada-.

-Ana, ha venido Roi- escuché a mi padre, abrí los ojos  y miré a Aitana. 

-No me has visto-.

Quizás debería enfrentarme a la situación de una vez, hablar con él, el de verdad, y decirle todo lo que siento ahora. Ser valiente y afrontar lo ocurrido. 

Pero eso no iba a pasar. 

Abrí la puerta de mi cuarto sin hacer ruido. Miré hacia los lados para ver que no había nadie e intentando ser lo más sigilosa posible fui hacia la entrada. Aunque ser sigilosa nunca que se me dio bien. Me tropecé con la esquina del sofá y terminé en el suelo. Genial.

-Ay-.

Me levanté lo más rápido que pude y salí de casa. Cogí mi bici del garaje y me dirigí a mi sitio favorito, un bar restaurante en el que hacían los mejores batidos de Madrid. Llevaba yendo allí desde que nos mudamos hace años. Una vez allí me pedí una cocacola sentándome en la barra. La mujer que llevaba el bar,  María, me conocía desde siempre. Alguien se sentó también en la barra.

-Hey, Anita- miré y era Mimi. Miré al frente haciendo como que n estaba ahí. María apareció del almacén.

-Hombre, ¿qué le pongo a tu amiga?-

-No viene conmigo-.

-Un batido de vainilla, por favor-.

-Claro, ahora te lo pongo- María se fue a la cocina y la rubia no paraba de mirarme pero no decía nada.

-¿Qué haces aquí?-.

-¿Qué quieres decir? Sólo he venido a tomarme uno de esos batidos de vainilla-.

-Guay-.

-Bueno, también he pasado por tu casa y tu hermana me ha dicho que seguro que estarías aquí- bajé mi mirada al vaso -Quiero ser super clara-.

-Vale- la miré prestándole atención.

-Me siento halagada, pero... Shana y yo acabamos de cortar-.

-¿Me estás dando calabazas?-.

-Eh..si, la primera vez ¿te acuerdas? No pareció quedar claro-.

La paré antes de que siguiera -Mimi Doblas, no intento salir contigo-.

Se acercó -Vale, dices una cosa pero luego dices otra distinta-.

-¿Qué?-Ahora si que estaba confusa. María apareció detrás de mi con el batido en la mano y se lo tendió a Mimi.